“Este no es el ministerio de la verdad, no es tampoco en absoluto la Gestapo de la información, lo que me resulta particularmente doloroso porque buena parte de mi familia fue asesinada en el Holocausto”, dijo Mirian Lewin, la titular de la Defensoría del Público de la Comunicación Audiovisual, en diálogo con Infobae. El lanzamiento de NODIO, el observatorio de la desinformación y la violencia simbólica para “proteger a la ciudadanía de las noticias falsas, maliciosas y falacias” provocó inquietud en la opinión pública, y la periodista que en junio reemplazó a Rodrigo “Rodra” Rodríguez, dirigente vinculado a Máximo Kirchner, buscó apaciguar las aguas.
Agregó que "tal vez es mejor no hablar de observatorio, porque nosotros no tenemos ninguna potestad sancionatoria. Quizás es mejor presentar a NODIO como un centro de estudios que procura promover el derecho a la comunicación y a la libre expresión, porque cuando uno se pronuncia violentamente discriminando con un discurso misógeno, homofóbico, de odio contra los migrantes, promoviendo la discriminación, está limitando los derechos de población vulnerable”.
Las precisiones de Lewin son pertinentes. De los 215 observatorios de medios que existen en el mundo, solo 7 fueron impulsados por el Estado. Es el caso de países como -por ejemplo- Nigeria, Malasia y, por supuesto, Venezuela. El país gobernado por Nicolás Maduro no solo tuvo un Ministerio Popular de la Verdad, sino que también aprobó en noviembre de 2017 una Ley Constitucional contra el Odio, por la Convivencia Pacífica y la Tolerancia, conocida como la “Ley contra el Odio”, que estableció penas de 20 años de cárcel, cierre de medios de comunicación y multas a empresas y medios electrónicos.
La Defensoría del Público es un organismo creado hace 11 años por la Ley de Comunicación Audiviosual y depende de la Comisión Bicameral de la Comunicación Audiovisual, cuya presidenta es la diputada Gabriela Cerruti y su vicepresidente es el senador Alfredo Luenzo, ambos kirchneristas. La oposición recién está representada en la secretaría de la Comisión por la diputada radical Karina Banfi. Siendo un organismo de control, la presencia del oficialismo tiene un peso excesivo no solo en las autoridades sino también en los cargos de la Bicameral, ya que 9 están en manos del Frente de Todos y apenas 6 en la oposición.
La Defensora del Público aseguró que quienes participaron del lanzamiento de NODIO no serán parte del observatorio. La difusión del observatorio así lo hizo suponer, pero por pedido de los convocados, esa comunicación luego lo expresó más claramente. Así, María Seoane, Adriana Amado, Jorge Alemán y Damián Loretti solo dieron “una charla” sobre el impacto de las fake news en el debate público, en ocasión de la presentación de NODIO. Florencia Saintout, en cambio, podría incorporarse a una responsabilidad más formal.
Lewin también aclaró que no hay un presupuesto específico para el desarrollo de lo que, finalmente, sería un centro de estudios. “No se trata de un organismo nuevo, no tiene presupuesto, no es un ente que vaya a requerir nuevos fondos del erario público y se manejará con el personal que ya está en la Defensoría”, explicó. Y dijo que sí habrá un consejo asesor. Pero "no saldrá de un diálogo que vamos a tener con las plataformas, con las universidades y con los organismos de la sociedad civil, no elegimos a dedo quiénes van a integrar el consejo asesor”.
Para el 2021, el Presupuesto que tiene la Defensoría del Público de Servicios de Comunicación Audiovisual de la Nación es de $ 255.698.058 y una planta de 139 cargos, de los cuales 211.384.529 se van en sueldos del personal. Y como fue creada por la Ley de Servicios Audiovisuales, que explícitamente no incluyó las redes sociales dentro de órbita, los medios que están incluidos en su control son la radio, la televisión, los medios gráficos online y gráficos en papel.
La diputada Banfi anticipó que presentará un pedido de informes para que oficialmente se conozcan los objetivos de NODIO, quiénes serán los integrantes y bajó qué metodología elaborará los contenidos. Y anticipó que su postura es clara al respecto: “la única forma de proteger a la ciudadanía de las informaciones falsas es a través del acceso a la información pública”.
Al respecto, aseguró que “contrariamente a lo que se cree, es más fácil que un político o un funcionario de información falsa, como hizo el Presidente cuando mostró filminas con datos falsos de países y provincias, o cuando dijo que el coronavirus no se transmitiía a través del mate o el té”. “Los periodistas, dijo, están más acostumbrados a chequear, y cuando no lo hacen, hay otras maneras de que el público pueda ejercer sus derechos ante la justicia”.
Lewin, finalmente, quiso destacar en el diálogo con Infobae que “otra iniciativa que impulsamos desde la Defensoría, tratar de disciplinar a las mujeres, tratar de agredirlas por su aspecto físico, por sus consumos problemáticos, por las formas que se viste, por su capacidad de ser madre o no. Creo que es algo definitivamente tóxico para la democracia, yo promuevo y reafirmo mi compromiso con la libertad de expresión, la libertad de opinión y la pluralidad de voces”.
Seguí leyendo: