La situación en la toma de las 100 hectáreas de Guernica se terminó de tensar. Los grupos de izquierda y algunas organizaciones que lideran la usurpación han conseguido que las negociaciones se “estanquen”. Tanto es así que el abogado y ex montonero Roberto Perdía oficia de interlocutor entre el gobierno de Axel Kicillof y los más intransigentes. Has 48 horas, como adelantó Infobae, había fracasado el encuentro entre las partes. Los representantes de los cuatro barrios 9 de Julio, San Martin, La Lucha y La Unión, dinamitaron todo intento de acercamiento. Hasta llegaron una hora más tarde a la reunión en la Municipalidad de Presidente Perón. “Hasta acá llegamos. La Gremial de abogados ya no puede avanzar más. Desde la gobernación nos dijeron que se terminaron las negociaciones. Desde lo jurídico ya hicimos todos, ahora deben resolver en la toma que quieren hacer. Nosotros estamos para apoyar esa decisión", le dijo a este medio María del Rosario Fernández, integrante de la Asociación Gremial de Abogados y Abogadas de la República Argentina.
La reunión, llevada a cabo en la intendencia de Presidente Perón, estuvo encabezada por el subsecretario de Hábitat, Rubén Pascolini. Volvió a poner sobre la mesa terrenos con servicios, traslados para las familias que no son de Guernica en sus distritos de origen y reubicaciones. Pero una vez más los delegados de la usurpación no aceptaron. Proponen seguir en la toma durante los 6 meses que demandaría urbanizar los lotes para el traslado a viviendas dignas.
Ese punto no es negociable ya que la orden de desalojo del juez Martín Miguel Rizzo, que tiene el visto bueno de la segunda instancia judicial, no lo permite y tiene como fecha límite el 15 de octubre y se podría extender, en caso de ser necesario, hasta el 30.
Sergio Berni, el ministro de Seguridad bonaerense, ya tiene prevista la logística para llevar adelante el desalojo si finalmente la justicia así lo indica. Más de 500 efectivos, cuatriciclos y caballos.
Después de esa fallida reunión, el ex líder guerrillero, que también integra la Gremial de abogados que representa a los usurpadores imputados en la causa, se comunicó con Pascolini. El diálogo fue ameno. De hecho, Perdía, como también lo hace Fernández, comprende que el Estado provincia hizo todo para llegar a una solución pacifica, es decir un desalojo voluntario.
El ex montonero valora que los funcionarios de Kicillof, a diferencia de otros gobiernos, dialogan e intentan llegar a un consenso para llegar a una resolución pacífica. “Nosotros aspiramos a lo mismo, un desalojo voluntario de los compañeros y compañeras”, coincidió Perdía durante la conversación.
Sin embargo, los grupos de izquierda más radicalizados que parecen liderar la toma y que hasta amenazaría a las familias que quieren acordar con el gobierno su salida de la toma, parecen no valorar la apertura demostrada por los funcionarios bonaerenses.
Pascolini le explicó a Perdía que ya se agotó la primera de las dos semanas de prórroga que otorgó el magistrado y que ya no había nada más para ofrecer, aunque las puertas estaban abiertas para escuchar nuevas soluciones y le adelantó lo que sucedió ayer, Andrés “Cuervo” Larroque, el ministro de Desarrollo de la Comunidad se instalaría en el ingreso de la toma con los gazebos blancos y continuarían con el censo voluntario sobre las 500 familias que ya aceptaron la propuesta de los funcionarios.
Horas después, la Asociación Gremial de Abogados y Abogadas, presentó un documento llamado “informe final de Guernica”.
Allí explican, palabras más, palabras menos, lo que Perdía le trasmitió a los funcionarios de Kicillof, entre ellos Larroque, a los largo de sus conversaciones como mediador.
“El trabajo que le fuera encomendado a la Gremial está llegando a su fin y entendemos que hemos realizado todo lo que estuvo a nuestro alcance y muchísimo más para aportar tanto a la justa Resistencia de la gente, como a colaborar con las organizaciones sociales y políticas que confiaron en nosotros y nos encomendaron la defensa de Guernica”, comienza el documento.
Después de resumir la tarea judicial que encararon en defensa de los imputados por la toma, recuerdan que “hicimos una propuesta concreta, técnica, específica, que fue elaborada con compañeros especialistas que colaboraron con nosotros” y que “se trataba de una propuesta que intentaba poner fin al conflicto de inmediato”.
Enfatizan que “debimos pasar el mal trago de escuchar cara a cara a al intendenta del PJ (Blanca Cantero) decirnos que ella ‘velaba por los 18 countries’ o corrernos con su aparato afirmando que cuando ella asumió (la intendencia de Presidente Perón) ‘sacó a los fiscales de la administración anterior y puse a los míos’”.
El documento reconoce: “Vimos con reservas, pero con agrado y esperanza que los funcionarios del Gobierno de la Provincia dejaban de lado algunos duros planteos iniciales para realizar propuestas más específicas que implicara la obtención concreta de tierras, sea en Guernica, sea en lugares muy cercanos. Y en esta situación estamos actualmente, las partes discutiendo, y la Gremial intentando acuerdos”.
Sobre el final, los letrados destacan los que Perdía y Fernández ya habían expresado: “Esta vez sí, hasta aquí llegamos. La Gremial de Abogados y Abogadas sigue a disposición de las organizaciones que nos designaron y esperaremos sus decisiones. Los que tienen la responsabilidad directa de alcanzar acuerdos o plantear desacuerdos no somos la Gremial de Abogados y Abogadas. Lo nuestro sigue estando en los expedientes judiciales y en las medidas planteadas para suspender los desalojos o si es posible evitarlos para siempre. Aportamos a los que luchan, los defendemos con uñas y dientes, y ponemos todo lo que tenemos en esas defensas como lo hemos demostrado con creces. Pero no reemplazamos a las organizaciones que pelean, ni las conducimos".
Mientras todo esto ocurría, en La Plata, numerosas columnas formadas por organizaciones de izquierda como el Polo Obrero, Movimiento de Unidad Latinoamericana por el Cambio Social, el Frente de Organizaciones en Lucha (FOL), Víctor Choque, un sector de Barrios de Pie, el MST y la Corriente Darío Santillán, entre otras, se manifestaban frete a la casa de gobierno.
Solicitaban que Kicillof los reciba de manera urgente y gritaban consignas en contra del desalojo de Guernica.