El microcentro porteño volverá a a ser este martes el escenario de protestas, cuando manifestantes y actividades sindicales se movilicen por las calles neurálgicas de la Ciudad de Buenos Aires con caravanas y marchas en la zona del Obelisco y el Congreso.
La convocatoria central es impulsada por la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), liderada por el secretario general Hugo Godoy, que realiza esta semana un paro nacional en rechazo al aumento paritario del 7% definido entre el Gobierno y el sindicato Unión Personal Civil de la Nación (UPCN) para los trabajadores estatales.
A la jornada callejera se le sumaron dos sectores pertenecientes a la salud y la educación, a través de la Federación Sindical de Profesionales de la Salud (Fesprosa) y la Confederación Nacional de Docentes Universitarios Histórica (Conaduh).
"El Gobierno ofreció un 7% en una sola cuota para lo que resta del año y fue rechazado por insuficiente. Las negociaciones se reanudarán en diciembre”, dijo Godoy.
Además de la huelga, las acciones colectivas incluirán movilizaciones, desconexiones y asambleas que concluirán en una caravana desde el Obelisco hacia el Congreso de la Nación. Asimismo, por la tarde está prevista una manifestación de la Izquierda en rechazo a la misión del FMI que llegó a la Argentina.
Otra de las protestas contra el acuerdo de la paritaria estatal se iniciará en el Hospital Garrahan para luego sumarse a Plaza de Mayo, según definió el sindicato que nuclea a los profesionales y técnicos del centro de salud. En esa clave, reclamó un “petitorio para llegar a un aumento que compense el 65% de pérdida de los últimos años para alcanzar un mínimo de 72 mil pesos”.
La discusión salarial estatal
La protesta fue decidida el miércoles último por el plenario nacional de delegados de la ATE, en el que participaron 354 representantes de base de la mayoría de las provincias, quienes convocaron a “una jornada nacional de lucha”.
Sindicalistas de la ATE y de UPCN, encabezado por Andrés Rodríguez -que aceptó la propuesta oficial- se habían reunido en las dependencias laborales sobre la avenida Callao al 100, en el contexto de la paritaria nacional estatal, ocasión en la cual el Gobierno otorgó una mejora del 7% para octubre.
Para Godoy, los trabajadores estatales ya perdieron más del 15% en un año y, en 2020, la inflación estimada rondaría el 35%, por lo que haber convalidado esa negociación paritaria hubiese significado una “reducción salarial”, afirmó Godoy.
La titular de la Fesprosa María Boriotti aseguró que el incremento decretado para los estatales y médicos “es un verdadero techo de plomo y no se condice con los miles de millones que irán a engrosar las arcas de los sojeros, los industriales y otros exportadores”.
La dirigente sostuvo que la Fesprosa convocó a la protesta por “salarios dignos, trabajo decente y protección a los trabajadores de la actividad”, y explicó que el sector partirá a las 11 en caravana desde el Obelisco hacia el Parlamento.
El secretario general de UPCN, Andrés Rodríguez reconoció que la suba del aumento salarial es escueta en función del poder adquisitivo con una "pérdida salarial desde 2018″. "Estamos negociando con tendencia a la baja porque no hay otra realidad, no porque queramos hacerlo”, definió en FM Futurock.
Mientras tanto, el cotitular de la CGT, Héctor Daer, se refirió a las paritarias del sector privado luego del encuentro que mantuvo con el ministro de Economía, Martín Guzmán.
“Reivindicamos la negociación paritaria como una negociación responsable y transparente en cada uno de los sectores, porque no todos tenemos el mismo punto de partida salarial, y eso amerita que no haya una medida universal", puntualizó sobre la reunión que encabezó el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero.
Seguí leyendo: