El Gobierno envió hoy al Senado el convenio de transferencia de la Policía Federal que Mauricio Macri había preparado para aprobar por ley pero, finalmente, decidió sacar por Decreto. Lo que hizo Alberto Fernández fue cambiarle los fundamentos y le agregó los artículos que le interesan al Frente de Todos en su ofensiva contra Horacio Rodríguez Larreta. A saber, el artículo 2º y artículo 3º, que reducen los ingresos a CABA por el traspaso y estipulan en forma genérica que serán enviados a través de cuotas que se determinarán posteriormente.
En concreto, se trata del proyecto “Convenio de Transferencia Progresiva de facultades y funciones de seguridad en materias no federales ejercidas” firmado entre el Estado nacional y el Gobierno de la CABA el 18 de enero de 2016 para dar cumplimiento a lo establecido en artículo 75 inciso 2 de la Constitución Nacional, que establece la necesidad de determinar en forma equitativa y justa los recursos para afrontar esas facultades.
El artículo 2 del texto reconoce que este año el gasto asignado a la Policía de la Ciudad fue de 24.500 millones de pesos. A partir de esto, establece que será el piso que se girará desde Nación y determina una fórmula para su futura actualización: Será actualizado en los ejercicios sucesivos de acuerdo a un índice compuesto en un 80% por el índice nominal del salario promedio de la Policía Federal y en un 20% por el índice de precios al consumidor (IPC) elaborado por la Dirección General de Estadísticas y Censos de dicha jurisdicción, ambos correspondientes al año precedente".
Explica el Poder Ejecutivo en el proyecto enviado hoy que no se envió ese Convenio al Congreso, sino que el traspaso se realizó por decreto Nº 194 al 18 de enero de 2016, que incrementó el porcentaje de asignación de fondos a CABA elevando el porcentaje de asignación a 3.75%, “sin brindar argumentos o justificación que dieran cuenta de cómo se arribó a ese porcentual, ni los fines a los que se destinaría”.
No alcanzó, según el texto del proyecto, que el decreto haya sido aprobado por el Consenso Fiscal, ya que la asignación de recursos no fue realizada bajo “una tendencia redistributiva” correcta y se especifica que “la modalidad que aquí se propicia es la determinación del monto requerido para su atención y su inclusión en la ley anual de presupuesto general de la Administración Nacional".
Por eso, para corregir y superar la situación de “desigualdad carente de fundamentos razonables” generada por los decretos 197/16 y 257/18 que impusieron a la Nación de un monto que superaba con crece el costo de los servicios transferidos", “entendemos que este proyecto de ley permitirá adecuar el traspaso de las facultades y funciones de seguridad en materias no federal a los principios de la coparticipación que enuncia el artículo 75 inciso 2 de la Constitución Nacional”.
Finalmente, en el artículo 5º asegura que "a partir de la entrada en vigencia de la presente, el Poder Ejecutivo Nacional realizará la readecuación de la participación que le corresponde a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires por aplicación del artículo 8º de la Ley Nº 23548 (de coparticipación federal) y sus modificaciones, conforme a lo dispuesto por el artículo 2º del Decreto Nº 735/20ª (el que firmó Fernández recortándole los fondos automáticos de coparticipación).
Lo que hace el Gobierno es dejar abierta una negociación con Rodríguez Larreta. Por lo que trascendió en Casa Rosada, existe la expectativa en el oficialismo de que el jefe de Gobierno porteño acepte acompañar el cambio de la fórmula previsional que ya está lista, y donde el Frente de Todos no quiere concentrar el costo político. Juntos por el Cambio tiene posición tomada al respecto: respaldar el regreso a la fórmula que ellos impulsaron en el Congreso en el 2017.
En el Congreso se asegura que la secretaria Legal y Técnica, Vilma Ibarra, trabajó en este proyecto que enviaron al Senado. “Es una experta en la legislación que afecta a la Ciudad de Buenos Aires y es un tema que le interesa especialmente”, aseguraron, ya que fue una funcionaria clave de la gestión de Aníbal Ibarra.
Trascendió, finalmente, que Rodríguez Larreta está muy preocupado por la ofensiva que viene padeciendo y empezó a buscar asesoramiento político. Ayer se reunió con el auditor nacional Miguel Angel Pichetto, ex senador y candidato a vicepresidente de Mauricio Macri, experto en resistir al kirchnerismo y con altos contactos en el mundo de la justicia.
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