Más allá del rechazo que tuvo del Ministerio de Educación de la Nación para habilitar la apertura paulatina de escuelas en la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta le presentará a Alberto Fernández un menú de otras actividades que quiere abrir en la nueva etapa de la cuarentena por el COVID-19 que comenzará a regir la semana que viene.
Aún no está confirmado un encuentro del Presidente con el jefe de Gobierno porteño previo al anuncio y analizan la posibilidad de verse directo para el día del anuncio. Rodríguez Larreta, a diferencia de otras oportunidades, llega a esta definición de una nueva etapa de cuarentena con fuertes fricciones con el Gobierno no sólo por el rechazo a la apertura del aislamiento en escuelas sino también por las críticas que hizo el jefe de gobierno porteño a la reforma judicial que promueve Alberto Fernández.
Con 87.569 casos confirmados y una curva de contagios que se mantiene en los 1.200 casos promedio por día, la administración de la ciudad de Buenos Aires cree que está en condiciones de avanzar ahora hacia una cuarentena más flexible.
En este sentido, allegados a Rodríguez Larreta confirmaron a Infobae que entre los reclamos que planteará a Casa Rosada se incluirá la apertura de bares y restaurantes con atención exclusiva al aire libre y con el distanciamiento social que rige por protocolo. Esto debe ser refrendado por el Gobierno en coordinación con el Ministerio de Salud y la Jefatura de Gabinete.
También está en la lista que llevará el jefe de Gobierno porteño a la Quinta de Olivos la apertura de obras en construcción de menor escala o aquellas que se estén por terminar pero que no impliquen un gran movimiento de trabajadores.
No está previsto, al menos por ahora, el pedido de Rodríguez Larreta de gimnasios o clubes para realizar deportes grupales. Ya habilitó deportes individuales y la actividad de los runners.
Por otra parte se supo que el esquema de transporte público de pasajeros en el AMBA se mantendrá como hasta ahora. Es decir, seguirán con permisos para viajar aquellos trabajadores esenciales o los que presenten una excepción para viajar no mayor de las 24 horas.
Es que en el Ministerio de Transporte nacional que lidera Mario Meoni dijeron a Infobae que el flujo de pasajeros en el AMBA se mantuvo “muy controlado” en esta etapa de cuarentena y creen que eso debería seguir igual.
Según el reporte de anoche del Ministerio de Transporte, anteayer circularon en el AMBA 1.143.557 personas, esto es, un 73% menos de gente que transita subtes, trenes y colectivos que un día normal antes del decreto de cuarentena del 19 de marzo.
El último lunes hubo una baja del 63% del promedio de pasajeros por colectivo en comparación con un día hábil promedio previo al aislamiento, mientras que los colectivos se redujeron solo un 30% comparando el mismo período.
No obstante, el último reporte mostró que, en promedio, un 29% de usuarios utilizaron el transporte público el último fin de semana en comparación con un fin de semana promedio previo al aislamiento. Aquí se vio un aumento de pasajeros en comparación con otros fines de semana. Mientras que el promedio de pasajeros en el AMBA era de unas 450.000 personas en el transporte público los fines de semana, el 22 de agosto hubo 791.209 pasajeros, la cifra mayor de gente que circuló en el transporte del AMBA.
Como alternativa al uso del transporte público en la Ciudad, Rodríguez Larreta ya inauguró 17 kilometros de ciclovías en las últimas semanas que se suman a los circuitos en bicicleta que ya estaban pautados como una manera de instar a los porteños al uso de ese vehículo y descomprimir así el uso de subtes o colectivos.
Por todo esto, Rodríguez Larreta coincide con el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, y las autoridades nacionales en que el esquema de controles en estaciones y paradas de colectivos no debería modificarse desde la semana que viene. Tampoco el régimen de permisos para trabajadores esenciales.
Sin embargo, hay un cortocicuito fuerte del gobierno porteño con la administración nacional en torno a la apertura de las escuelas. El ministro de Educación, Nicolás Trotta, rechazó la propuesta porteña de habilitar 637 gabinetes digitales. Estos espacios buscaban que los alumnos que no pudieron continuar durante estos meses de pandemia con su escolarización tuvieran un lugar con todos los elementos para retomar las tareas.
Trotta fundamentó su decisión señalando que 15 de los 25 puntos que presentó la ministra porteña Soledad Acuña estaban “incompletos” y, además, resaltó que no están dadas las condiciones epidemiológicas en la Ciudad para que regresen esos chicos a las aulas como tampoco para que el personal docente esté presente dictando clases. Esta apertura ya había sido rechazada por algunos gremios docentes de la Ciudad.
En tanto, desde el gobierno bonaerense que lidera Kicillof se oponen a una apertura de actividades en la nueva etapa de cuarentena porque ven que ha crecido mucho el nivel de contagios. Con 223.704 casos de COVID-19 registrados hasta ahora en Buenos Aires, el gobernador se niega a dar mayor apertura en la nueva etapa del régimen de aislamiento.
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