La Corte Suprema de Justicia rechazó por unanimidad el recurso extraordinario presentado por Luis D’Elía contra la condena a tres años y nueve meses de prisión que le dictó el Tribunal Oral Federal 6 por la toma de la comisaría 24 de la Boca en el año 2004. De esta manera la condena quedó firme y no quedan recursos pendientes.
El máximo tribunal celebró este jueves su tradicional acuerdo de ministros, en otra jornada en la que no revisaron causas de gran trascendencia. Justamente, los integrantes de la Corte resolvieron esta mañana uno referido a la aplicación del artículo 280 del Código Procesal, es decir que la Corte no se expide sobre un tema, no lo trata, es una fórmula que preparan los secretarios y significa que el tribunal rechaza recursos extraordinarios sin entrar en su análisis.
En particular se resolvió un planteo de Luis D’Elía, que recurrió al tribunal mediante un recurso que no fue admitido mediante la aplicación de la fórmula del artículo 280. Muy lejos de lo que se esperaba ya que desde el anuncio de las posibles reformas sobre el Poder Judicial y la Corte Suprema, múltiples voceros oficiosos de la Corte difundieron estadísticas y noticias referidas a que habría decisiones relevantes de alto impacto político, pero no es lo que ha sucedido.
D’Elía fue detenido en febrero de 2019 cuando Casación rechazó el último planteo que lo mantenía en libertad. Así comenzó a cumplir la condena a tres años y nueve meses de prisión por la toma de la Comisaría 24.
El líder piquetero tiene 63 años y es un paciente coronario, diabético, revascularizado, con isquemia perinecrosis, que requiere tratamiento antiisquémico completo, con actividad física programada y control de estrés físico y psíquico. Integra sin dudas el definido como grupo de riesgo para contraer COVID-19. Debido a la crisis sanitaria por la pandemia de coronavirus y a sus condiciones de salud le fue otorgada la prisión domiciliaria.
Desde el 5 de abril pasado, el dirigente social cumple su condena en su domicilio. Dejó la cárcel de Ezeiza luego de que la Justicia entendiera que representaba un riesgo para los demás detenidos del penal. Había tenido que salir de la cárcel para hacerse estudios en una clínica en medio de la pandemia de coronavirus.
Se contagió de COVID-19 fuera de la cárcel, estuvo internado en el Sanatorio Otamendi y después de ocho días fue dado de alta. Siguió en cuarentena en su casa.
La toma de la comisaría 24 del barrio de La Boca ocurrió el 26 de junio de 2004 cuando D’Elía, entonces funcionario del gobierno de Néstor Kirchner, a cargo de la Subsecretaría de Tierras para el Hábitat Social, ingresó con otras personas a la seccional para reclamar por el crimen del dirigente comunitario Martín “Oso” Cisneros, asesinado por un vendedor de drogas de la zona. El caso se demoró durante años.
Recién en noviembre de 2017 terminó el juicio oral y D’Elía fue condenado por el Tribunal Oral Federal 6 a cuatro años de prisión por los delitos de atentado a la autoridad, lesiones leves a la Policía Federal, instigación a cometer delitos, privación ilegal de la libertad y usurpación. Luego Casación confirmó la condena y redujo la pena a tres años y nueve meses de prisión. Cuando el TOF 6 lo condenó, D’Elía atribuyó la decisión de los jueces a una “pura venganza oligárquica del macrismo” y prometió: “Volveremos, Cristina presidente, carajo. Patria o muerte, venceremos. Libertad a todos los presos políticos”.
D’Elía ya había estado preso en otra causa. Fue por la firma del memorándum de entendimiento con Irán. Estuvo detenido bajo prisión preventiva en diciembre de 2017 por orden del juez federal Claudio Bonadio. El caso pasó a juicio oral y en marzo de 2018 el Tribunal Oral Federal 8 lo excarceló.