Con elogios de radicales y peronistas a Ricardo Alfonsín, y sin el congelado pliego de Alicia Castro, la comisión de Acuerdos del Senado aprobó a los candidatos a embajadores políticos para España, Nicaragua y Hungría que el pleno del cuerpo podría votarse en la próxima sesión, que aún no tiene fecha.
El radical Ricardo Alfonsín, un crítico de la alianza Juntos por el Cambio que mantiene por eso distancia de las decisiones que toma la UCR, contó que tanto el presidente Alberto Fernández como el canciller Felipe Solá le pidieron que “profundicemos las relaciones con el Reino de España” y “que potenciemos las posibilidades que nos brinda para acuerdos que puedan beneficiar a ambos en materia económica, comercial, defensa, cultural, educación”. “Vamos a trabajar sobre la soberanía de Malvinas para ver si podemos lograr acompañamiento, España siempre nos ha acompañado en todos los foros”, recordó y también señaló que “la última vez que se trató este tema en la asamblea de Naciones Unidas fue en 1989 y ahora está en el comité de descolonización donde no está España”, pero se mostró confiado sobre el futuro al respecto.
“Voy a hacer todo lo que esté a mi alcance para llegar a acuerdos que beneficien a la Argentina, que representen un aporte en esta situación tan difícil, no dejaré de hacer nada, absolutamente nada”, prometió y agradeció “la confianza y la amplitud del Presidente para designar a un hombre que no es del oficialismo” para una embajada de la importancia que es la de España, uno de los principales socios comerciales de Argentina.
Jorge Taiana, ex canciller y presidente de la comisión de Relaciones Exteriores, dijo que para él es “un placer” que Alfonsín esté propuesto para ir a la embajada en Madrid porque “siempre he visto en él la puesta en valor del interés nacional y de los valores democráticos por encima de cualquier otra consideración”.
Después hubo roces entre el Frente de Todos y Juntos por el Cambio. Llamó la atención la ausencia de Luis Naidenoff, presidente del bloque radical y del interbloque opositor, dato que el jujeño Guillermo Snopek no dejó pasar por alto. “Extraña una gran ausencia”, manifestó y agregó que “para no marcar sus diferencias internas hoy no se encuentra y demuestra la falta de compromiso, institucionalidad, desprecio al diálogo y los consensos”.
Pero tanto Martín Lousteau, vicepresidente del cuerpo por la UCR-Evolución y Julio Cobos, vicepresidente del bloque radical, salieron rápidamente a respaldar al ex diputado e hijo del ex presidente Raúl Alfonsín en nombre del parido que presidió su padre. Incluso hubo bromas entre ellos y otros radicales, por el vino por ejemplo cuando el mendocino tomó la palabra después del riojano Julio Martínez que también elogió al candidato para España.
Lousteau puso paños fríos, rechazó los dichos de Snopek e intentó asumir un rol componedor como el que viene teniendo en distintas reuniones. Dijo que la designación de Ricardo Alfonsín le causa “un enorme placer, tanto desde lo personal como desde la representación que la Argentina va a tener” y lo calificó “como un hombre de honestidad intachable y de una calidad humana excepcional”. Y destacó que en el contexto de restricciones económicas “es una persona de una austeridad enorme”. “Alfonsín no es solo un hombre de la democracia, sino que lleva tatuado en la piel el interés nacional y un montón de cuestiones que los argentinos sentimos muy de cerca, tanto los derechos humanos como la defensa de Malvinas”, remarcó el porteño.
Por su parte, Humberto Schiavoni, presidente de la bancada del PRO, negó que Naidenoff no estuviera por no apoyar a Alfonsín. También lo excusó Cobos y en su representación expresó el apoyo de la UCR además de destacar que “hay que reconocer dos gestos: el del Presidente de convocar a una figura de otro espacio y el de Ricardo de aceptarlo. Las políticas de Estado se construyen desde distintos espacios”.
Además de los elogios y pedidos de otro senadores radicales, a Alfonsín le sacó una sonrisa el jefe del bloque del Frente de Todos, José Mayans, quien contó que se alegró con la propuesta, y adelantó el contundente apoyo de todo su bloque. “De tal palo tal astilla”, le marcó sobre él y su padre, mencionó al futuro embajador como “una de las personas más importantes de la política” y subrayó las coincidencias que tiene Alfonsín con este Gobierno. “Si me permiten la informalidad, gracias José”, respondió el ex diputado.
“Es un honor” agregó visiblemente satisfecha la presidenta de la comisión Anabel Fernández Sagasti que anticipó que seguramente en la próxima sesión tendrá acuerdo el pliego de Alfonsín.
Los otros pliegos que pasaron este paso, fueron los de Daniel Capitanich, ex vicegobernador chaqueño y hermano del actual gobernador Jorge Capitanich para Nicaragua. “Es un enorme orgullo y placer entendiendo la representatividad de Nicaragua. Argentina tiene una balanza comercial, con respecto a Nicaragua, altamente positiva y en ese sentido entendemos la necesidad de poder generar ingresos de divisas”, explicó el embajador postulado. A su favor expresaron el apoyo Jorge Taiana y también Julio Cobos en nombre de sus respectivos bloques.
Por quinta vez Hernán Patiño Meyer expuso ante la comisión de Acuerdos del Senado, aunque en esta ocasión le tocó hacerlo vía teleconferencia y en el arranque olvidó activar su micrófono. Fue representante político de distintos gobiernos peronistas desde 1969 y partirá ahora a Hungría. “Voy a ser muy cauto, no me he reunido ni he hablado con nadie, estoy esperando la decisión que tome la comisión y el Senado” justificó su decisión de no mantener ninguna actividad vinculada con su futuro cargo, a diferencia de lo que hicieron otros embajadores como Daniel Scioli que incluso antes de que su pliego llegara al Senado había viajado a Brasil, su destino.
En el respaldo a las tres postulaciones propuestas por el Poder Ejecutivo hubo dos coincidencias: una sobre el trabajo que tendrán que hacer en la búsqueda de apoyo para reclamar la soberanía de Malvinas y la segunda respecto a la necesidad de generar mejores relaciones comerciales para que ingresen divisas al país, aún más en el marco de la actual pandemia.