El gobierno nacional renovó por decreto la cuarentena hasta el próximo 16 de agosto y en el mismo DNU prohibió las reuniones sociales en todo el territorio nacional, incluso en provincias y municipios que se encuentran en fase 5. La decisión generó revuelo. Constitucionalistas sostienen que el decreto presidencial viola el derecho a la intimidad.
Carla Vizzotti, secretaria de Acceso a la Salud, defendió la medida y aclaró que las reuniones sociales y familiares "nunca estuvieron autorizadas" en la Capital Federal ni en la provincia de Buenos Aires.
“En las áreas que están en aislamiento social, preventivo y obligatorio, nunca estuvieron autorizadas las reuniones sociales. En el AMBA y la Ciudad nunca estuvieron autorizadas desde el 20 de marzo, las reuniones sociales, y no han sido solicitadas excepciones por las autoridades porteñas ni de la provincia de Buenos Aires para realizar esas reuniones”, enfatizó en conferencia de prensa.
En este sentido, la segunda del Ministerio de Salud de la Nación ratificó que la principal causa de contagio en este momento tanto en AMBA como en el resto del país son las reuniones sociales. “Esto no quiere decir que alguien quiera generar un brote, sino que por subestimar los síntomas o no percibir los riesgos, se pueden generar estas situaciones y en esos ámbitos es más difícil cumplir con las recomendaciones”, advirtió.
“Pensar que no nos va a pasar es un error y una lección que estamos viendo no solo en Argentina sino en el mundo. Y es por eso que informamos que las reuniones sociales son las situaciones que ponen en riesgo todo el esfuerzo y el logro que venían teniendo hasta ahora”, añadió.
Vizzotti aclaró que con el DNU “lo que se hizo fue informar a todas las jurisdicciones que el motivo de los brotes que están sucediendo en los lugares donde no había casos y ahora hay, son fundamentalmente ese tipo de reuniones, y que el riesgo de que sucedan donde todavía no hay, justamente son ese tipo de reuniones”.
Las autoridades sanitarias recomiendan entonces no hacer reuniones sociales y familiares en lugares cerrados, en domicilios, más allá de los convivientes. “En los lugares donde están autorizadas las actividades recreativas o están abiertos los bares, con protocolo y con una acción de control, las provincias lo van decidiendo. El problema es cuando se hacen reuniones con amigos y no usamos el tapabocas si estamos comiendo, o nos acercamos y por ahí compartimos un vaso. En esos momentos no solamente no percibimos el riesgo porque no tenemos síntomas, sino que tampoco lo percibimos por esa confianza o cercanía”, afirmó.
En el mismo sentido se pronunció Vilma Ibarra, secretaria de Legal y Técnica de la Presidencia: “En principio no están prohibidas todas las reuniones en el país, sino las sociales, familiares, en lugares cerrados, donde no se maneja un protocolo”.
“Todos los expertos epidemiológicos han dicho que son la mayor fuente de contagio que hay actualmente, que expande rápidamente el virus. Lo que se toma es una medida prudente, que corresponde con la situación actual para prevenir que se siga expandiendo el virus”, enfatizó.
Ibarra insistió en aclarar que “solo se le está pidiendo a la población que no nos reunamos en lugares cerrados dentro de nuestras casas porque allí pasa algo que es que estamos con nuestros afectos pasando momentos muy difíciles, muy cerca. Es un momento de muchos contagios y de necesidad de contener para que nuestro sistema de salud pueda seguir dando respuesta”.
Esta mañana, durante el parte matutino, el Ministerio de Salud informó que se registraron 51 nuevas muertes en las últimas 12 horas, y el total de casos positivos de COVID-19 asciende a 206.743 en todo el país.
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