“Nuestro valor es hablar con todo el mundo, y por eso ganamos las elecciones. Se lo dijo Alberto (Fernández) a la oposición de Juntos por el Cambio, porque es algo que seguiremos haciendo, hacia afuera y hacia adentro de la coalición de Gobierno. Después, el que toma las decisiones es el Presidente”. Tranquilo, uno de los funcionarios más influyentes no parece sorprendido por el fuego amigo que reciben en los últimos días.
Sin inmutarse por lo que sonaron como duras críticas de Cristina Fernández de Kirchner al posicionamiento económico que esbozó el Gobierno el 9 de julio al aparecer con el Grupo de los 6, mucho menos a las que expresó Hebe de Bonafini en una carta que hoy difundió desde el portal de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, cerca del Presidente se destaca el acompañamiento de los 24 gobernadores. “Hoy y todos los días habla con alguno de ellos, están todos en el mismo barco, no es para cualquiera comandar la nave en el momento más dramático de las últimas décadas, quizás del último siglo”, razona.
Y pasa un dato. “Ayer mismo, Alberto habló con Gerardo Morales, y estoy seguro de que no tiene nada que reclamarle, porque el trabajo está enfocado en atender las necesidades de todas las provincias, sin importar el signo político”. Se queja, en cambio, de las divisiones de la oposición:“¿Qué es lo que quieren? El Presidente los escuchó y hoy salen con ese documento. No se entiende lo que buscan”.
En el círculo íntimo presidencial se sabe de la fuerte caída que viene sufriendo la imagen de Fernández. La aprobación del Gobierno pasó del 67% en el mes de abril al 50% en julio, según el último informe de la Universidad de San Andrés, que monitorea bimensualmente a la opinión pública desde el 2015. La imagen negativa de la gestión en ese estudio realizado a través de 1010 entrevistas entre el 1 y el 9 de julio, subió al 46%.
Por otro lado, la imagen del Presidente está en el 55%, todavía un alto guarismo si se toma en cuenta la dramática situación económica y sanitaria que está viviendo Argentina, pero viene de 70% que tenía en abril. En rigor, casi todos los dirigentes medidos por UdeSA cayeron en su posicionamiento, pero el que más perdió fue el jefe de Estado.
Es que Horacio Rodríguez Larreta hoy tiene 52% de imagen positiva, pero viene de 54%. O sea, prácticamente mantiene la imagen que tenía hace tres meses. María Eugenia Vidal está en 48% de positiva, y tenía 49% en abril, prácticamente la misma valoración también. Cristina Kirchner está en 27% de imagen positiva y tenía 29%, también prácticamente la misma que en abril. Con Sergio Massa sucede algo similar, con 23% de imagen positiva.
El caso que se destaca es el de Mauricio Macri, el único que aumentó la imagen positiva, aunque venía de una perfomance baja de 28%, hoy subió a 34% de imagen positiva, un aumento de 6% que era impensado semanas atrás.
Obviamente, el contexto es la situación del país. Ante la consulta de de cómo considera que está la situación del país en relación al año anterior, el 65% de la población contestó que está peor este año que el año pasado, el 17% está igual y solo el 13% dijo estar mejor. En cuanto a la situación personal, el 49% dijo estar peor que hace un año, 34% está igual y solo 15% mejor.
Pero más allá de lo que digan las encuestas, consideradas “muy satisfactorias para nosotros si comparamos con otros líderes mundiales”, ante la pregunta de si habrá un cambio de Gabinete en los próximos días para definir una nueva etapa del Gobierno, la respuesta fue ambigua, aunque dando a entender que sí.
“Hay que desdramatizar”, dijeron cerca del Presidente.
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