Coronavirus en Argentina: el Gobierno porteño definirá qué actividades liberará en base a los datos de los próximos días

El vicejefe de Gobierno porteño, Diego Santilli, explicó este sábado que la semana próxima será “clave en términos de números sanitarios”, para ver qué actividades se liberan a partir del próximo viernes 17, cuando culmina la fase más estricta del aislamiento en el Área Metropolitana Buenos Aires (AMBA). No obstante, ratificó que todas las decisiones se toman en el marco de una “estrategia conjunta” con la provincia pero con una “táctica diferenciada”.

“La ciudad ha mejorado mucho y por eso elaboramos un documento de trabajo para analizar el horizonte y ver cómo seguimos hacia adelante”, dijo Santilli esta mañana en declaraciones a radio Mitre.

Se refirió de esta manera al borrador del plan que se conoció ayer, con un esquema de flexibilización, que incluiría la reapertura de comercios barriales, el permiso para la actividad física al aire libre y la ampliación a toda la semana para los paseos recreativos con niños y niñas.

El funcionario porteño insistió en que “en función de los números de la semana próxima, de lunes a jueves, iremos tomando decisiones” y remarcó que mantienen una “estrategia conjunta” con el distrito bonaerense, pero se analizan “tácticas diferenciadas”.

En la misma línea, el jefe de Gabinete porteño, Felipe Miguel, detalló que la información volcada en el documento de trabajo “no son decisiones tomadas” sino que dependen de la evolución de la situación sanitaria. “Vamos a ir recuperando las actividades en forma gradual y sostenidas en el tiempo”, aclaró el funcionario en CNN Radio.

Tras destacar la “vocación de apertura” del Gobierno porteño, Miguel insistió en que las autoridades deben ser “prudentes y no deben anticiparse”. Por otro lado, sobre la relación con el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, dijo que “hay diálogo permanente tanto con él como con el gobierno nacional, yo charlo también con Carlos Bianco o con Santiago Cafiero”.

Temor en el conurbano bonaerense

Ayer, el Consejo Operativo de Emergencia (COE) del municipio bonaerense de La Matanza expresó su “preocupación” por una eventual apertura de la cuarentena en la ciudad de Buenos Aires sin coordinación con la provincia, por lo que solicitó que “se tomen decisiones en forma conjunta” con el distrito bonaerense.

El informe advierte que “una apertura de la cuarentena en la Ciudad tiempo atrás -de la que luego hubo que retroceder por las duras consecuencias- hizo que los contagios se propagaran a lo largo del cordón del conurbano que linda con la Ciudad”.

Santilli contestó que “no es lo mismo un barrio en La Matanza que uno en el centro de la ciudad de Buenos Aires”. “No lo hemos hecho (tomar decisiones individuales) en estos 144 días de aislamiento, todo lo contrario. Tenemos actitudes de entendimiento mutuo con decisiones tácticas distintas”, insistió Santilli y explicó: “En la provincia está funcionando la industria y nosotros tenemos cerrado nuestro principal esquema de trabajo, que son los servicios y comercios”.

Por su parte, el intendente de Esteban Echeverría, Fernando Gray, argumentó que la cuarentena “pierde eficacia si ambos distritos no tienen una postura única porque la circulación entre distritos es muy intensa y eso genera mayor circulación del virus”.

“Si la Ciudad flexibiliza, vamos a perder todo el esfuerzo que hicimos porque los casos van a aumentar peligrosamente en el conurbano, pero después eso va a generar un efecto regresivo también en Capital porque se van a incrementar los contagios allí y luego se convierte en un espiral ascendente muy complejo de frenar”, advirtió Gray en diálogo con Télam.

A su vez, Gustavo Menéndez (Merlo) calificó la implementación de estrategias de apertura diferentes como “un gran error”.

“Hay que hacer el máximo esfuerzo para unificar esta acción y la estrategia porque ambos territorios están atados a una tremenda inmigración diaria”, dijo el jefe comunal.

Y sintetizó: “Hay mucha gente que vive en el conurbano que trabaja en Capital y no solo hablamos de trabajadores no esenciales sino también de médicos y policías, por lo que debemos cuidar al máximo la utilización del transporte público y no generar una circulación masiva que sea un foco de contagio”.

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