A solas en una oficina de la Casa Rosada, el veedor oficial ante Vicentin, Gabriel Delgado, concedió su primer reportaje como funcionario a Infobae. Graduado con un doctorado en París, Delgado no conocía a Alberto Fernández y aceptó su designación para encontrar la solución financiera y económica a una empresa cerealera que es clave para la economía argentina. “Quiero trasmitir la opinión del Presidente: no va a avanzar en ninguna medida que divida a los argentinos”, sostuvo Delgado en exclusiva.
La declaración del veedor oficial implica que Alberto Fernández ha congelado la decisión de expropiar y busca métodos alternativos para evitar que Vicentin colapse y arrastre a acreedores públicos y privados que confiaron en la compañía cerealera al borde de la quiebra.
El jefe de Estado apuesta al Plan Perotti, una iniciativa del gobernador de Santa Fe que propone una intervención colegiada con tres representantes, dos del gobierno nacional y el restante perteneciente al gobierno provincial. “Estamos esperando una respuesta del juez Fabián Lorenzini”, aseguró el veedor oficial.
-¿Qué sucede si el juez Lorenzini rechaza el Plan Perotti?
-Nosotros somos respetuoso de la voluntad del juez, y vamos a seguir buscando alternativas para tratar de salvar las fuentes de trabajo, para tratar de salvar las exportaciones y para tratar de salvar el interés de los acreedores.
-¿Cree que el Estado puede hacerse cargo de la empresa Vicentin sin la variable de la expropiación?
-Yo estuve con el Presidente en Olivos. Y lo que me quedó de mi charla con él, es que no avanzará con ninguna medida que divida a los argentinos. Creo que el Presidente está en tratar de agotar todas las instancias superadoras, y en analizar todas las propuestas para sacar a la empresa adelante.
-Si Alberto Fernández le dijo que “no quiere dividir a los argentinos”, y tomamos en cuenta la resistencia que miles de argentinos expresaron contra la expropiación el sábado pasado, la conclusión sería que la expropiación estaría descartada... ¿No?
--El Presidente está abierto a escuchar soluciones para poder salir adelante con la compañía, con exportaciones, con mantener el empleo. Y eso hacerlo en un marco que evite la división de los argentinos.
-¿Es posible rescatar a la empresa de una eventual quiebra sin la participación de la familia Vicentin?
-Lo primero que hay que decir que la compañía Vicentin tiene más de cien accionistas, y están muy atomizadas las acciones. Y un grupo de esos accionistas manejaron la compañía cuando se generó este terrible problema financiero por casi 1500 millones de dólares.
-Entonces...
-Entonces, sin hacer juicio de valor sobre las causas que están abiertas, hay un dato básico: existe un concurso, y el Estado Nacional tiene casi el 30 por ciento. Y hay un reclamo de los acreedores para que el Estado intervenga.
-¿Es posible rescatar a una parte de la familia Vicentin, que ahora no están en el directorio, para que sean accionistas minoritarios de un eventual holding mixto con mayoría estatal?
-Todo eso tendrá que ver con valuaciones, con propuestas que nos vayan llegando. A mí, personalmente, me llegó una propuesta de la actual conducción de la compañía para hacer un fideicomiso con las acciones...
-¿Y?
--Es un powerpoint que ofrece incluir en un fideicomiso las acciones y que ese fideicomiso designe a los directores...
-¿Y quién conduciría el fideicomiso?
-Son cosas que todavía no se analizaron. Estamos en un plano conceptual.
-Entonces, ¿ustedes hablan con la familia Vicentin?
-A mi me enviaron una propuesta...Y como dijo el Presidente, tenemos que analizar todas las propuestas que se presenten.
-¿Esto quiere decir que el Estado Nacional no descartaría como socio minoritario a Vicentin?
-No quiero adelantarme: pero esto implica valuaciones de pasivos y de activos, y todo está en un proceso técnico...
-¿Cómo le llegó la propuesta de Vicentin?
-A través de un WhatsApp. Me la envió Alberto Macua, uno de los directivos de Vicentin.
-¿Qué encontraron cuando fueron interventores en Vicentin?
-Estamos preparando un informe interno para entregar al Presidente. Y convocamos a la Sindicatura General de la Nacion (SIGEN) para que nos ayuden.
-¿Y que encontraron?
-Todavía no puedo decir nada.
-Usted me dijo que el Estado Nacional aceptará la decisión del juez Lorenzini, si rechaza el Plan Perotti. En este contexto, ¿a continuación que haría el Estado frente al concurso de acreedores?
-Si esa hipótesis ocurre, el Estado Nacional no se va a quedar ajeno a la compañía Vicentin...
-¿Por qué no?
-Y porque es uno de los acreedores principales. Además hay un interés genuino del Presidente de que no se pierdan las fuentes de trabajo, que se continúe con el desempeño exportador de la compañía, y hay muchos productores y cooperativas que no han podido cobrar sus acreencias...Nuestra principal idea es rescatar a la empresa.
-Entiendo la mirada desde el Estado. Pero si el Plan Perotti cae por decisión judicial, ¿hay otro plan antes de la vía de la expropiación...?
-Nosotros tenemos muchas opciones arriba de la mesa.
-Y si esas opciones fracasan, la última hipótesis, ¿es la expropiación?
-Esa es una decisión del Presidente. No es mía. Pero le insisto con lo que hablé con él: no va a tomar ninguna decisión que divida a los argentinos.