El avance del coronavirus empieza a colarse en los pasillos del poder.
Después de la confirmación del positivo del diputado bonaerense Alex Campbell, de Juntos por el Cambio, fue María Eugenia Vidal la que confirmó durante la madrugada que, tras realizarse el hisopado, también contrajo el virus y que se encontraba “cumpliendo con el aislamiento y las indicaciones médicas correspondientes”.
La confirmación de Vidal, la más relevante del universo de la política después de que se oficializara el caso del intendente Martín Insaurralde, que se recupera en un hospital de Lomas de Zamora, obligó a algunos de los princinpales dirigentes de Juntos por el Cambio a someterse al hisopado.
Es que la ex gobernadora almorzó el viernes pasado en las oficinas del Gobierno porteño de la calle Uspallata con el propio jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, el senador Martín Lousteau y Emilio Monzó, ex presidente de la Cámara de Diputados. Rodríguez Larreta resaltó en sus redes sociales que se había hecho el test en estas horas y que el resultado había sido negativo. Monzó y Lousteau esperaban indicaciones médicas.
Según pudo saber este medio, otros dos diputados bonaerense de Cambiemos habían obtenido esta mañana los resultados del estudio de COVID-19 al que se sometieron por haber estado en contacto con Federico Otermín, presidente de la Cámara baja de la provincia de Buenos Aires y mano derecha del intendente de Lomas de Zamora.
Se trata de Adrián Urreli, vicepresidente primero de ese cuerpo, y del legislador Daniel Lipovetzky, ex diputado nacional: ambos dieron negativo. En las próximas horas se espera además el resultado de Maximiliano Abad, presidente del bloque de Cambiemos provincial de Diputados, y otra media docena de legisladores.
En todos los casos, al igual que Otermín, a pesar de que su test dio negativo, se encuentran aislados.
Desde que se conoció la noticia de Insaurralde, durante la mañana del pasado viernes, la política empezó a tomar nota de que el avance del coronavirus también empezaba a tocar la puerta de los despachos de los dirigentes.
Ese mismo día, el presidente Alberto Fernández tuvo que suspender su visita a Catamarca, la única provincia de la Argentina que hasta ahora no registró contagios, según los reportes oficiales. La suspensión se debió a que Daniel Arroyo había estado reunido 48 horas antes de esa gira con Insaurralde. El ministro de Desarrollo Social comunicó esa misma noche, vía redes sociales, que se había sometido al hisopado y que el mismo había sido negativo.
La evolución de la pandemia, que empieza a mostrar sus peores números, obligó por caso al Presidente a declinar su visita a Rosario prevista para este sábado en conmemoración del Día de la Bandera. No hay previsto incluso ningún tipo de viaje para los próximos días.
En el caso de la provincia de Buenos Aires, además de los diputados mencionados, el secretario General bonaerense, Federico Thea, se mantuvo durante todo el viernes pasado encerrado en su oficina de la gobernación, a metros de Axel Kicillof, a la espera del resultado de su análisis que, al final, dio negativo. El miércoles había estado en un encuentro con el intendente de Lomas de Zamora.
El que sí dio positivo, sin embargo, fue Alejandro Alegretti, vicepresidente de la Fundación Bapro, que participó de la misma reunión.
En las próximas hora, según pudo saber este medio, el ex jefe de Gabinete bonaerense Federico Salvai y su mujer, la ex ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, también se someterán al test de coronavirus: días pasados recibieron en su departamento a Alex Campbell.
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