El dirigente social, Juan Grabois, se mostró este domingo a favor del aislamiento social, preventivo y obligatorio que decretó el Gobierno y aseguró que en los barrios humildes, "la gente tiene conciencia de que la vida está por encima de las ganancias”.
El referente de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP) sostuvo que incluso la mayoría de las personas que viven en la Villa Azul, en la Provincia de Buenos Aires “están de acuerdo" con la decisión del gobernador Axel Kicillof de cerrar el asentamiento para evitar que se propague el coronavirus.
“Yo he recorrido decenas de ollas populares, de comedores en barrios muy precarios y la gente tiene conciencia de que la vida está por encima de las ganancias y que es preferible perder un mes o dos de ‘laburo’, aunque eso implique comer una sola vez por día, que enfermar al 'abuelito’ y que se muera”, manifestó Grabois durante una entrevista en el canal América.
El dirigente social remarcó que la este barrio ubicado en el Conurbano “era un foco gigante de contagios y si cruzaba para Villa Itatí iba a ser un desastre”, por lo que consideró que la decisión de aislarlo completamente “fue una medida bien tomada”, aunque reconoció que “se cometieron algunas desprolijidades al principio”.
“Yo al principio me asusté con lo que pasó en Villa Azul, pero la verdad es que me equivoqué. Lo primero que tendría que haber hecho es hablar con los compañeros que viven ahí, ellos están de acuerdo con esta medida, mayoritariamente”, agregó al respecto.
No obstante, resaltó que este tipo de medidas no pueden tomarse de manera “discrecional”, sino que si se va “a cerrar una comunidad, sea un country o una villa, tiene que haber un criterio de cuándo y cómo se va a hacer eso”, porque “en manos de gente xenobóbica, cruel, discriminatoria, puede ser una herramienta peligrosa”.
“No quiero nombrar a nadie, pero pienso en algunos intendentes o gobernadores a los que les gusta confinar a quienes consideran que son inferiores. Tiene que haber un criterio a nivel nacional”, opinó.
En otro tramo de la entrevista, Grabois se refirió a las condiciones de vida en las villas: “Si el Presidente descubre esta situación recién ahora es porque estaba muy tapado. Cuando uno se acostumbra a ver una realidad, quizás piensa que todo el mundo también la conoce y no es así. Entonces, es necesario que se visibilice, sin morbo y sin amarillismo”, señaló.
Además, el integrante de la CTEP aseguró que él está “convencido de que si no hay un programa planificado de algunas reformas estructurales, vamos a estar muy mal” porque “la gente se banca la economía de guerra, las medidas sanitarias, comer en las ollas populares, que le digan ‘quedate en tu casa’, pero lo que nunca va a bancar es las desigualdades y las injusticias”.
“No se soporta que se subsidien grandes empresas mientras que los que cobran el salario complementario hoy están en 8.500 pesos, muy por debajo de la línea de indigencia”, precisó.
En este sentido, destacó que “las compañeras que están todos los días en los comedores y merenderos" en diferentes partes del país “no se merecen ganar” esa suma, por lo que detalló que ya le pidieron al presidente Alberto Fernández un incremento en esa asistencia estatal.
Por último, Grabois contó que en el último tiempo “por lo menos un 10 o 15% de los que van a los comedores, te das cuenta sobre todo por la ropa, son de clase media”.
“Al principio les daba vergüenza ir, ahora son parte del grupo, ya. Más que nada vemos a mujeres, porque el sistema es muy patriarcal y para el hombre de familia es una humillación”, cerró.
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