La CGT se muestra dispuesta a tomar la iniciativa en medio de la emergencia sanitaria y hoy será un perfecto ejemplo de eso: a las 11 tendrá una videollamada con autoridades del Fondo Monetario Internacional en la Argentina, y a las 13 almorzará con los ministros de Trabajo, Claudio Moroni, de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, y vicejefa de Gabinete, Cecilia Todesca, para empezar a definir la integración de un “comité pospandemia” dirigido a analizar la salida de la cuarentena.
Las dos citas tendrán lugar en la Federación de Sanidad, en Dean Funes al 1200, adonde pertenece el cotitular de la CGT, Héctor Daer. En primer lugar habrá una teleconferencia con directivos del FMI: el jefe de la misión, Luis Cubeddu; el representante del organismo en la Argentina, Trevor Alleyne, y Sergio Chodos, representante de la Argentina en el Fondo. El contacto fue gestionado por la oficina local del FMI a través de Gerardo Martínez, líder de la UOCRA y secretario de Relaciones Internacionales de la CGT, y de esta forma reanudarán las reuniones que el organismo internacional mantiene con referentes de la economía y la política local.
Por la CGT, además de Daer y de Martínez, concurrirán a los dos encuentros el otro cotitular de la CGT, Carlos Acuña (estaciones de servicio), y dirigentes como Andrés Rodríguez (UPCN), José Luis Lingeri (Obras Sanitarias) y Antonio Caló (UOM), entre otros.
“Vamos a escuchar lo que nos quiere decir el FMI. Nuestro planteo es el de siempre: pensamos que la deuda se debe pagar, pero tiene que haber crecimiento, desarrollo, y bajo ningún punto de vista, como lo manifestó el Gobierno, permitiremos que se pague con el sacrificio de la gente”, dijo a Infobae Martínez, quien advirtió: “No vamos a hablar de ninguna reforma laboral porque ninguno de nosotros la está impulsando ni piensa eso. Y no forma parte del diálogo con el FMI: ellos tienen mucho cuidado en no meterse en cuestiones de cambios estructurales, que es decisión soberana del gobierno argentino”.
La expectativa lógica es que durante el encuentro virtual entre el FMI y la CGT se hable de la renegociación de la deuda y de los problemas del empleo en nuestro país como consecuencia de la pandemia. Según trascendió, los sindicalistas aprovecharán para ratificar su apoyo a la postura del gobierno argentino sobre la reestructuración de la deuda.
Pero el plato fuerte del día llegará con el almuerzo de los dirigentes cegetistas con los dos ministros y la vicejefa de Gabinete: la idea del “comité pospandemia” es celebrada por un sindicalismo que en privado se queja de que el Gobierno no le abre las puertas a ninguna instancia de debate y de participación en las medidas por adoptarse para salir de la cuarentena y reactivar la economía.
La CGT está hablando de manera informal con las autoridades de la Unión Industrial Argentina (UIA) para poner en marcha el comité de crisis que fue creado por Alberto Fernández a fines de marzo y desde entonces sólo mantuvo dos reuniones y dos videollamadas. Ambos sectores quieren sumar al resto de las entidades del Grupo de los Seis (la Sociedad Rural, la Asociación de Bancos Argentinos, la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, la Cámara de Comercio y la Cámara de la Construcción) y están conversando en estos días sobre la posibilidad de reanudar las deliberaciones en forma bipartita en caso de que el Gobierno siguiera sin convocarlos.
La necesidad de crear una comisión para dialogar y tomar decisiones sobre la pospandemia surgió entre los dirigentes del consejo directivo de la CGT que se reunieron el 14 de mayo en la sede de la UOCRA, como una “forma de acordar en forma tripartita cómo poner a la Argentina de pie”, tal como lo definió un sindicalista.
Ahora, la posible creación del “comité pospandemia” servirá para que allí se canalice el debate tripartito sobre las alternativas para recuperar la actividad económica y asegurar las fuentes de trabajo una vez que se levante el aislamiento obligatorio. Es una medida que piden a dúo empresarios y sindicalistas, quienes miran con recelo cómo el Presidente sólo se rodea de epidemiólogos para tomar decisiones pero hasta ahora no mantiene un diálogo fluido con los sectores relacionados con la producción y el trabajo.
El almuerzo de hoy simbolizará el intento más concreto por el Gobierno en poner la mira no sólo en los aspectos sanitarios de la pandemia sino también cómo abordar la recuperación de una economía que continúa cayendo por la extensión de la cuarentena.
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