El presidente Alberto Fernández visitó este mediodía junto al gobernador bonaerense, Axel Kicillof, la planta de la empresa automotriz Toyota en el partido de Zárate, y volvió a defender las medidas de aislamiento obligatorio: “Cada vez que hablan del daño del aislamiento, digo que no es la cuarentena la que complicó la actividad en todo el mundo, sino la pandemia; no discutamos más eso".
En una breve exposición, el mandatario aprovechó la actividad para precisar que el nivel de contagios “tiene epicentro en la ciudad de Buenos Aires y sus alrededores", pero resaltó que “el país entero se está poniendo de pie y está empezando a producir", en alusión a la mayor flexibilización de la cuarentena que están llevando numerosas provincias, ante el bajo número de contagios de COVID-19.
Desde ese punto de vista, resaltó a los empresarios que “cuidan a sus trabajadores con protocolos” para que “no se enfermen”. “La cuarentena sirve para que nos cuidemos”, indicó el jefe de Estado al comentar la reapertura del la fábrica Toyota, otra de las firmas que tuvieron que paralizar sus actividades por el aislamiento decretado a raíz del coronavirus.
Fernández encabezó su presentación en el establecimiento fabril ubicado en el norte bonaerense, en el kilómetro 81 de la Ruta 12. Durante su visita, plantó un árbol en el espacio que la empresa llama “Jardín de los Presidentes”. Hace poco más de una semana hubo un acto similar en la planta de Volkswagen, en el municipio de Tigre, donde también defendió el aislamiento preventivo. “No nos enamoramos de la cuarentena, como dice algún tonto”, definió entonces.
“Toyota es una marca líder en el mundo, no hace falta que yo lo diga. Por lo tanto, verla otra vez operando, me hace muy feliz. Cada empresa que se reabre en la Argentina es un acto de celebración después de tanto dolor y sufrimiento que la pandemia nos ha impuesto", consideró.
El Presidente dedicó su discurso al debate sobre los alcances del aislamiento preventivo y obligatorio, que generó ciertos reparos en sectores empresarios y de la oposición. Lentamente, las restricciones comienzan a levantarse en la zona metropolitana, aunque para actividades específicas del rubro industrial y manufacturero.
"Hicimos todo tan responsablemente que, aunque mucho nos duele, mucho menos nos duele si no hubiéramos hecho lo que hicimos. Y lo que hicimos no lo hizo un gobierno, lo hizo la Argentina”, concluyó Fernández en un breve discurso, tras agradecer a la firma japonesa y al sindicato metalmecánico Smata.
Antes de la intervención del Presidente, el gobernador Kicillof remarcó el “trabajo conjunto entre el capital privado y el sector público” en el marco de la crisis por la pandemia.
Alberto Fernández recorrió junto al gobernador bonarense Axel Kicillof las líneas de producción de las pick-ups Hilux y SW4. Los operarios volvieron al trabajo el 18 de mayo pasado. La reapertura es progresiva: arrancó con un solo turno de producción de 2.300 empleados, mientras que la próxima semana ingresará otro turno de trabajo.
Durante el período en el que estuvo abierta, los obreros ya produjeron unas 1.000 unidades que representan unos 20 millones de dólares de exportación, según indicaron fuentes de la empresa nipona a la agencia Télam.
La empresa también realizó cambios en el transporte de los empleados, y definió el distanciamiento de los operadores en espacios comunes como comedores y salas de reuniones. También reforzó la limpieza de las instalaciones para garantizar la seguridad higiénica de los lugares diarios de trabajo.
Además de Fernández y Kicillof, en la actividad estuvieron presentes el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas; la vicejefa de Gabinete, Cecilia Todesca Bocco; y la secretaria de Comercio Interior, Paula Español, y el intendente de Zárate, Osvaldo Cáffaro.
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