El secretario adjunto de Camioneros, Pablo Moyano, realizó este viernes un “último llamado” a los gobernadores e intendentes de diferentes partes del país para que se minimicen los controles sanitarios a los que deben someterse los conductores antes de pasar de un distrito al otro. De lo contrario, el sindicato podría avanzar con medidas de fuerza que "pueden llevar al desabastecimiento del país”.
A través de una comunicación audiovisual que se difundió a la prensa, el gremialista se quejó de las largas filas de camiones que se forman en las rutas como consecuencia de las medidas de prevención que las autoridades provinciales y municipales establecen para el ingreso de estos vehículos.
“Día tras día nos llegan imágenes del manoseo que están sufriendo los camioneros. En Salta y Jujuy tuvieron de ocho o diez horas de espera para que los revisen, sin tener un baño, algo para comer, asearse. Pasó lo mismo en la ciudad de San Juan y en el partido bonaerense de Azul”, explicó.
En esta línea, el hijo del histórico líder del sindicato les exigió a las autoridades de cada lugar que “dejen de joder a los camioneros” porque “los compañeros tienen familia, se van a cansar y puede haber un desabastecimiento del país”, aunque aclaró que esto no es algo que desee él ni su padre.
Por último, el dirigente sindical resaltó que los empleados del sector "están arriesgando la vida para que a ningún argentino le falte un plato de comida en su mesa” y sostuvo que “este es el tercer llamado” de atención que les hace a todos los responsables "de gobernar una ciudad o una provincia”.
“Hacemos un último llamado a los intendentes y gobernadores: dejen de manosear, de forrear a los camioneros, porque ellos están arriesgando su salud y la de su familia, para que el gobernador, la familia del gobernador y los amigos del gobernador tengan medicamentos, alimentos, bebidas y todo lo que sea necesario”, sostuvo Moyano.
Recientemente, la Confederación Argentina del Transporte Automotor de Cargas (CATAC) denunció penalmente al intendente del partido bonaerense de Azul, Hernán Bertellys, por supuesta privación ilegítima de la libertad, entorpecimiento en el transporte de cargas y abuso de autoridad, justamente por uno de estos controles sanitarios que se le practica a los conductores.
“Por cuenta propia, excediendo a la Constitución Nacional, precinta a los camiones que llevan mercadería, con los camioneros adentro. Y mientras ese camión está repartiendo o descargando, el chofer no puede bajar, sean las horas que sean. Nos enojamos muchísimo por el secuestro de choferes. Intentamos hablar con este intendente, pero con nuestros abogados realizamos una denuncia penal que ojalá prospere y estas actitudes culminen”, explicó Ramón Jatip, presidente de la CATAC, en declaraciones radiales.
Por su parte, Pablo Moyano fue noticia días atrás porque se realizó una prueba para saber si tenía coronavirus, luego de que se detectaran dos casos positivos dentro del gremio, uno de los cuales había mantenido poco tiempo antes una reunión con el secretario adjunto de Camioneros.
De aquel encuentro también participó la intendente de Moreno, Mariel Fernández, por lo que ella también se sometió al test de COVID-19, pero ambos resultados dieron negativo.
En tanto, la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (FADEEAC) advirtió también que “está en riesgo el abastecimiento de alimentos e insumos básicos” por las restricciones que continúan implementándose en diferentes municipios y provincias a la circulación de camiones, una de las actividades exceptuadas del aislamiento obligatorio.
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