La relación entre los referentes políticos de la ciudad y de la provincia de Buenos Aires sufrió algunos cimbronazos esta semana, a partir de una serie de reclamos cruzados (principalmente de intendentes) por los diferentes criterios que tomaron en el marco de la lucha para contener la pandemia en el AMBA.
En ese contexto, Axel Kicillof mostró su molestia por la actitud de quienes “quieren politizar la cuarentena" y aseguró que habla seguido con Horacio Rodríguez Larreta: “Esta mañana nos cruzamos unos whatsapp porque tratamos de coordinar las actividades”. Sin embargo, aunque quiso bajarle la intensidad al fuego cruzado, dejó en claro que no coincide con algunas decisiones que tomó la administración porteña porque cree que, indirectamente, ponen en riesgo a muchos bonaerenses.
En ese contexto, el mandatario provincial señaló que el gobierno de la CABA “tomó la decisión -por licencias que otorgó el Presidente de la Nación- de autorizar la apertura de comercios y el fin de semana sumó actividades recreativas", pero evaluó que tal vez eso no fue lo ideal. “Tomaron medidas distintas y lo que veíamos como riesgo... son cosas de sentido común: cuando crecen los casos se tiende a ser mas rígido, no más flexible”, analizó en declaraciones a Radio 10.
Al ser consultado sobre si esperaba una marcha atrás de Rodríguez Larreta con la flexibilización de la cuarentena en CABA, Kicillof aclaró que “lo tienen que decidir él”, pero sugirió la implementación de una medida: “Si en la Ciudad van a abrir los comercios, que no vaya a trabajar la gente de la provincia de Buenos Aires”.
En ese sentido, dio un ejemplo cotidiano: “Cuando hay dos zonas contiguas donde en una hay más circulación que en la otra, la idea es que no haya intercambio viral. No es un invento mío ni algo difícil de explicar... si en el departamento de al lado de tu casa hay gente contagiada, no vas a ir a tomar el té”.
“La realidad objetiva es la cantidad de casos de la enfermedad. Esto no es culpa del gobierno de la Ciudad, pero el coronavirus esta afectando muy fuerte a la ciudad de Buenos Aires, que tiene casi 3.000.000 de habitantes en 200 metros cuadrados y (diariamente) registra el doble de casos que la Provincia, donde somos 17 millones; solo en el conurbano hay 7 millones, o sea que los casos están muy concentrados en los centros urbanos”, describió.
En otro fragmento de la entrevista, Kicillof insistió con tomar consciencia de la complejidad del escenario sanitario: “El que piensa que el virus no está o cree que se va a ir mágicamente... no se puede actuar sobre una realidad como si no existiera. En este caso eso es muerte”.
Además apuntó contra un sector de la dirigencia que “parece jugar a confundir, generar peleas, angustia y dudas” en medio de la pandemia. “Nadie esta pensando hoy en ganar las elecciones, la cuestión política más chabacana no existe entre los que tenemos responsabilidades. Hay otros que no, que siguen limando todos los días”.
Sobre la continuidad de la cuarentena, el gobernador de la provincia de Buenos Aires adelantó que esa es una decisión que se tomará en conjunto, tras una reunión que probablemente tendrá hoy mismo con Alberto Fernández y con el propio Rodríguez Larreta. Su postura, parece claro, es mantener las restricciones.