La escena se repite en el estacionamiento, en cada entrada habilitada en el Congreso y nuevamente a metros del Salón Delia Parodi donde se realizó la reunión de Labor Parlamentaria y donde los jefes de todos los bloques, junto al presidente Sergio Massa, decidieron convocar a sesión para hoy miércoles a las 18, cuatro horas después del inicio de la sesión convocada por Cristina Kirchner en el Senado. En busca de consenso se tratarán dos proyectos para protección del personal sanitario y para eximir a quienes trabajen en salud y en seguridad del pago del impuesto a las Ganancias
Los agentes de seguridad de Diputados levantan la mano y acercan la pistola a la frente o a la sien de cada persona que llega. En el recinto trabajan equipos técnicos probando los 100 metros cuadrados de pantallas que se utilizarán en la sesión remota mientras que en Pasos Perdidos hay cruces con cintas celestes y verdes sobre el piso que marcan los sitios donde podrán sentarse los periodistas que cubran tanto la sesión del Senado, convocada para las 14, como la de Diputados. Por primera vez compartirán espacio.
Labor Parlamentaria, la comisión que integran los representantes de todos los bloques y que define el temario y algunos acuerdos previos a cada sesión, arrancó con una hora de demora porque oficialismo y oposición no se ponían de acuerdo sobre cómo verificar si se mantiene el quórum en el transcurso de la reunión o si se cae. Según el reglamento, una vez que se consiguió el número para abrir una sesión (129 diputados) el debate puede ser presenciado o no por ese número o más o menos legisladores pero en caso de cualquier votación deben estar presentes la mitad más uno del pleno. Levantarse para que no se pueda realizar la votación es una herramienta usual en la gimnasia parlamentaria.
La discusión sobre el protocolo de funcionamiento remoto y el temario para someter a votación fue el eje que quedó salvado. Además en las horas previas se pasaron unos a otros un borrador de proyecto de ley que condensa varias iniciativas para eximir del pago de Ganancias al personal de salud y seguridad.
Finalmente mañana tendrá lugar la primera sesión virtual con autoridades de los bloques y algunos diputados más, unos 40, presentes en el recinto y el resto conectados en forma remota desde sus provincias. En el inicio del debate, una vez que todos estén conectados, se votará el protocolo de funcionamiento, una especie de reglamento con una vigencia en principio de 60 días con posibilidades de prórroga y se aceptarán las renuncias de tres diputados. Luego jurarán quienes los reemplazan: Claudia Bernazza en lugar de Daniel Scioli, José Patiño en lugar de Elisa Carrió y faltaría definir si Lisandro Bormioli jura por la banca que dejó Andrés Larroque.
Para lograr consenso los legisladores acordaron someter a votación un proyecto cuyo espíritu comparte la mayoría y que fue redactado por Eduardo ‘Bali’ Bucca, presidente del bloque Interbloque Federal. Bucca además es médico y elaboró un programa de protección al personal de salud ante la pandemia por COVID 19. La llama “ley Silvio” en homenaje a Silvio Cufré, enfermero bonaerense y primer trabajador del sector fallecido por haberse contagiado el virus.
Tras la reunión de Labor Parlamentaria ofició como vocera Daniela Vilar, diputada de Buenos Aires y presidenta de la comisión de Modernización. Explicó que el debate respetará el reglamento de Diputados sólo que “adaptado a la herramienta tecnológica”. Y aclaró que, a diferencia del Senado que estipuló un tiempo máximo de seis horas de sesión, en la cámara baja no habrá tiempo límite por lo que mañana se sesionará desde las 18 sin horario de finalización.