El presidente Alberto Fernández aseguró hoy que seguirá “deteniendo y secuestrando autos” de aquellas personas que circulan sin el permiso obligatorio hasta que “entiendan la importancia de la cuarentena”. El jefe de Estado manifestó su enojo ante el caudal de vehículos que se registraron en los accesos a la ciudad de Buenos Aires: “Son unos inconscientes, y lo que no entra con la razón, entra con la fuerza”, criticó.
En un mensaje grabado al canal A24, el jefe de Estado planteó: “Con los intendentes acordamos, junto a Axel (Kicillof), que ellos van a controlar las subidas a las autopistas; arriba de las autopistas, la gendarmería y policía federal hacen los controles, y adentro de la ciudad de Buenos Aires, la policía de la Ciudad; está todo organizado".
Y agregó: “Hay que tener en cuenta que a Buenos Aires hoy iban a entrar 122 mil personas que trabajan en seguridad y salud, hay otras 100 mil personas que trabajan en alimentación, supermercados, farmacias, negocios de cercanía, estaciones de servicio, todo eso hacen 230 mil, que no es nada si tenemos en cuenta que ingresan 9 millones de personas a la ciudad de Buenos Aires”.
“Es posible que entre esas personas haya gente que no esté autorizada para salir. A ellos les aviso que, donde los encontremos, los detenemos y les vamos a sacar los autos. Son inconscientes”, afirmó el Presidente.
Durante la jornada de hoy, las autoridades se vieron desbordadas por la cantidad de autos y camiones que pretendieron ingresar a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, luego de la aplicación por parte del Gobierno porteño de restringir la mitad de los puntos de ingreso.
Accesos como Puente Pueyrredón, donde había más de una hora de demora, la autopista Panamericana y los puntos de ingreso desde la zona norte están completamente colapsados mientras los efectivos de la policía de la Ciudad controlan que aquellos que quieran ingresar estén habilitados para hacerlo.
De acuerdo con el anuncio del gobierno de Horacio Rodríguez Larreta, el operativo anulará el paso en 56 bocas de acceso a la ciudad de distintas comunas, desde Núñez hasta Mataderos, y permitirá -hasta el momento- el ingreso a través de 13 pasos habilitados por donde podrá circular el transporte público de pasajeros, autos particulares y peatones que puedan acreditar formar parte del grupo de trabajadores exceptuados en el decreto de aislamiento social, preventivo y obligatorio.
Luego de las primeras horas de la entrada en vigencia de la medida, el vicejefe de gobierno porteño, Diego Santilli, lamentó la gran circulación de vehículos. “Yo estoy en el anillo digital y lo que vi esta mañana no es positivo. Hay largas colas en todos los accesos y eso va en contra de lo que necesitamos. Así no va”, dijo en declaraciones radiales.
La disposición de las autoridades de la Ciudad se suma a otras medidas similares adoptadas por diversos municipios e incluso por el gobierno nacional, que ayer anunció que las personas que viajaron a la Costa por el fin de semana largo no podrán regresar a sus ciudades de residencia. En el caso del conurbano o varios lugares del interior de la provincia de Buenos Aires, apelaron a medidas más extremas como la construcción improvisada de muros de tierra en los ingresos.
Según informaron fuentes policiales a Infobae, desde el viernes pasado hasta hoy 931 personas fueron controladas por la policía, de las cuales 214 fueron detenidas y 717 demoradas, notificadas o trasladadas a domicilio. En cuanto a los vehículos se controlaron 18.176 autos y 2762 motos.
Además de las restricciones de los accesos, el gobierno de la Ciudad adelantó también la intensificación de la limpieza e hidrolavado de calles, veredas, contenedores, parques y plazas, y el mobiliario urbano de toda la Ciudad. Se está reforzando la limpieza total de las más de 12 mil manzanas porteñas.
Marcelo D’Alessandro, secretario de Justicia y Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires, también lamentó en diálogo con El Destape Radio que los accesos tengan una gran cantidad de gente. “La verdad es que veníamos de días con alto acatamiento de la cuarentena, pero hoy pareciera haber retrocedido, porque vemos en los ingresos a la Ciudad largas filas de vehículos; esto afecta la lucha que estamos dando, porque la única manera de evitar la circulación del virus es aislándonos”.
En ese sentido, añadió: “Hoy se tomó como un día hábil normal y la verdad que vino mucha gente a la Ciudad. Nosotros necesitamos que se queden en las casas: cuesta entender cómo la gente no tiene la responsabilidad o no toma conciencia de la necesidad de aislarse, con el ejemplo de otros países del mundo, que por tomarse a la ligera estas medidas están en la situación en la que están”. “El control es exhaustivo en todos los ingresos”, advirtió.
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