La ministra de Seguridad, Sabina Frederic, anunció que a partir de esta tarde adoptarán nuevas medidas para limitar “mucho más” la circulación de vehículos en el Área Metropolitana y especialmente en los accesos a la Ciudad de Buenos Aires.
En una conferencia de prensa que brindó en la Quinta de Olivos luego de reunirse con el presidente Alberto Fernández, la funcionaria informó además que desde que comenzó la cuarentena las fuerzas federales detuvieron a 2.226 personas y secuestraron más de 600 autos.
“Le transmitimos al Presidente los resultados de los controles realizados en la última semana y sobre todo el control que se realizó a partir del 20 de marzo en todo el territorio nacional. Recuerdo que el día 17 de marzo se conformó el Comando Unificado de Seguridad COVID-19, integrado por el gabinete del ministerio y delegados de las fuerzas de seguridad. El mismo se ocupa de tramitar los pedidos, conflictos y las demandas que llegan al ministerio”, indicó Frederic.
En el encuentro también participaron Mario Farinón (Prefecto General), Juan Carlos Hernández (jefe de la Policía Federal Argentina), Andrés Severino (jefe de Gendarmería Nacional) y José Glinski (director de la Policía de Seguridad Aeroportuaria).
“Ese comando recibe las denuncias del 134, el cual se habilitó para denuncias de quienes deberían estar cumpliendo la cuarentena. Hemos recibido a razón de 2.500 llamados de los cuales el 10% corresponden a esas denuncias que cruzamos con el Ministerio del Interior. Se realizaron 200 operativos para certificar que las personas que vinieron del exterior están cumpliendo la cuarentena”, manifestó la ministra.
Y agregó: “Hubo 41.346 personas notificadas, 106.321 controlados y un total de 621 vehículos secuestrados. Estos datos, al Presidente por supuesto le resultan importantes porque dan cuenta del compromiso de hombres a metros de la ciudad de Buenos Aires. Es necesario reforzar esos controles, vamos a ser inflexibles con aquellos que estén violando la cuarentena, que es la forma que el Estado ha encontrado para prevenir la expansión del virus. Vamos a introducir nuevos mecanismos para que la eficacia sea aún mayor”.
Alberto Fernández arrancó la jornada con un informe que el Gobierno porteño le preparó sobre los ingresos a la ciudad de Buenos Aires. El día de hoy era especialmente crítico, porque se trataba del primer test –luego del fin de semana largo– para conocer el nivel de cumplimiento efectivo de la cuarentena social, preventiva y obligatoria que dispuso desde el viernes pasado a la 0 hora. El resultado lo desalentó: en medio del colapso que se registró en los accesos a la Capital Federal, hizo una advertencia a quienes no cumplen con el aislamiento: “Los vamos a detener y les vamos a sacar los autos; son inconscientes”, dijo.
La prueba exigió una fuerte coordinación entre las fuerzas federales y la Policía de la Ciudad, además de las autoridades políticas de ambas jurisdicciones. Por ello, en la agenda del día coordinó dicha reunión con los jefes de las fuerzas de seguridad, en la quinta de Olivos, donde cumple con la cuarentena, y de la que también participaron los secretarios de Seguridad y Política Criminal, Eduardo Villalba, y de Articulación Federal de la Seguridad, Gabriel Fuks.
La reunión buscó exhibir el respaldo del Presidente a la estricta política de control de la cuarentena que está en manos de los efectivos de seguridad en todo el país, lo que exige un esfuerzo mayor que el que ya tenían de despliegue territorial y en “modo emergencia”, es decir, con poco tiempo para la organización y la coordinación.
Pero, además, Fernández quería escuchar a los responsables de las fuerzas federales, buscar que le transmitan sus impresiones de la tarea que están desarrollando y deberán profundizar, además de disponerse a que le den nuevas ideas o consejos para dar mayor efectividad a un control que, en líneas generales, está siendo bien evaluado.
El día de hoy, de acuerdo el plan estratégico de control, está enfocado en los accesos a la Ciudad. Pero en los próximos días el foco estará puesto en otras áreas críticas, que seguramente incluirá el control del narcomenudeo, ante el temor de eventuales desbordes sociales en los barrios porteños más críticos y el conurbano bonaerense.
En líneas generales, se aseguró de que las fuerzas de seguridad elaboraran un plan para garantizar la seguridad en estas zonas, que prevé desarrollar un sistema rápido y efectivo para cuando la cuarentena avance en el calendario y se haga más difícil la contención.
En Casa Rosada, mientras tanto, se desarrolló desde temprano una reunión de Gabinete económico que estuvo conducida por el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero. Participaron el ministro de Economía, Martín Guzmán, el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, además del titular del BCRA, Miguel Ángel Pesce, la titular de la AFIP, Mercedes Marcó del Pont, y la vicejefa de Gabinete, Cecilia Todesca.
Se espera el anuncio de nuevas medidas para la tarde en beneficio de los autónomos y las pymes, y tolerancia impositiva tanto en términos previsionales como de otras cargas nacionales que podrían incluir IVA, impuesto al cheque y moratorias, tal como lo reclamaron varias cámaras empresarias, aunque todavía hay un gran debate interno en el Gobierno.
SEGUÍ LEYENDO:
+