El juez Marcelo Martínez De Giorgi continuará al frente de la investigación que quedó abierta sobre el dinero que movió a través de testaferros Daniel Muñoz, el secretario privado de Néstor Kirchner que falleció en 2016 y que resultó una pieza clave en el sistema de recaudación descripto en la causa de los cuadernos. Es que tal como informó Infobae Martínez De Giorgi había resulto inhibirse por cuestiones de “decoro” en ese tramo de la investigación. Explicó que tenía "un vínculo de conocimiento y trato frecuente a nivel familiar” con el abogado Miguel Angel Plo, ex defensor de Carolina Pochetti -viuda de Muñoz- y también procesado y detenido por maniobras de lavado de dinero.
El juez, entonces, envió ese tramo del caso a sorteo y recayó en manos de su colega Maria Servini. La magistrada rechazó hacerse cargo del tema: dijo que no eran válidas las razones esgrimidas por Martínez De Giorgi para desprenderse del expediente. Servini admitió que la situación procesal de Plo, su hija y su yerno ya fue elevado al Tribunal Oral Federal 7, quien tendrá en sus manos el megajuicio de los cuadernos, mientras que en instrucción, en el juzgado que comandó Claudio Bonadio hasta su fallecimiento, solo quedaba un “único fragmento residual” que “se limita a otros hechos y a otras personas extrañas a la causal de inhibición alegada”.
Con esta puja, el caso subió a la Cámara Federal, donde el juez Pablo Bertuzzi se inclinó por que las actuaciones quedaran bajo la órbita de Martínez De Giorgi. “Coincido con la magistrada en que, al día de la fecha, tampoco la arista pecuniaria de los hechos atribuidos a los nombrados constituye un remanente sobre el cual estimar la admisibilidad de la inhibición pretendida. El expediente formado a efectos de sustanciar el trámite de las medidas cautelares impuestas atraviesa las últimas instancias -netamente instrumentales- de previas decisiones. Por su parte, el otro legajo de tenor patrimonial no proyecta, a este tiempo, ningún dato que comprometa a Plo y su familia”, opinó.
“El panorama vigente no refleja la procedencia de las razones hoy invocadas. De ahí que corresponda que el Dr. Marcelo Martínez De Giorgi continúe interviniendo en la causa 17.459/18”, dijo Bertuzzi en la resolución a la que accedió Infobae.
El dato sella un interrogante que se había planteado cuando Martínez De Giorgi se excusó de intervenir. Era la posibilidad de que no solo el capitulo residual de la investigación sobre los bienes de Daniel Muñoz pasaran a manos de Servini sino toda los expedientes anexos ligados al caso de los cuadernos, que aún no fueron enviados al TOF 7.
Gran parte de la causa de los cuadernos ya fue elevada a juicio oral. Allí no solo está el capítulo por las anotaciones de Centeno, el remisero de Roberto Baratta, sino otros expedientes, como el de los subsidios al transporte, el de la compra de Gas Licuado o el la “cartelización” de la obra pública. Pero también hay un capítulo vinculado al dinero de Muñoz.
Por esas acusaciones fueron enviados al banquillo Pochetti, la viuda de Muñoz; el ex secretario de Cristina Kirchner, Isidro Bounine, y el ex ministro de Hacienda de Santa Cruz, Juan Manuel Campillo, entre otros. Se investiga el tramo internacional del lavado de dinero que protagonizó el fallecido ex secretario millonario de Néstor Kirchner cuando compró a través de sociedades y testaferros 16 propiedades en Estados Unidos -incluidos dos departamentos en el Hotel Plaza de Nueva York-. Implicó un movimiento de USD 70 millones.
Pero un tramo de esa causa sigue ahondando en la búsqueda de dinero y, sobre todo, en la recuperación de la fortuna que fue invertida en un terreno de las paradisíacas islas Turk and Caicos, en el Caribe, y que el gobierno de Gran Bretaña se niega a devolver. Otro de los focos bajo análisis está en determinar qué pasó con las sociedades e inversiones que delató el arrepentido Víctor Manzanares, el ex contador de la familia Kirchner.