Alberto Fernández cuestionó el accionar del Poder Judicial y sostuvo que Cristina Kirchner fue y sigue siendo “una víctima de la mala justicia”. El presidente hizo hincapié en la necesidad de que haya “jueces dignos, honestos y probos”.
En una entrevista que le concedió a Viviana Canosa para el programa Nada Personal, el Jefe de Estado negó estar “enojado” con la Justicia y descartó que en su gestión haya una dependencia del Poder Judicial al Ejecutivo: “Yo no voy a tener un Comodoro Py”. “La justicia determina, entre otras cosas, un bien tan sagrado como la libertad nuestra, necesitamos que funcione bien”, agregó. En ese sentido cuestionó que “en todos estos años la Justicia ha construido causas, manipulado testigos y ha mantenido detenida a gente que no tenía que haber estado detenida”.
Al ser consultado sobre si la vicepresidenta sostiene lo mismo, respondió: “Cristina ha sido víctima de esa mala justicia, y es víctima aún hoy”. Tras la acusación, Fernández recordó que durante la campaña dio “nombres (de jueces) y se enojaron”. “No quise involucrar a toda la justicia porque es injusto, la justicia está llena de jueces probos y dignos”. Al respecto remarcó la necesidad de que haya “jueces dignos, honestos y probos” para un correcto funcionamiento del Poder Judicial.
“La justicia no tiene que ver de que teléfono lo llaman a un juez, tiene que ver con criterios objetivos y técnicos de justicia. Necesitamos una buena justicia, nada más”, expresó el Presidente, quien dejó en claro que con su Gobierno “los jueces hagan lo que tengan que hacer, pero que sean dignos”.
Para Fernández durante la democracia se ha “prestado atención” al Poder Ejecutivo y al Legislativo, pero nunca a “la institución judicial”. En ese sentido apuntó que “los jueces amigos del poder están en un mercado, y el que compra en el mercado los tiene de jueces; el poder cambia de mano y esos jueces están al servicio del poder de turno”, denunció. “Conmigo se terminó eso, he visto sufrir a mucha gente con detenciones injustas”, declaró.
Consultado por la situación de Milagro Sala, dijo que “nos daría tranquilidad” que la Corte Suprema de la Nación “revise el caso”. “Tenemos muchas dudas sobre cómo funcionaron esos procesos en Jujuy”, cuestionó.
Las declaraciones de Fernández se dan en la semana en la que el Gobierno tensará aún más la relación con el Poder Judicial cuando el jueves se discuta la sanción de la ley de reforma de las jubilaciones de privilegio en el Senado de la Nación. Al respecto, el Presidente criticó a la oposición que acusa al Poder Ejecutivo de generar un vaciamiento de la justicia: “El que se jubila, privilegia su bolsillo y eso es legítimo, pero que no me digan que estoy vaciando la justicia”.
"Lo que estoy haciendo es corrigiendo una situación de inequidad. Ellos pueden quedarse y seguir haciendo su trabajo”, enfatizó Fernández sobre la iniciativa que ya cuenta con media sanción en Diputados y espera que sea aprobada este jueves por la Cámara Alta.
En el plano judicial, también se refirió al caso de Fernando Báez Sosa, el joven que fue asesinado a golpes por un grupo de rugbiers. “Hay que ser inflexibles, no se puede ser contemplativo porque un divertimento que mata es algo imperdonable”. Además reveló que se comunicó con el abogado de los padres de la víctima para ponerse a disposición: “No quiero que piensen que estoy usando el tema, ellos saben que yo estoy cuando me necesiten”, concluyó.
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