Minutos después de las 11:00, en la plaza de armas del edificio Libertador el Ministro de Defensa, Agustín Rossi, puso en funciones al nuevo jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, General de Brigada Juan Martín Paleo, en reemplazo del saliente Teniente General VGM, Bari del Valle Sosa, quien estuvo al mando de la máxima estructura militar del país durante los últimos cuatro años. La ceremonia marcó el inicio de una zaga de eventos similares que terminará alrededor del 10 de marzo cuando todos los altos mandos salientes hayan sido relevados.
Luego de todas las formalidades de rigor, Rossi reafirmó lo que ya se perfila como una firme intención del Gobierno: la superación de cualquier tipo de grieta entre las autoridades políticas y los miembros de las fuerzas armadas.
El jefe de la cartera de Defensa recordó una vez más que los oficiales superiores que dejan sus cargos alcanzaron la cima de la carrera militar durante su anterior gestión: “Son profesionales brillantes y con carreras intachables, como también lo son quienes los suceden en sus cargos". El Ministro se mostró “ilusionado” por lo que será su segunda vez en el cargo y si bien no pasó por alto la delicada situación económica del país, se manifestó optimista respecto a los logros que se podrán alcanzar especialmente considerando el capital humano que poseen las fuerzas armadas.
Por otra parte, intentando interpretar el sentir militar, Rossi destacó que “antiguedad y mérito son los pilares fundamentales de la autoridad del soldado”, reivindicando el nuevo rol que se le ha asignado al Estado Mayor Conjunto de las FFAA y dirigiéndose al flamante jefe, el Ministro puso especial énfasis en el carácter de “militar de mayor jerarquía de toda la estructura castrense que a partir de hoy detenta”.
Por su parte, el Gral. Paleo abogó por trabajar con la mira puesta en los cadetes que las tres escuelas de formación militar acaban de incorporar. “Ellos serán los Generales , Almirantes y Brigadieres del año 2055. No es menos cierto que hoy están ingresando a distintas universidades los dirigentes políticos de la defensa de ese mismo año. Por ellos tenemos que trabajar todos juntos”.
Durante el último tramo de su gestión como diputado nacional, Rossi impulsó (y obtuvo media sanción por unanimidad) un proyecto de ley relacionado con la obtención de fondos extrapresupuestarios para la defensa (FONDEF) mediante el cual se obtendrán anualmente unos USD 250.000.000 que deberán ser utilizados exclusivamente para inversión en material operativo (no será en ningún caso destinado al pago de sueldos o servicios).
Esta iniciativa le valió al ex legislador por la provincia de Santa Fe un plácido reingreso a la cartera de defensa, ya que la comunidad militar valora muy positivamente que desde la política se comprenda que sin presupuesto y sin reequipamiento el futuro de las FFAA es inviable.
En diálogo con Infobae, Agustín Rossi afirmó: “Ha sido una transición tal como la habíamos pensado y usted mismo ha podido ver aquí el clima de armonía que todos han vivido con igual sentir. Estoy muy conforme con las decisiones que hemos tomado en materia de recambio de cúpulas. En el caso particular de Paleo, se dan todas las condiciones que en lo personal había imaginado y tal como lo creo es sin lugar a dudas el oficial superior de más jerarquía y con los mayores méritos”.
Luego de sostener que los mandos salientes tuvieron un comportamiento extraordinariamente solidario al acompañarlo en los primeros meses de la gestión, Infobae requirió del ministro alguna precisión sobre cuál será la impronta que le dará a las fuerzas a partir de haber terminado la conformación de la nueva conducción.
“Como dije en mi discurso, estoy muy entusiasmado, con ganas y con ideas y con un Presidente que nos apoya. Es obvio que tenemos necesidades básicas como el reequipamiento que es muy necesario. Estamos trabajando en ello pero como también dije estamos en una situación económica difícil, pero estoy seguro que vamos a dar las respuestas que los argentinos esperan de nosotros”, sostuvo.
El fin de los veteranos de guerra en la conducción de las FFAA
Tanto el Teniente General Sosa como el Brigadier General Enrique Amrein y el Vicealmirante Eduardo Fondevila Sancet conforman una trilogía que no se volverá a repetir en la historia militar argentina. El ahora ex Jefe del EMCO, y los por algunas horas más Jefe de la Fuerza Aérea y Subjefe de la Armada, iniciaron su carrera militar como oficiales casi en forma coincidente con el inicio de la Guerra de Malvinas. Son por ello los últimos altos jefes militares en actividad que ostentan las iniciales VGM a continuación de su grado.
En 1982, los por entonces teniente Sosa, Guardiamarina Fondevila y Alférez Amrein, cumplieron distintas misiones sin imaginar que 37 años después envainarían definitivamente sus sables luego de haber llegado al máximo de lo que la carrera militar les podía ofrecer.
“Agradezco al Ejército por todo lo que me dio pero en especial por haberme enfrentado a la prueba más difícil que puede tener un soldado y tal vez cualquier ser humano: la Guerra. Toda mi carrera militar estuvo siempre iluminada por la experiencia adquirida en esos tiempos, tuve la suerte de compartir buena parte de ella con muchos otros ex combatientes héroes de guerra, muchos hoy aún están vivos y otros hicieron la ofrenda sublime de su propia vida en defensa de la patria”, manifestó Sosa.
En cuanto a su gestión al frente del máximo órgano de la conducción militar del país, el militar señala como máximo logro el haber sido parte de un grupo de trabajo que dejó sentadas las bases para el desarrollo de las fuerzas armadas de los próximos 30 años. Previo a su encuentro con Infobae y en sus palabras de despedida, el general remarcó la importancia de atender a los nuevos desafíos que la tecnología y otros factores propios del avance de la sociedad le imponen a las FFAA.
El Brigadier General VGM Enrique Amrein a la hora de resumir su experiencia bélica, se autopercibe como un testigo privilegiado de un momento histórico que lo terminó marcando para el resto de su vida. “Aprendimos a no rendirnos ante la adversidad y eso lo use en toda mi carrera”, sostuvo. En cuanto al legado que le deja a sus sucesores, señala como más significativo el dejar una fuerza cohesionada al margen de las falencias operativas que se presentan por no tener el equipamiento necesario".
“Después de Malvinas uno ve la vida de otra manera, ve la profesión de otra manera. Se replantea la relación con los subordinados, qué mensaje transmitir y cómo transmitirlo. Recuerdo que estaba despidiéndome de toda mi familia porque pensaba que no llegaba, que no llegaba vivo. Mientras hacía operaciones de combate, al mismo tiempo me veía despidiéndome de mis seres queridos. Es terrible y muy fuerte”. Con la voz a punto de quebrarse el aún subjefe de la Armada, recuerda la experiencia extrema que vivió en Malvinas cuando la aviación inglesa literalmente hizo desaparecer el puente de mando del buque que tripulaba (Aviso Alférez Sobral) cobrándose la vida del comandante de la unidad- Capitán de Corbeta Sergio Gómez Roca- y otros siete tripulantes. No obstante Fondevila se declara satisfecho por su labor en la Armada y por entregar la fuerza a lo que considera un sólido equipo de trabajo que continuará la tarea.
El fixture de recambios militares, continuará este viernes a las 10:00 en el edificio Cóndor, lugar en el cual el Brigadier Amrein entregará la conducción de la FAA al Brigadier Xavier Isaac. Posteriormente a las 12:00 en el Edificio Libertad, José Luis Villán el primer oficial de Infantería de Marina en alcanzar el grado de Almirante hará lo propio y cederá el mando en favor del Contraalmirante Julio Guardia. Sobre el final del día a las 18:00 El Teniente General Claudio Pascualini será relevado por el General Humberto Cejas. Los respectivos subjefes y otros altos mandos subordinados a estos, formalizarán los traspasos durante la próxima semana.
FOTOS: Thomas Khazki