Agustín Salvia, director del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina (UCA), explicó hoy a Infobae que la decisión de dar a conocer una proyección de datos del INDEC donde se preveía que la pobreza se iba a ubicar en el 32% en el tercer trimestre del año pasado respondía a “un trabajo técnico interno” y ratificó que, según el informe del organismo privado que mide la pobreza, se ubica en 40,8 por ciento en la Argentina.
Salvia dialogó hoy con un grupo de estudiantes y docentes de la UCA de Ciencias Económicas y más tarde admitió ante este medio: “Todas las proyecciones que hicimos sobre los datos de Indec de pobreza respondían a un ejercicio académico interno y que por un error de comunicación de nuestra parte se filtraron en las redes sociales”.
Sin embargo, Salvia remarcó que las estimaciones del 40,8% de pobreza que dieron a conocer no cambiaron, son las más altas de la última década y se trata de cifras cercanas a las de 2006 y 2007.
En diciembre pasado, el econometrista Martín González Rozada, de la Universidad Di Tella, estimó en un 33% el nivel de pobreza en base a las proyecciones de las cifras oficiales y, casi en forma simultánea, la UCA hizo una estimación de proyección similar de los datos de INDEC, donde especulaba que la pobreza afectaría a 32,6% de los argentinos y la indigencia, a 7,3%.
En diálogo con Infobae, Salvia ratificó que en el Observatorio de la UCA mantienen los datos que dieron a difundir en diciembre respecto al 40,8% de pobreza y aclaró que las proyecciones que hicieron de las mediciones del INDEC solo eran para consumo interno. Se trata, en ese caso, de trabajos académicos que se realizan todos los años aunque esta vez tuvieron una repercusión en las redes sociales que no esperaban. Así, la UCA reiteró que no coincide con los datos del INDEC, más allá de que metodológicamente se haya buscado comprender su origen y fundamento.
¿Cuál fue el error de la UCA y por qué se cometió?, preguntó Infobae a Salvia. “Se trató de un error de comunicación –contestó–. El hecho de haber difundido un trabajo técnico de consumo interno que sólo interesa a unos pocos especialistas y que se publicó en Twitter sin evaluar el impacto político que todo eso iba a generar fue un gran error”.
“Creo que subestimamos, por ignorancia, la repercusión en las redes de un trabajo de juego académico que siempre hacemos en relación a las proyecciones del INDEC”, añadió.
Además, Salvia expresó que ese “error de comunicación” fue utilizado por mucha gente que tenía un enfrentamiento con la UCA por diversos motivos, entre ellos, por haber participado en la convocatoria del gobierno de Alberto Fernández para apoyar la creación del Consejo de Lucha contra el Hambre.
Está claro que los datos del Observatorio de la Deuda nunca conformaron a ningún gobierno en los últimos años: el kirchnerismo los cuestionaba por poner en tela de juicio al INDEC y durante la gestión de Mauricio Macri se objetó a la UCA por dar datos que la gestión anterior creía que no se ajustaban a la realidad del país en su plenitud.
“No soy ingenuo y sabemos que nuestra postura y nuestros datos siempre molestan a algunos. Pero vamos a seguir manteniendo la conducta intachable y profesional que siempre tuvimos”, añadió el académico de la UCA.
De esta manera, Salvia defendió la “transparencia académica y el profesionalismo” de los informes del Observatorio de la Deuda Social. E insistió en que la metodología de medición de la UCA no se modificó, se mantuvo en el 40,8% de nivel de pobreza del tercer trimestre del 2019 y destacó el “valor profesional” de Jorge Todesca, el ex titular del INDEC, por intentar recuperar la credibilidad que ese organismo había pedido durante la intervención que sufrió en el kirchnerismo.
En tal caso, Salvia dijo que el otro error de la UCA fue querer explicar o sostener el informe del INDEC, “una decisión que no teníamos que haber tomado porque no nos compete”.
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