La vicepresidente Cristina Kirchner presentó su libro “Sinceramente” en la 29° Feria Internacional del Libro de La Habana en el marco del nuevo viaje que emprendió rumbo a Cuba para visitar a su hija Florencia. Con la presencia del presidente del régimen Miguel Díaz Canel, y acompañada por el escritor Marcelo Figueras, Cristina Kirchner realizó la primera presentación de su libro desde que es vicepresidente y habló de la renegociación de la deuda con el FMI.
“Yo me pregunto, cuando dicen ‘no, no se puede hacer una quita al capital del FMI porque su estatuto prohíbe hacer quitas’. ¿Pero cómo que el estatuto del FMI prohíbe hacer quitas? También prohíbe que se den préstamos para permitir fugar el dinero. ¿Y por qué vamos a hacer valer una prohibición y la otra no?”, afirmó Cristina Kirchner, que además destacó que quiere “que apliquen el estatuto entero”.
En ese sentido, consideró que de esta renegociación “debe participar el conjunto de la sociedad porque es la sociedad la que la va a pagar". Y agregó: "Todos tenemos que tener buena fe y todos tenemos que respetar las normas. Por lo menos debería establecer una quita sustancial porque hizo un préstamo comprometiendo el 60% de la capacidad prestable del organismo y se hizo violando las obligaciones que tiene el propio FMI”.
En esa línea, destacó que la nueva directora del Fondo, Kristalina Gueorguieva, separó a David Lipton y lo señaló como el responsable “de ese préstamo ilegal”. “Porque se advirtió que con ese préstamo se estaba entrando los dólares para poder sacarlos. Esto está prohibido”, dijo.
A continuación, Cristina Kirchner repitió uno de los conceptos que siempre destaca Alberto Fernández: “No podemos pagar si no podemos crecer, y no podemos crecer si el Estado no inyecta fondo a la economía. No se sale de una recesión restringiendo el gasto del Estado. Siempre el principal inversor ha sido el Estado. Si hay recesión nadie va a pagar ni medio centavo, y se sale de la recesión con una gran inversión del Estado”.
Por otro lado, la Vicepresidenta planteó que la situación actual debería ser un punto de inflexión y remarcó la necesidad de “investigar” cómo fue el proceso de endeudamiento para que no vuelva a “suceder lo mismo”.
“Sturzenegger estaba en el equipo de Cavallo, vino por segunda vez y volvió a hacer lo mismo. Es natural, si lo hizo un avez y no pasó nada, encima lo premiaron. Y ahora por segunda vez Sturzenegger, más Caputo y Dujovne, volvieron a hacer lo mismo. Si mansamente dejamos que todo sea igual no sería extraño que en 4 u 8 años vuelve otra vez Sturzenegger”, acusó.
Por otro lado, se refirió a la salud de su hija Florencia, y le agradeció "al gobierno y las autoridades de Cuba, a los médicos porque realmente, como madre, tuve la experiencia fantástica de que pueda ser diagnosticada correctamente y hoy está muchísimo mejor”, detalló la ex Presidente.
Según explicó la Vicepresidenta, el “lawfare” (uso de la Justicia como medio de persecución política) en Argentina tuvo un componente mafioso: “Se tradujo en la persecución a mis hijos. Especialmente Florencia, tal vez por verla vulnerable o porque advirtieron que era un lugar muy especial para mi”.
Durante la exposición, que duró más de una hora, Cristina Kirchner relató con una sonrisa las razones detrás del frío gesto hacia Mauricio Macri durante la ceremonia del traspaso de mando.
“Cuando él me extendió la mano por unos instantes pensé en no dársela. La verdad que no se la quería dar. No soy hipócrita. Después de todo lo que había hecho contra mí y contra mi familia, me parecía un gesto de hipocresía. No me gusta fingir, mis sentimientos son mis sentimientos”, contó.
Pero luego, intentó quitarle importancia al comparar el episodio con una escena protagonizada por Donald Trump y Nancy Pelosi, líder de la oposición en el Congreso.
“Trump no solamente no le da la mano, le da vuelta el cuerpo. Y Nancy Pelosi le rompió el discurso. ¿Se imaginan eso en la Argentina?. Increíble. ¿Ustedes escucharon algún comentario acerca de la grieta? Se dan cuenta lo tilingos que somos los argentinos. Nos hubieran excomulgado si hacíamos algo así”, dijo con una sonrisa.
Casi sobre el final de la charla, la Vicepresidenta destacó que durante sus dos mandatos se logró “mucha integración política” con otros países de la región pero reconoció que “no tuvo traducción en un proceso de integración económica”.
Tras recordar una discusión amigable con el venezolano Hugo Chávez debido a que su país compraba arroz en Estados Unidos en lugar de comprarlo en Argentina, Cristina recordó que durante su gestión se compró una flota de aviones Embraer en Brasil. “Hoy hemos recuperado Aerolíneas pero Embraer fue comprada por la Boeing. Embraer ya no es más brasilera. ¿O a Dilma le hicieron el juicio para qué?”, se preguntó.
Tras la presentación, el presidente cubano Miguel Díaz-Canel Bermúdez le agradeció la visita y calificó el libro como “sincero, honesto y muy necesario para comprender los desafíos en los tiempos que corren”.
Seguí leyendo: