Antonio “Jaime” Stiuso, el hombre fuerte de la inteligencia argentina hasta diciembre de 2014, se presentó el 13 de marzo de 2019 a declarar en la causa por la muerte del fiscal Alberto Nisman. Era la tercera vez que hablaba en el expediente. Pero la diferencia con las anteriores es que ni su presencia en Comodoro Py ni su testimonio se conocía hasta hoy. En su presentación, Stiuso apuntó directamente contra la vicepresidenta y ex presidente, Cristina Kirchner, por la existencia de una presunta inteligencia paralela que lo investigó.
“A los trece días del mes de marzo de 2019, comparece en la mesa de entradas de esta Fiscalía el Sr. Antonio Horacio Stiuso, quien manifestó su voluntad de brindar testimonio en el marco de las presentes actuaciones”, dice la foja 23.096 de la causa a la que accedió Infobae.
El ex director general de Operaciones de la ex SIDE se presentó ante el fiscal Eduardo Taiano para hablar sobre una carpeta que en febrero de 2017 aportó a la causa el Ministerio de Seguridad de la Nación, entonces a cargo de Patricia Bullrich. Se trata de un documento que, según la presentación, fue encontrado en el Ministerio en un sobre y habría sido elaborado durante la gestión anterior – de María Cecilia Rodríguez– y que “se vincula a la investigación por la muerte del Dr. Alberto Nisman”.
Esa carpeta contiene información sobre Nisman, su ex esposa y jueza federal, Sandra Arroyo Salgado, Stiuso y otros agentes de inteligencia. Serían datos de inteligencia ilegal y para Stiuso es la demostración de que lo seguían a él y a su familia y fue la base de lo que llamó en su declaración una “campaña mediática” en su contra. “La señora esta que presidía el gobierno pedía informes y tenía que controlar. La campaña de desprestigio iba atada a todo esto. Todo esto partía del cerebro enfermizo de la mujer”, dijo sin nombrarla sobre la ex presidente y actual vicepresidenta Cristina Kirchner, quien decidió apartar a Stiuso de la inteligencia argentina el 18 de diciembre de 2014.
En el juzgado de Marcelo Martínez De Giorgi, Stiuso se presentó como querellante de una causa en donde se investigan unos documentos que había en la residencia de Cristina Kirchner en El Calafate, secuestrada durante un allanamiento que hizo el juez Claudio Bonadio por la causa de los cuadernos. Allí aparecieron dos carpetas: una a nombre de Horacio “Jaime” Stiuso y un hombre de su confianza, Pedro “Lauchón” Viale, asesinado en un extraño operativo en 2013."House to House, vinculaciones empresas Stiuso" era el nombre de un folio con 27 hojas, tal como reveló Infobae en septiembre de 2018.
Los puntos centrales de la declaración que Stiuso hizo en marzo pasado en la causa Nisman apuntan a sostener que había una campaña de desprestigio en su contra y una inteligencia ilegal paralela. Para lo primero se basó en la carpeta del Ministerio de Seguridad; sobre lo segundo, solo sus dichos. “Si ustedes se fijan la campaña mediática, los focos principales eran los teléfonos míos”, dijo en una declaración que quedó plasmada en 14 páginas.
Muchos de los dichos que quedaron asentados en marzo y que se mantienen bajo reserva son precisiones o ampliaciones de la segunda declaración que el ex espía había hecho el 29 de febrero de 2016, ante la jueza de instrucción Fabiana Palmaghini. Según pudo saber Infobae, en aquella exposición Stiuso afirmó: “Estoy convencido de que a Albero Nisman lo mataron”, que el fiscal y él pasaron a ser “un obstáculo” para el cumplimiento del Memorándum con Irán y que “cuando la ex presidente decidió negociar con Irán, quedo esposada y como rehén de ese país”. El espía afirmó además: “Estoy seguro que Alberto era un blanco” de una inteligencia paralela.
En esta tercera declaración en la causa Nisman, Stiuso señaló que periodísticamente a comienzos de la investigación por la muerte del fiscal se difundían sus llamados del fin de semana de la muerte de Nisman con Alberto Massino, ex director general de Análisis de la ex SIDE, pero no las comunicaciones que también registraron esos días el ex jefe del Ejército César Milani o Fernando Pocino, ex director general de Reunión Interior de la ex SIDE. “Los únicos que aparecían eran los míos, los de Massino, pero no los restantes, en donde aparece la vinculación con Milani”, dijo. Todos esos teléfonos forman parte de un entrecruzamiento de llamadas que está haciendo el fiscal Taiano.
También contó que el 18 de febrero de 2015, un mes después de la muerte de Nisman, se fue del país a los Estados Unidos y que el gobierno lo investigó. “El 18 hay una intrusión en el sistema de migraciones, pidiendo por mí, el 18 a las 16:30 aproximadamente. Esa información es oficial y corresponde a otra causa que es la de la lista de espiados, creo que Bullrich y Laura Alonso hicieron una denuncia en el catorce (NdA: juzgado federal 7, secretaria 14). Ahí descubrimos que el gobierno había metido los dedos en migraciones a ver si yo estaba en el país entonces a partir de ahí focalizan la campaña una vez que aparece Alberto muerto, en los teléfonos”, relató.
En la fiscalía de Taiano le preguntaron por qué, a su criterio, esa carpeta podía estar en el Ministerio de Seguridad. Y Stiuso contestó: “Porque lo que yo analizo es que hay varios problemas que tenían, uno era el problema de la muerte de Alberto, el otro era el encubrimiento de este agente de la Federal que venían tapándolo. O sea: era una carpeta de problemas a nivel de Ministerio. Pero más que la ministra, debería ser parte de inteligencia criminal. Está la evolución de cómo comenzó la desclasificación, como desclasificaron a nosotros los archivos. Se ve que tenían algún problema, los había sorprendido cuando trasciende lo de este Yosi, porque en realidad lo habían estado encubriendo. Y después lo de Alberto, cómo manejar lo del entrecruzamiento y dirigirnos hacia la campaña oficial. Después está lo del caso nuestro, lo de la familia de Alberto, mi familia, que la señora esta que presidía el gobierno pedía informes y tenía que controlar. La campaña de desprestigio iba atada a todo esto. Todo esto partía del cerebro enfermizo de la mujer, porque esto de los encuentros íntimos lo dice en cadena oficial. En ese momento también seguían a mi señora, porque no habían podido descubrir dónde vivía. Quisieron ponerme custodia de prepo y mi abogado tuvo que ir a hablar para que la rechazara”.
Infobae se comunicó con el equipo de prensa de Cristina Kirchner para tener su opinión y al cierre de esta nota no habían contestado.
“Yosi" o “Iosi” es José Alberto Pérez, un ex agente de inteligencia de la Policía Federal, que se infiltró en la comunidad judía y que luego dijo tener información sobre la AMIA. Y lo de los “encuentros íntimos” es porque tras la muerte de Nisman la entonces presidente dijo ocho días después en cadena nacional que el fiscal y Diego Lagomarsino tenían una “íntima relación”, eran de “íntima confianza, íntima amistad”. Lagomarsino es el técnico informático que trabajaba con Nisman y que le dio el arma de la que salió el disparo. Está procesado como partícipe necesario de homicidio.
La relación Stiuso-Cristina Kirchner es de pleno enfrentamiento desde hace años. En diciembre de 2014, la entonces presidente lo echó de la ex SIDE y armó la AFI. Desde el gobierno señalaron que Stiuso usaba su cargo para cometer delitos y motorizaron una seguidilla de denuncias penales. El ex agente de inteligencia dijo en el documental de Netflix sobre la muerte de Nisman que cree que la ex presidente quiso matarlo.
Nisman fue encontrado muerto con un disparo en la cabeza el 18 de enero de 2015 en el baño principal de su departamento del complejo Le Parc, en Puerto Madero. Cuatro días antes había denunciado a Cristina Kirchner y otros funcionarios de su gobierno por el presunto encubrimiento de los acusados del atentado a la AMIA por la firma del memorándum con Irán. Al día siguiente se iba a presentar a declarar en el Congreso. Para el fiscal Taiano y el juez Julián Ercolini, quienes están a cargo de la causa, Nisman fue asesinado en el marco de su trabajo. Por ese hecho están procesados Lagomarsino y cuatro custodios del fiscal por incumplimiento de los deberes de funcionario público y encubrimiento.
En su declaración, Stiuso también dijo que sus hijas y su esposa fueron seguidas y uno de sus nietos espiado. El espionaje a sus hijas, dijo el ex agente, fue uno de los motivos para declarar. “Este es uno de los motivos por los que vine, porque las estaban controlando y quiero saber quién va a investigar ese seguimiento a mis hijas”, dijo.
También habló de “un pseudo periodista que era un agente de inteligencia militar de Milani” y reportó que Carlos Zannini, ex secretario de Legal y Técnica de la Presidencia de la Nación y actual procurador del Tesoro de la Nación, era la cabeza del “armado de la inteligencia ilegal del país”. “Acá habla (NdA: sobre la carpeta del Ministerio) de un dictamen que es público, el de inteligencia iraní. Que es el que Zannini a mitad del año 2012 no se lo deja sacar (NdA: a Nisman) y luego se saca en 2013. Que después tenía que ir a exponer a Estados Unidos y no lo dejan ir. Esto es todo una farsa. Esto es muy claro que está todo armado”, sostuvo.
El último tramo de la declaración ante Taiano apuntó a explicar dónde y cómo funcionaban las distintas dependencias de la SIDE-AFI, dónde estaban sus oficinas, con qué personal contaba y cómo era la distribución de los espacios de la sede central de la calle 25 de mayo, frente a la Casa Rosada. También le preguntaron si conocía a algunas personas de inteligencia y habló sobre cómo eran las visitas a esa sede. “Te registraba alguna visita de alguno. Pero si venía alguna persona conocida, entraba directamente o lo iban a buscar. Por ejemplo, Alberto ingresaba directamente”, dijo sobre Nisman.
La declaración de Stiuso no está en el expediente principal porque algunos datos podrían estar alcanzados por leyes de inteligencia nacional y por eso quedó reservada. Lo mismo ocurrió con la declaración que Rodríguez, la ex ministra de Seguridad, dio en la causa el 7 de marzo del año pasado, seis días antes de que Stiuso se presentara. La ex funcionaria dijo que no conocía la existencia de esa carpeta y negó que bajo su ámbito se haya cometido espionaje ilegal.
Esa carpeta fue entregada por el Ministerio de Bullrich el 7 de febrero de 2017. Dos años después, a principios de marzo de 2019, tuvo una amplia repercusión pública a través de los medios y fue citada a declarar Rodríguez. Y luego Stiuso fue espontáneamente a tribunales a hacer aportes. Por esa carpeta hay una causa penal, que también tiene el fiscal Taiano.
Después de su declaración, uno de los abogados de Stiuso se volvió a presentar en la causa. Fue el 20 marzo y llevó un escrito del ex agente de inteligencia en el que aportó el número de un teléfono celular que usaba cuando estaba en la SIDE y sobre el que había hablado en su testimonial, revelaron a Infobae fuentes con acceso a la investigación.
Esta fue la tercera declaración de Stiuso en la causa por la muerte de Nisman. Para los investigadores judiciales no reveló nada distinto de lo que ya había dicho en las anteriores. No obstante, sus dichos son considerados “importantes” dentro de la órbita del expediente.
La primera exposición de Stiuso en la causa se concretó el 17 de febrero de 2015, un día antes de irse a Estados Unidos. Allí declaró ante la fiscal Viviana Fein, bajo un gran hermetismo. Allí contó cómo era su trabajo con Nisman en el atentado a la AMIA, precisó que sabía que el fiscal trabajaba en la denuncia contra Cristina Kirchner por la firma del memorándum pero que desconocía su contenido y respondió por qué no había atendido las llamadas de Nisman.
La segunda declaración fue clave para el expediente porque provocó que la jueza de instrucción Fabiana Palmaghini envíe el caso a la justicia federal de Comodoro Py, donde Stiuso tiene vínculos con jueces y fiscales. En esa declaración, el ex agente dijo que en su opinión a Nisman lo mataron por su denuncia pero que no tenía pruebas.
Puntualmente, Stiuso aseguró que en el 2012 desde el gobierno nacional le dijeron que no investigue más a Irán por el atentado a la AMIA. “Tal orden, todos los que estábamos trabajando en el tema, la incumplimos porque seguimos trabajando y además informamos que había avances”, afirmó. También justificó por qué prefirió no comunicarse con Nisman después de su denuncia. "El gobierno siguió usando como caballito de batalla que la denuncia la había escrito yo. O ustedes se creen que ellos no sabían de la denuncia y todo lo que después intentaron tapar. Yo era el salvavidas de plomo de Alberto y el tiempo después me dio la razón”, afirmó.
Ahora, llegó la tercera declaración de Stiuso, secreta, en la que el espía más famoso del país no dejó de apuntar contra la mujer que lo sacó del poder de la inteligencia.