A menos de una semana de llegar a la Argentina como refugiado político, Evo Morales continúa con sus actividades en la ciudad de Buenos Aires. Sin embargo, esta tarde ocurrió algo curioso: el ex presidente de Bolivia debía realizar un trámite para conseguir la categoría de refugiado pero se confundió de edificio y terminó en el piso 14 de la Cancillería.
A donde debía ir Morales es a la Comisión Nacional para los Refugiados (Co.Na.Re), el organismo de aplicación de la Ley de Refugiados que debe decidir, entre otras cosas, cuánto tiempo puede quedarse una persona con asilo en el país y bajo qué condiciones. También sirve para formalizar su estatus de refugiado.
Cuando llegó al piso 14 de la Cancillería, según pudo saber Infobae, Morales se encontró con Pablo Tettamanti, funcionario de la cartera, quien lo saludó y le indicó a dónde debía ir.
La CoNaRe está integrada por cinco miembros: un representante del Ministerio del Interior, uno del Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, uno del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, uno del Ministerio de Desarrollo Social y uno del Instituto Nacional Contra la Discriminación y Xenofobia.
El domingo, Alberto Fernández recibió a Evo Morales en la Quinta de Olivos. El ex mandatario le agradeció al presidente argentino por haberle permitido quedarse en Buenos Aires. También hablaron sobre la situación boliviana, donde próximamente se realizarán nuevos comicios, y sobre la familia del líder del MAS ya que sus hijos están hace tres semanas en la Argentina.
La primera aparición pública de Morales fue el saludo a simpatizantes que realizó desde la terraza de la casa en la que vive el ex canciller boliviano Diego Pary: “Agradecer al Gobierno argentino, al pueblo argentino, el permitirme venir acá”, dijo micrófono en mano.
También jugó al fútbol con Matías Lammens, ministro de Deportes. Allí se lo vio con la remera de la selección de Bolivia con el 10 en la espalda y un short blanco. Las imágenes las viralizó el empresario boliviano Víctor Choque.
Desde el entorno de Lammens precisaron a Infobae que “el partido se organizó a partir de un amigo en común de Evo y Matías” y que tuvo lugar “en una canchita del barrio de Colegiales”.
Si bien Morales se había comprometido con el Gobierno a no realizar declaraciones políticas, el ex jefe de Estado no está cumpliendo del todo con su palabra. La primera violación a este pacto fue cuando a través de sus redes sociales criticó a la actual presidente de su país, Jeanine Áñez, y a los dirigentes Luis Fernando Camacho y Carlos Mesa, además de cuestionar la labor de la Organización de Estados Americanos (OEA).
"El gobierno de facto de Añez, Camacho y Mesa pretende volver al pasado. Hablan de privatizar y entregar nuestras empresas estratégicas a las transnacionales. Están preparando el retorno del FMI. El pueblo boliviano junto al #ProcesoDeCambio luchó por recuperar nuestros RRNN.”, escribió el líder socialista.