Gustavo Beliz volvió a la actividad en la Argentina y ya se convirtió en una suerte de gurú que predica sobre la tecnología en el mundo del trabajo. Los sindicalistas lo escuchan con atención (estuvo en la CGT con Alberto Fernández y hablará este miércoles en el congreso de los mercantiles de Armando Cavalieri), pero quizá algunos comiencen a mirarlo con desconfianza: anoche habló elogiosamente del papel de los robots en el ámbito laboral, algo a lo que el 90% de los dirigentes gremiales se resiste con firmeza para no afectar las fuentes de trabajo.
“La automatización genera temor al escuchar hablar de un robot porque se lo considera un competidor que hará que trabajadores pierdan su trabajo. Sin embargo, las máquinas pueden ayudarnos a realizar mejor nuestras tareas y no a destruir la forma como las ejecutamos actualmente”, destacó Beliz en una conferencia que brindó durante el festejo del 60° aniversario del Instituto Superior del Profesorado Técnico de la UTN (Universidad Tecnológica Nacional).
El ex ministro de Justicia, que tendrá un cargo en el próximo gabinete nacional, quizá se convierta en un hereje partidario porque ayer se permitió modernizar uno de los pilares del peronismo al hablar de “justicia social tecnológica”: “Solamente el 27% de la población de América Latina está cubierta por redes 4G frente al 77% de las poblaciones de los países centrales –afirmó Beliz-. Para nuestro país se hace indispensable un nuevo contrato social tecnológico. En esta línea, el futuro presidente, Alberto Fernández, convocó a las centrales gremiales a trabajar en una gran iniciativa de los trabajadores organizados en pos de una justicia social tecnológica.”
En su conferencia, que llevó como título “Dignidad y futuro del trabajo frente al cambio tecnológico exponencial”, Beliz advirtió que “la tecnología es una herramienta y un arma. Venimos trabajando en un informe Industria 4.0 que sólo alcanza a menos del 10% de las empresas de nuestro país. Hay una brecha de inserción internacional entre aquellas industrias que son capaces de vender su producción al resto del mundo y las que no. Las primeras tienen 6 o 7 veces más capacidad de incorporar tecnología. Esto habla de inequidad, pero también de múltiples dificultades en cuestiones de acceso y también de implementación.”
Lo escuchaba un atento auditorio entre quienes estaban el rector de la UTN, Héctor Aiassa; el presidente del instituto de la UTN, Sergio Bohn; funcionarios nacionales y porteños, políticos, diplomáticos y rectores de escuelas técnicas porteñas y decanos de facultades regionales.
Beliz también se refirió al manejo digital de la información y se preguntó si los datos de cada uno de nosotros deberían ser propiedad pública o privada, y si deberían tener una función social o ser reservados.
Uno de los temas que recuperó en distintos momentos de su disertación fue sobre el manejo digital de la información. “¿Nuestros datos debieran ser propiedad pública o propiedad privada? ¿Debieran tener una función social o ser reservados? “Es un debate que no está cerrado en el mundo. Las guerras del futuro no serán solo por un pedazo de tierra o por materia prima. De hecho, ya son en base al uso y la propiedad de los datos y de su almacenamiento", aseguró Béliz.
Y remató: "La economía mundial se construye mitad tangible, mitad digital. El comercio electrónico es un buen ejemplo de esta economía mixta. Actualmente 7 de las 10 empresas más ricas del mundo son tecnológicas”.
Beliz siempre tuvo bajo perfil y es remiso a comentar qué hará en el gabinete de Alberto Fernández, pero el exministro de Néstor Kirchner acompaña al presidente electo a sus reuniones más importantes y fija posición en los asuntos claves del próximo gobierno peronista.