Legisladores de las diferentes vertientes del peronismo consensuarán un proyecto único para repudiar los hechos que generaron la renuncia del presidente de Bolivia, Evo Morales. Lo mismo sucedió con los diputados del interbloque Cambiemos que definieron acordar una propuesta para debatir en la Cámara baja en la sesión que está programada para hoy miércoles a las 15:30. Además, acordaron dar quórum.
En principio, el peronismo y el frente de Izquierda habían presentado seis proyectos diferentes para tratar durante la sesión especial a la que convocaron. Uno impulsado por el presidente del bloque Frente para la Victoria-PJ, Agustín Rossi; otro por Felipe Solá y el bloque Red x Argentina; un tercero que presentó el diputado de San Luis Andrés Vallone; uno presentado por Cecilia Moreau, del Frente Renovador, y dos que presentaron los legisladores de la izquierda, Nicolás Del Caño y Romina Del Plá.
Las diferentes patas que tiene el Frente de Todos trabajaron durante la tarde del martes en la redacción de un solo proyecto en el dejarán constancia que en Bolivia hubo un “golpe de Estado” y que reclaman “el restablecimiento del orden constitucional”.
A ese proyecto es probable que se sume el bloque Justicialista que lidera Pablo Kosiner y que integran legisladores que responden a los gobernadores del PJ. La intención del diputado salteño es buscar un acuerdo y trabajar sobre un solo proyecto. Hay una intención clara de los diferentes sectores del peronismo de avanzar en proyecto único sin confrontar entre ellos.
La izquierda irá al recinto con dos proyectos diferentes. Ambos coinciden en que hubo un golpe de Estado y cuestionan el rol de la Organización de Estados Americanos (OEA) durante los días de crisis en Bolivia. El documento firmado por Del Plá apuntó contra el gobierno nacional. Lo acusa de ser cómplice “de las acciones golpistas” contra Evo Morales. Mientras que el de Del Caño hace hincapié en la necesitad de que “los sectores populares se organicen para enfrentar el avance de la derecha reaccionaria”. Distintas miradas en un mismo espacio.
Los diferentes sectores del peronismo y la izquierda se unirán para lograr el quórum en el recinto y poder debatir los proyectos. Por la tarde, después de acercar posiciones, en el Frente de Todos sacaron cuentas y creen que llegarán al número necesario para poder debatir todos los proyectos.
A ellos se sumó el diputado del PRO, Daniel Lipovetzky, uno de los primeros dirigentes del oficialismo en marcar su postura con respecto a la crisis en Bolivia. El legislador no estuvo de acuerdo con el comunicado de la Cancillería argentina y advirtió que lo ocurrido en Bolivia era un golpe de Estado. El diputado oficialista trabajó para ayudar a la oposición a conseguir el quorúm antes de que el interbloque de Cambiemos definiera una postura.
Cambiemos es la fuerza política que más tuvo que trabajar para lograr un acuerdo con respecto al proyecto sobre Bolivia. Es que los diferentes sectores de la coalición tienen posturas encontradas con respecto a lo sucedido en el país vecino, pero querían evitar ir divididos al recinto. Presentar dos proyectos distintos en el final del mandato de Mauricio Macri no era una buena señal para una coalición golpeada por los resultados electorales y el desgaste de la gestión.
En el atardecer de este martes los legisladores que conforman el interbloque Cambiemos se reunieron para lograr consensuar una postura común sobre la situación en Bolivia. Una tarea difícil teniendo en cuenta que la UCR y el PRO tienen miradas diferentes. Unos piensan que hubo un golpe de Estado. Los otros, no.
El presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, y el presidente del interbloque oficialista, Mario Negri, apelaron a encontrar puntos en común en el espacio para poder emitir un único documento y tener una postura uniforme en el recinto. Muñeca y acuerdos para llegar al consenso. En el encuentro acordaron que darán quórum.
En el interbloque llegaron a un acuerdo semántico con respecto al proyecto. Para marcar diferencia con el peronismo, el documento de Cambiemos, que se presentará en las primeras horas del miércoles, se referirá a las denuncias de fraude en las elecciones bolivianas y la falta de transparencia en el escrutinio. También hablará de “quiebre del orden institucional” y de una condenada a “todo golpe a la democracia”. Es la posición que encontraron para zanjar las diferencias internas en Cambiemos y lograr que toda la coalición vote unida en el Congreso.
Sesión en el Senado
Los senadores nacionales del peronismo y el kirchnerismo convocaron hoy a una sesión especial a través de una presentación en la que repudiaron “el golpe de Estado perpretado en el Estado de Bolivia contra un gobierno democráticamente electo”.
El documento fue firmado por el presidente del bloque del PJ, el cordobés Carlos Caserio, y Marcelo Fuentes, presidente del bloque que lidera la vicepresidenta electa Cristina Kirchner. Los dos presidentes se comunicaron en la noche del lunes y acordaron firmar un solo proyecto para debatir en la sesión que está programada para las 16 del miércoles, casi en paralelo a la que se llevará adelante en la Cámara de Diputados.
“Como argentinos de profunda tradición de paz y de respeto a la voluntad popular, instamos al Poder Ejecutivo a pronunciarse en contra de este golpe cívico-militar que ha interrumpido el orden democrático y constitucional”, expresaron. Además, le pidieron al gobierno de Mauricio Macri que conceda asilo a cualquier integrante del gobierno de Evo Morales.
El interbloque de Cambiemos en el Senado aún no presentó ningún proyecto. Sin embargo, evalúa hacer una declaración haciendo foco en el respeto a la institucionalidad y la democracia. Trabajan junto a los diputados oficialistas para llevar la misma posición al recinto.
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