En medio de los graves incidentes en Chile, un grupo de manifestantes entró a los jardines de la residencia del embajador argentino y rompió vidrios. Según informaron fuentes de la Cancillería a Infobae, el embajador argentino, José Octavio Bordón, se encuentra bien y fue evacuado por prevención.
En una nueva jornada de protestas contra el gobierno de Sebastián Piñera, los manifestantes lograron vencer uno de los portones de la residencia del embajador argentino y llegaron hasta los jardines. De acuerdo a lo que pudo saber este medio, allí arrojaron piedras y rompieron algunos vidrios. Las fuerzas especiales se hicieron cargo de la seguridad del embajador Bordón, la de su familia y el personal.
“Entraron. Estamos pensando en evacuar. Estamos acá con la seguridad y estamos evaluando la situación”, sostuvo Bordón en declaraciones al diario Perfil. Y agregó: "Fueron varias personas, ingresaron y rompieron vidrios... Es un momento preocupante. Fue un desastre”.
La residencia del embajador argentino en Santiago de Chile está enfrente de la sede de la Universidad privada Pedro de Valdivia, que fue incendiada por los manifestantes en medio de duros enfrentamientos con la policía.
Este viernes, miles de manifestantes se manifestaron en la céntrica Plaza Italia en el marco de las protestas contra el gobierno del presidente Sebastián Piñera. Al caer la tarde, una marea de manifestantes colmó -por tercer viernes seguido- por completo la avenida Alameda para avanzar hacia la Plaza Italia, portando banderas chilenas y carteles con mensajes contra el gobierno.
Si bien la mayoría de los manifestantes marcharon pacíficamente, un grupo de encapuchados incendió una parte de una sede de la Universidad Pedro de Valdivia. A pocas cuadras, otro grupo saqueó una iglesia histórica: la Parroquia de La Asunción -construida en 1876-. En medio de enfrentamientos con la policía utilizaron bancos y otros muebles para armar barricadas.
Está semana, Piñera endureció el tono para defender el orden público pero no realizó ningún anuncio social para responder al reclamo de los manifestantes que reclaman mejores jubilaciones, cambios en los sistemas de salud y educación, entre otras demandas que mantienen a los chilenos movilizados desde hace 22 días en todo el país.
El giro de la estrategia del presidente chileno para neutralizar la ola de protestas, que incluyó un endurecimiento de la agenda de seguridad y la convocatoria al Consejo de Seguridad Nacional (Cosena), desató hoy críticas desde la oposición y dividió a la propia coalición gobernante “Chile Vamos”.
Otra marea de manifestantes, en su mayoría jóvenes, desfiló frente al palacio presidencial La Moneda, entonando consignas contra Piñera y reclamando su renuncia.
Seguí leyendo: