En las elecciones del 27 de octubre, Alberto Fernández y Cristina Kirchner obtuvieron una arrasadora victoria en las cárceles, según los datos del escrutinio definitivo realizado por la Justicia Electoral entre los privados de libertad, para la categoría de presidente y vice.
La fórmula del Frente de Todos sacó el 86,87% de los votos afirmativos, al conseguir 14.041 sufragios del total de los 16.670 presos que participaron.
Mientras tanto, la lista de Juntos por el Cambio encabezada por Mauricio Macri y Miguel Pichetto solo obtuvo el 7,72% del apoyo entre los detenidos, 1.249 votos afirmativos. En tercer lugar se ubicó Consenso Federal con 2,27% (367 votos), seguido del Frente de Izquierda, con 1,89%, equivalente a 307 votos, uno menos que los votos en blanco que sumaron 308.
A pesar de que 57.259 personas estuvieron habilitadas para sufragar en 301 unidades penitenciarias en todo el país, solo votó el 29,11% de los presos que estaban en el Registro de Electores Privados de Libertad, según información brindada por la Justicia Electoral.
Los detenidos votaron a través de una boleta única de papel que contiene los candidatos a presidente y diputados nacionales, en la que deben marcar con una cruz su voto. Según la Ley 25.858, los procesados que se encuentren cumpliendo prisión preventiva también tienen derecho a emitir su voto en la unidad carcelaria donde están detenidos.
Entre los detenidos habilitados a votar figuraron algunos ex funcionarios del gobierno kirchnerista como el ex vicepresidente Amado Boudou; el ex ministro de Planificación Julio de Vido; su ex mano derecha, Roberto Baratta; los secretarios Ricardo Jaime y Juan Pablo Schiavi; el empresario Lázaro Báez, y el dirigente del partido Miles, Luis D’Elía.
En las primarias, el Frente de Todos, había obtenido el 74,7 por ciento de los votos en las cárceles de todo el país sobre Juntos por el Cambio, que recibió el 7,65 por ciento de los sufragios. El tercer lugar fue par el Movimiento al Socialismo (MAS) con el 5,5 por ciento.
En las PASO, de las 57.672 personas privadas de la libertad que estaban habilitadas para votar lo hicieron 13.826, el 24 por ciento del padrón. El bajo porcentaje de votación -comparado con el 76 por ciento de participación en todo el país- es porque no todos los habilitados para votar cuentan con su documento para hacerlo o porque, si bien el voto es obligatorio, deciden no hacerlo, lo que queda asentado en el padrón. El Frente de Todos sacó 10.329 votos y Juntos por el Cambio 1.058. La diferencia fue de 67 puntos.
En las cárceles se vota con boleta única y solo pueden hacerlo los detenidos que no tienen condena firme, ya que a quienes la tienen el Código Nacional Electoral y el Código Penal los excluye del sufragio, a pesar de que esa prohibición fue declarada inconstitucional por la Cámara Nacional Electoral. Quienes pueden votar están dentro del “Registro de Electores Privados de Libertad” y en las prisiones solo se vota para las categorías nacionales, excepto en la ciudad de Buenos Aires, donde los presos detenidos y con domicilio en ese distrito pueden hacerlo también para los tramos locales de la boleta.