Cuando Alberto Fernández y Cristina Kirchner finalmente hicieron su entrada triunfal, una multitud estalló en gritos y aplausos en el búnker de Chacarita. La foto la completaron –entre otros– Axel Kicillof, Sergio Massa, Máximo Kirchner, Eduardo “Wado” de Pedro, Estela de Carlotto, Fabiola Yáñez y Estanislao Fernández, el hijo de Alberto.
Sin embargo, fueron algunas ausencias en el escenario de los festejos las que llamaron la atención de militantes, curiosos y periodistas, dando lugar a todo tipo de especulaciones y lecturas políticas.
Desde las 20 en adelante, en el segundo piso y en el área VIP del Complejo Cultural C charlaban distendidos varios gobernadores que viajaron especialmente desde sus provincias para festejar con Alberto. El sanjuanino Sergio Uñac había llegado junto con el diputado nacional y presidente del PJ José Luis Gioja. Ambos se tomaron un avión apenas cerró oficialmente la votación en su provincia.
A lo largo de toda la campaña, Fernández dijo una y otra vez que su gobierno buscará reforzar el federalismo y que su gestión se basará en el consenso con los líderes provinciales. De hecho, cuando resultó ganador en las PASO dio su discurso de agradecimiento escoltado en el escenario por el tucumano Juan Manzur.
Sin embargo, anoche tanto Manzur como Uñac tuvieron que observar desde el llano los discursos de Axel, Cristina y Alberto. Gioja subió apenas un momento sobre el final. Tampoco tuvieron un rol protagónico el gobernador entrerriano Gustavo Bordet y Omar Perotti, recientemente electo en Santa Fe. Todos estaban presentes y felicitaron al nuevo presidente en persona y a través de las redes sociales.
También miraron desde abajo Fernando Gray, intendente del partido de Esteban Echeverría; Ariel Sujarchuk, de Escobar; y Lucas Ghi, de Morón. La explicación oficial fue que sólo subieron al escenario quienes estuvieron directamente involucrados con estas elecciones. Aunque resulta curioso que gobernadores e intendentes no estuvieran incluidos en esa categoría.
Otro que no pudo pisar el escenario fue Matías Lammens, quien cayó por veinte puntos de diferencia contra Horacio Rodríguez Larreta. El candidato porteño había contado con un fuerte apoyo de Alberto Fernández a lo largo de la campaña, especialmente en el tramo final, y en los festejos de las PASO tuvo un lugar privilegiado. Él como el resto de los candidatos porteños –Mariano Recalde, Pino Solanas y Victoria Donda– fueron los primeros en subir al escenario para agradecer a la militancia.
Según explicaron a Infobae fuentes cercanas al Instituto Patria, fue Cristina Kirchner en persona quien decidió que el presidente de San Lorenzo se quedara detrás de escena anoche, molesta por algunas declaraciones recientes. Al parecer, lo escuchó afirmar categóricamente –en una entrevista con Luis Novaresio– que no hubiera aceptado ser candidato si la ex presidente encabezaba la fórmula.
Además de gobernadores, sindicalistas e intendentes, hubo invitados extranjeros: el ex jefe de Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero, la ex mandataria brasileña Dilma Rousseff y Celso Amorim, canciller de Lula. Todos mantuvieron un muy bajo perfil.
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