El ex titular del Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU), Omar “Caballo” Suárez, recibió hoy malas noticias. Primero porque el Tribunal Oral Federal 4, que lo juzga por asociación ilícita, le denegó un pedido de excarcelación que solicitó su defensa. Después, porque el juez federal Rodolfo Canicoba Corral decidió llamarlo a indagatoria ahora por el delito de lavado de dinero.
Según indicaron fuentes judiciales, Canicoba lo citó para el próximo 4 de noviembre. Suárez está sospechado de haberse quedado con dinero del sindicato a través de empresas controladas por gente de su entorno. Además del sindicalista, fueron citados a declarar en indagatoria su sobrino Jorge Suárez; el ex tesorero del sindicato Juan Manuel Medina y los dueños y responsables legales de la empresa Maruba SA.
La denuncia contra Suárez fue realizada por la ex interventora del sindicato, la senadora nacional de Cambiemos Gladys González, quien sostuvo que el objetivo de las maniobras era obtener el control accionario de la empresa Marítima Maruba SA, que posee el monopolio de transporte de cargo de las rutas marítimas y fluviales de Argentina.
“Caballo” Suárez quedó preso en setiembre de 2016 por orden de Canicoba. Se lo acusa de asociación ilícita para llevar a cabo presuntas maniobras para obstruir el tráfico marítimo y fluvial, provocando perjuicios a empresas navieras. Esa causa ya está en juicio oral. De hecho, hoy los jueces del TOF 4, que sustancian el debate, le negaron al acusado un pedido de excarcelación.
“No se han introducido argumentos nuevos para rever las anteriores decisiones del tribunal, en tanto no se advierte con la sola mención de precedentes jurisprudenciales de otros órganos judiciales una vinculación directa con el caso bajo estudio respecto del enjuiciado Enrique Omar Suárez”, escribieron hoy los jueces Néstor Costabel, Gabriela López Iñíguez y Daniel Obligado.
El pasado 13 de septiembre, el TOF había decidido prorrogarle por el término de seis meses la prisión preventiva “en atención a que se encontraba justificada la prolongación del proceso, a la necesidad de garantizar la comparecencia del imputado al inicio del debate y a la subsistencia, durante esta fase, de los riesgos procesales oportunamente analizados”. Es decir, el posible peligro de fuga y el entorpecimiento en la investigación.
“Caballo” está detenido pero en su casa, por razones de salud. Esa situación había generado también un tironeo entre Canicoba y el TOF hasta que el sindicalista pudo irse a su domicilio detenido. El día que comenzó el juicio en su contra, Suárez apareció con una remera de “Cristina 2019” y la foto del Papa. Dijo que estaba esperando que le mostraran las pruebas en su contra, pidió libertad a los presos políticos y responsabilizó al gobierno de Mauricio Macri de la intervención en su sindicato para “saquearlo“. El "Caballo” comandó el gremio durante casi 30 años y fue bautizado como el sindicalista “favorito” de la ex presidente.