El Tribunal Oral Federal 1 rechazó este martes excarcelar al ex ministro de Planificación Federal Julio De Vido en la causa por la presunta administración fraudulenta en Río Turbio en la que está preso desde octubre del 2017 cuando perdió sus fueros como diputado nacional. Además prorrogó su detención por seis meses.
Fuentes judiciales informaron a Infobae que el Tribunal no aceptó el pedido de excarcelación que la defensa de De Vido presentó el lunes último. Sus abogados señalaron que el próximo viernes el funcionario cumple dos años en prisión preventiva –detenido sin condena–, el plazo que establece la ley para esa condición. Pero la norma también permite prorrogar por un año la detención. Eso hizo el tribunal por el plazo de seis meses.
El rechazo de la excarcelación fue decidido por los jueces José Michilini y Ricardo Basílico, que entendieron que en el caso “se mantienen” los riesgos procesales para la causa que en 2017 señaló la Cámara Federal cuando ordenó la detención y el desafuero de De Vido que fueron su capacidad de influir en el expediente. Esos riesgos son el peligro de fuga y el entorpecimiento de la investigación, “lo cual atentaría contra el descubrimiento de la verdad”, señalaron los magistrados.
Los jueces tuvieron en cuenta que además De Vido tiene una condena de cinco años y ocho meses de prisión por la tragedia de Once y que el caso de Río Turbio es “un proceso sumamente complejo cuya instrucción demandó aproximadamente dos años, cuya presunta maniobra delictiva involucra a varios imputados”.
En disidencia, el juez Adrián Grünberg votó por la libertad de De Vido. El magistrado entendió que la causa ya no tiene riesgos procesales por el paso del tiempo que tuvo el expediente y porque ya fue elevada a juicio oral. “Cabe aventurarse que el juicio oral y público podría recién iniciarse en un tiempo superior al año, si no más, conforme lo indica la experiencia tribunalicia signada por una profusa sobrecarga de tareas”, señaló como otro argumento.
Antes de la resolución del tribunal había opinado el fiscal Miguel Ángel Osorio. En su dictamen, Osorio sostuvo que no veía riesgos procesales pero que no se iba a oponer si el tribunal prorrogaba la detención de De Vido. El fiscal hizo hincapié en la salud del ex funcionario y pidió que se le hagan estudios médicos para analizar una eventual prisión domiciliaria. Pero el tribunal no hizo mención de este punto en su resolución.
Ahora los abogados de De Vido, Maximiliano Rusconi y Gabriel Palmeiro, pueden apelar la decisión a la Cámara Federal de Casación Penal para insistir en la excarcelación.
En la causa de Río Turbio se analiza el desvío de fondos destinados a realizar obras en la mina de carbón de esa ciudad de Santa Cruz por al menos 264 millones de pesos. Ese expediente fue elevado a juicio oral el mes pasado por el juez federal Luis Rodríguez y junto con De Vido serán jzugados, entre otros, el ex funcionario de Planificación Federal Roberto Baratta.
El caso le tocó al Tribunal Oral Federal 1 pero sus jueces entendieron que debía pasar al Tribunal 7. Es el que tuvo el primer juicio de Río Turbio y en el que la semana pasada condenó al ex titular Unión Industrial Argentina (UIA) Juan Carlos Lascurain, al ex intendente de esa ciudad Atanacio Pérez Osuna y a otros tres acusados por el cobro de 50 millones de pesos por una ruta en esa localidad que nunca se hizo. Pero el Tribunal 7 también rechazó el caso. Ahora la Cámara de Casación debe resolver cuál de los dos se queda con la causa para hacer el juicio.
El de Río Turbio no es el único caso en el que De Vido tiene prisión preventiva. También está preso en la causa de los cuadernos de la corrupción.
A al ex funcionario De Vido le queda la chance de pedir la prisión domiciliaria a partir del 26 de diciembre próximo, cuando cumpla los 70 años. Ya había formulado un planteo en ese sentido este año por entender que ya “transitaba” esa edad y en base a sus problemas de salud, pero su defensa imprevistamente lo retiró.