El secretario de Derechos Humanos, Claudio Avruj, y la ex legisladora Graciela Fernández Meijide rechazaron este domingo el trabajo que, a pedido del juez federal Alejo Ramos Padilla, realizó la Comisión Provincial por la Memoria (CPM) acusando a varios periodistas de “espionaje ilegal” en el marco de la causa contra el falso abogado Marcelo D’Alessio.
Esta semana la CPM le entregó al juez federal de Dolores un nuevo informe sobre los documentos de inteligencia que obran en la “causa D’Alessio” y que aportan indicios sobre posibles vínculos con la Agencia Federal de Inteligencia (AFI).
Mediante un comunicado, la Comisión que preside Adolfo Pérez Esquivel dijo que “en esta etapa del trabajo de peritaje que viene haciendo el organismo provincial, el material probatorio consolida las investigaciones y procesamientos encarados por el juez, confirmando el funcionamiento de una red de espionaje ilegal utilizada para cometer delitos”.
Ante la consulta de Infobae, Fernández Meijide -quien integró la comisión que en los 80 investigó los crímenes de la última dictadura militar (Conadep)- opinó que a todos los involucrados les falta “sentido de la responsabilidad”. “Tanto al juez como a quienes se prestan a hacer este informe sin siquiera haber hablado con los periodistas”, agregó.
También se mostró sorprendida por el hecho de que un juez federal haya recurrido a un organismo de derechos humanos para evaluar artículos periodísticos: “Me pareció algo absolutamente irregular porque no se estaba dirigiendo a un organismo que pudiera ser auxiliar de justicia”.
Como ejemplo, señaló que cuando se van a analizar subjetividades como una enfermedad mental los jueces suelen llamar a un cuerpo de técnicos especialistas para que emitan un diagnóstico. “¿Cómo vas a llamar a una comisión cuyo trabajo es recoger la Memoria -que está ligada a la historia de los 70- para que analice un texto de hoy? ¿Por qué?”, reflexionó.
En esa línea, para la ex legisladora y referente de derechos humanos, en esta causa “se mezclan muy fuerte la Justicia y la política” y lo que se busca es que los periodistas ejerzan la “autocensura”.
“Algunos periodista van a decir: ‘Por qué me voy a preocupar por investigar si después voy a tener que enfrentarme con un juez’. Es una amenaza permanente para cualquier periodista”, afirmó.
Por otro lado, señaló que quien preside al CMP, Adolfo Pérez Esquivel, se merecía el premio Nobel de la Paz por haber sido secuestrado y por su trabajo en favor los derechos humanos durante los ‘70. Sin embargo, se preguntó “qué sabe de interpretación y qué aptitudes científicas o jurídicas tiene para interpretar una nota de un periodista”.
“Mediante la utilización de la información obtenida del espionaje ilegal, esta red desplegaba una serie de acciones que iban de la extorsión directa mediante el pedido de coimas o sobornos hasta el condicionamiento de testigos para sumar, a través de testimonios bajo la figura del imputado colaborador o arrepentido, información falsa en determinadas causas judiciales”, afirma el comunicado del organismo provincial.
Y uno de los puntos novedosos constata que las actividades de inteligencia de D’Alessio y otros ex agentes tenían entre sus objetivos principales influir en la opinión pública a través de los medios.
Fernández Meijide se negó a hacer comparaciones entre la Conadep y la CPM pero sí señaló que la primera “nunca emitió una palabra que condenara a nadie”. “Para poder poner en la lista de represores a un militar exigíamos por los menos tres testimonios de sobrevivientes. Y los testimonios eran firmados por el denunciante. Ni siquiera nos hacíamos cargo nosotros de la denuncia, se hacía cargo el denunciante. No emitíamos juicios”.
Al igual que la ex legisladora, el secretario de Derechos Humanos, Claudio Avruj, también salió hoy a repudiar el informe. “Los organismos de DDHH tienen misiones claras para las que fueron creados. Rechazo que se desvirtúen, y apelo a la defensa de la libertad de prensa y de la labor periodística como garantes de la democracia”, publicó en sus redes sociales.
Otro que se sumó a la polémica fue el diputado oficialista Waldo Wolff. “Lo más tragicómico de la Conadep de periodistas que está liderando Ramos Padilla con Pérez Esquivel como ejecutor es que es cubierta por pares que se creen que no les va a llegar. Peinense para la foto muchachos. Saludes”, criticó con ironía.
Consultada sobre los peligros de los avances contra la libertad de expresión, Fernández Meijide no dejó lugar a dudas: “Yo estoy convencida de que la mejor ley para la libertad de expresión es que no haya ninguna ley. Es un derecho y punto”.