Con la derrota de Anabel Fernández Sagasti, hasta ahora sólo dos distritos serían gobernados por mujeres en 2020

El contundente triunfo de Cambiemos en Mendoza sepultó las chances de que otra mujer se sume a lista de gobernadoras de la Argentina. Con la derrota de Anabel Fernández Sagasti, hasta ahora sólo Santa Cruz con Alicia Kirchner y Río Negro con Arabela Carreras serían los únicos distritos dirigidos por mujeres en 2020. Puede haber una tercera que se sume al cupo femenino y es María Eugenia Vidal, quien en busca de su reelección debe afrontar la utópica tarea de revertir los 18 puntos de ventaja que le sacó Axel Kicillof en las Primarias del 11 de agosto.

“La diferencia es irremontable, he llamado al próximo gobernador para felicitarlo”. Pasadas las 20 horas del domingo, Anabel Fernández Sagasti reconocía la derrota frente al candidato radical Rodolfo Suárez y confirmaba un duro golpe para el Frente de Todos, que depositó en la legisladora nacional el apoyo explícito, con visita incluida, de Alberto Fernández, Sergio Massa, Axel Kicillof y los gobernadores del PJ. “Me van a tener en el Senado de la Nación defendiendo los intereses de la provincia”, agregó Sagasti -la única candidata a gobernadora de La Cámpora en todo el país-.

La mendocina continuará con su rol legislativo, y en el caso de que el Frente de Todos confirme su triunfo en octubre, crecen sus chances para ser la elegida de Cristina Kirchner en la línea de sucesión de posibles vicepresidentes provisionales.

Envalentonada con el triunfo de Alberto Fernández sobre Mauricio Macri en las PASO del 11 de agosto, y nacionalizando la campaña dejando en evidencia la crisis social y económica que afronta la Argentina, la compañera de bancada de Cristina Kirchner se ilusionaba con dar el batacazo en Mendoza. Ante un escenario de elección polarizada, un sondeo de opinión de Analogías proyectó comicios parejos con una leve ventaja en favor de Suárez alcanzando el 36,4% frente al 32,9% de Sagasti. Finalmente el candidato de Alfredo Cornejo obtuvo el 49,8% de los votos, mientras que la del Frente de Todos, 34,97%.

Hubo un tiempo no muy lejano en el que de los 24 distritos electorales, cinco eran gobernados por mujeres. En 2017, mientras se enriquecía el debate por la paridad de género en los cargos políticos y en el armado de las listas, María Eugenia Vidal (Buenos Aires), Lucía Corpacci (Catamarca), Alicia Kirchner (Santa Cruz), Rosana Bertone (Tierra del Fuego), y Claudia Ledesma Abdala (Santiago del Estero) conducían sus provincias en simultáneo.

Debido a la legislación de Santiago del Estero, la gestión de Abdala culminó el 10 de diciembre de 2017, desarmando el grupo de las cinco mandatarias. Mientras ella se desempeña actualmente como diputada nacional, su esposo Gerardo Zamora quedó a cargo de la conducción de la provincia.

De las cuatro que gobiernan en este 2019, solo Alicia Kirchner logró ser reelecta y continuará al frente de Santa Cruz hasta el 2023. Sin sobresaltos, se impuso por casi 32 puntos: 62 a 28% del candidato de Cambiemos Eduardo Costa. Con la derrota de Fernández Sagasti, las chances de que una mujer logre la conducción de otra provincia se limitan al utópico panorama que enfrenta María Eugenia Vidal quien tiene la misión de revertir los 18 puntos de ventaja que le sacó Axel Kicillof en las PASO. En el resto de los distritos que faltan definir los cargos (Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Chaco, Salta, Catamarca y La Rioja) ni si quiera hay mujeres con posibilidades concretas.

En Catamarca, pese a que no hay límites a las reelecciones, Lucía Corpacci se corrió del centro de la escena y decidió no ir por su tercer mandato. Decidió cederle la candidatura al intendente de San Fernando del Valle,Raúl Jalil, y ser ella quien encabece la lista de diputados nacionales por el peronismo poniéndole fin a sus ocho años de gestión. Con Jalil encaminándose a ser electo, el resto de los partidos: Juntos por el Cambio, Consenso Federal, el Gen y el Frente de Izquierda y de los Trabajadores, no presentan candidatas a la gobernación.

En Tierra del Fuego, un resultado inesperado y alejado de todas las previsiones, decretó la derrota de la peronista Rosana Bertone en manos del radical kirchnerista Gustavo Melella. Con el 51% de los votos, el intendente de Río Grande derrotó a la mandataria provincial por 12 puntos de ventaja. Si bien ambas listas apoyaban a nivel nacional al Frente de Todos, fue la primera vez que un gobernador fueguino que busca su reelección pierde en primera vuelta.

Sin Corpacci, ni Bertone, y con Vidal comprometida, Kirchner revalidó su gestión por cuatro años más pero no será la única mujer gobernadora. Ya que Arabela Carreras fue electa en Río Negro el pasado mes de abril y se convirtió en la primera mandataria mujer de la provincia. Respaldada por el actual gobernador Alberto Weretilnek, a quien la Corte Suprema le impidió ir por la reelección, Carreras se impuso por amplia diferencia al candidato peronista Martín Soria y a Lorena Matzen de Cambiemos. “No hubiéramos llegado hasta acá sin el apoyo de peronistas, radicales y algunos kirchneristas”, evaluó la referente de la fuerza provincial tras ser electa.

De las elecciones provinciales que restan definir, solo Salta presenta precandidatas mujeres para la gobernación. El próximo 6 de octubre, tres mujeres buscarán sortear las Primarias para convertirse en candidatas de cara a las Generales salteñas del 10 de noviembre. Andrea Villegas y Violeta Gil competirán en la interna por el FIT, mientras que en el frente Todos Tenemos Futuro, Elia Fernández, que apoya a Alberto Fernández y Cristina Kirchner, jugará por fuera de la interna del Frente de Todos.

Pese a la efervescencia del feminismo y al respeto de la paridad de género en el armado de listas legislativas, este 2019 significó un retroceso para la mujer en términos de conducción política de las provincias. Mientras que dos años atrás gobernaban casi un cuarto de los 24 distritos, de acá al 2023 solo dos tienen garantizadas la conducción de sus territorios.

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