Hay vida después del 11 de agosto. La victoria de Alberto Fernández ante el presidente Mauricio Macri en las PASO reconfiguró por completo los objetivos de cada espacio político: mientras que el Frente de Todos buscará ampliar la diferencia de casi 16 puntos sobre su principal contrincante, el oficialismo sueña con una remontada "histórica" que los ubique en ballotage en noviembre.
Sin embargo, no todo se reduce a quién ocupará Balcarce 50 y la composición de mayorías y minorías en el Congreso. Las elecciones continúan en todo el país y aún quedan varias votaciones provinciales pendientes.
En los distritos con mayor peso político, la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal y el jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta tienen por delante la carrera hacia la reelección, aunque sus posibilidades de retener sus respectivos terruños son radicalmente opuestas.
Por un lado, la derrota virtual de Vidal asestada por el diputado y candidato a gobernador del Frente de Todos, Axel Kicillof, se vive puertas adentro de La Plata como prácticamente irreversible. El ex ministro superó el 52,5% de los votos y ese vendaval impactó en la mayoría de los municipios en los que se impuso Cambiemos en 2015. Apenas un puñado de localidades e intendentes alineados con el macrismo tienen una expectativa real de renovar mandato. Se espera que el resto vuelva a manos del peronismo.
En la Ciudad, Rodríguez Larreta es el favorito y solo necesita repetir el resultado de las PASO para evitar la segunda vuelta. Su 45,92% obtenido por sobre Matías Lammens-que consiguió el 31,36%- hubiera equivalido al 50,67 por ciento si ese hubiese sido el resultado en las elecciones generales. Es que en octubre solo se cuentan los votos afirmativos, por lo que no se consideran los blancos y nulos. Lammens, en su primera elección, espera un milagro para llegar a noviembre.
29 de septiembre: Mendoza, con resultado abierto
Mendoza, la quinta provincia con mayor cantidad de electores, definirá el 29 de septiembre al sucesor del gobernador radical Alfredo Cornejo, imposibilitado legalmente para renovar su mandato. El 9 de junio pasado, en las primarias mendocinas, la alianza Juntos por el Cambio juntó el 42,89% de los votos y consiguió la mayor cantidad de votos. La oposición peronista, con el Frente Político y Social Elegí (PJ), obtuvo el 35,64 por ciento entre sus distintas listas.
Sin embargo, esos resultados quedaron en paréntesis con el "terremoto político" de las PASO de agosto.
Por el lado de Juntos por el Cambio, el candidato Rodolfo Suárez, que logró imponerse en las primarias locales a su rival Omar de Marchi, tiene el desafío de retener una de las dos gobernaciones en manos de la UCR. Pero la candidata de La Cámpora, Anabel Fernández Sagasti, llegará a los comicios de septiembre con renovadas expectativas luego de ganarle en la interna al intendente de Maipú, Alejandro Bermejo.
Si bien en junio el desdoblamiento benefició al radicalismo, los efectos que producirá en los votantes de Mendoza el "tsunami" electoral que produjo Alberto Fernández es una incógnita. En las PASO de agosto, el ex jefe de Gabinete kirchnerista consiguió una leve diferencia en su favor, al imponerse con el 40,45% de los votos sobre el 37,35% obtenido por Mauricio Macri y Miguel Ángel Pichetto.
6 de octubre: Salta, la elección de las sorpresas
Juan Manuel Urtubey, el candidato a vicepresidente de Roberto Lavagna en Consenso Federal, mira de cerca si su legado como gobernador tendrá vida en Salta más allá de su mandato. De manera tardía en comparación con el resto, la provincia recién tendrá sus primarias el 6 de octubre.
El dato de la elección es que el sector de Urtubey -quien dio "libertad de acción" y se abstuvo públicamente de intervenir en las alianzas- competirá en una interna unitaria con el kirchnerismo, con dos listas para la gobernación en el marco del Frente de Todos. Serán la del diputado nacional Sergio "Oso" Leavy, que cuenta con el apoyo oficial de la fórmula de Alberto Fernández y Cristina Kirchner, y la boleta del actual vicegobernador, Miguel Isa, que forma parte del riñón político de Urtubey.
Lo cierto es que la conformación de las primarias en el PJ fueron conflictivas y sin consenso. Desde un primer momento, el sector de Leavy rechazó compartir una alianza con Miguel Isa. Sin embargo, el vicegobernador resistió y, tras varias recursos judiciales, logró que el Tribunal Electoral de Salta ordene la habilitación su lista en el Frente de Todos por ser parte del PJ.
La jugada puede entenderse tras los resultados del 11 de agosto. Si bien en las primarias presidenciales se olfateaba una victoria del peronismo -Alberto Fernandez obtuvo el 48 por ciento-, sorprendió que el dueño de casa, Consenso Federal, quedara tercero con el 18% de los votos. Estuvo apenas por detrás de Juntos por el Cambio, que logró 20 por ciento.
Además, habrá otras seis listas que se presentaron para las primarias salteñas. En el frente Gustavo Sáenz Gobernador se lanzó la postulación del homónimo intendente capitalino, quien fue candidato a vicepresidente de Sergio Massa en 2015. Aunque Sáenz tiene al PRO dentro de su frente, el sello electoral del jefe comunal evitó todo tipo de referencia partidaria que lo vincule a su aliado Mauricio Macri.
Pero hay más sorpresas en Salta. La más resonante es la del Frente Olmedo Gobernador. El diputado derechista, que apoya iniciativas como la pena de muerte, la castración a violadores y servicio militar obligatorio, obtuvo el apoyo de la UCR y de partidos locales para ir en una misma fórmula junto al radical Miguel Nanni. Tras un intenso año de discursos contra la legalización del aborto, Alfredo Olmedo adquirió este año un plafón político que le permita seriamente disputar la gobernación.
El tercer dato resonante es la interna en el Frente de la Izquierda, que por primera vez competirá con tres listas diferentes en una misma PASO. El trotskismo se convirtió en una fuerza mayoritaria en 2013, cuando obtuvo 18% de los votos provinciales y el 30% en Capital, un fenómeno "histórico" que se desinfló con el correr de los años. En agosto,
La división del FIT responde a la ampliación de la coalición y a la ruptura en el Partido Obrero que tuvo como protagonista a Jorge Altamira. En el armado se presentaron tres listas a gobernador: la que impulsa a Pablo López (PO+PTS), la de Violeta Gil , y la de Andrea Villegas (MST).
13 de octubre: Chaco, en horas definitorias
Como en la mayor parte del norte argentino, en Chaco está todo garantizado para que el peronismo siga gobernando. El intendente de Resistencia, Jorge Capitanich, y el gobernador Domingo Peppo estaban sumergidos en una pelea intestina por el gobierno provincial y el sello del PJ. Pero la larga pulseada finalizó en un acuerdo beneficioso para las dos partes sobre el filo del cierre de listas, que tenía como fecha límite este sábado.
El ex jefe de Gabinete llevaba ventaja en la interna local. El 11 de agosto, la lista de "Coqui" venció en las PASO por una holgada diferencia de 20 puntos contra la de Peppo, que se presentó con boleta corta, en la categoría a senadores. Eran dos papeletas testimoniales: una reaseguro ante la disputa principal por el gobierno local.
El triunfo del Frente "Chaqueño", que impulsa a Capitanich y que contaba con el apoyo de Cristina Kirchner, fue un golpe de knock out para la lista "Chaco Avanza" que apadrina Peppo. El mandatario se encaminaba a una derrota prácticamente segura.
En ese marco, y con ya con la chance palpable de transformarse en presidente, Alberto Fernández habló a solas con el actual gobernador y le pidió que dé un paso al costado en la contienda, en pos de la unidad del peronismo. A cambio, le prometió que en su futuro gobierno le daría como destino la embajada argentina en Asunción, en Paraguay, según pudo confirmar Infobae. Era una oferta que no podía rechazar.
"Yo tengo las fuerzas y las ganas fuertes y firmes de competir, pero también hay que tener los pies sobre la tierra", decía esta semana Peppo sobre la baja de su candidatura, hoy confirmada. De esa manera, quedó allanado el camino para la vuelta de Capitanich a la cumbre del poder chaqueño, tras sus dos mandatos como gobernador en 2007 y 2011.
Si nada cambia en las próximas horas, habrá otras dos listas peronistas junto a la de "Coqui": las del ex vicegobernador de Capitanich, Juan Carlos Bacileff Ivanoff, y del senador nacional Eduardo Aguilar. Pero todo indica que no serán problema para que el ex jefe de Gabinete haga pesar todo el poder del PJ y vuelva a imponerse.
En Chaco, los aliados de Mauricio Macri tienen pocas expectativas. Sin el sello de Juntos por el Cambio, el candidato a gobernador Carim Peche se presenta con la alianza "Chaco Somos Todos", que encabeza la UCR con la adhesión del PRO, Bases y Principios y FE.
27 de octubre: Catamarca, la sucesión "voluntaria"
Es poco habitual que los gobernadores no busquen renovar su mandato cuando tienen todas las posibilidades de ganar. La excepción ocurrió se produjo este año en Catamarca. Lucía Corpacci, la actual mandataria, declinó en sus aspiraciones reeleccionistas y abrió el juego interno del peronismo, que designó como candidato al intendente de San Fernando del Valle, Raúl Jalil, un dirigente que estuvo cercano a Sergio Massa.
La provincia no desdobló los comicios y las elecciones a gobernador se producirán el 27 de octubre, junto a las presidenciales. En las primarias de agosto, el Frente de Todos se impuso con una victoria abultada por sobre Juntos por el Cambio.
En la votación, prácticamente no hubo diferencias entre la competencia nacional y por la gobernación: la fuerza que respalda a Alberto Fernández y al candidato Jalil superaron el 57%, en una distancia de casi 30 puntos con Roberto Gómez, de la UCR, cuya fórmula logró el 25 por ciento. En tanto, las otras cuatro agrupaciones que participaron de la disputa se ubicaron por debajo de los 5 puntos.
Catamarca es una de las provincias más pequeñas del país, con alrededor de 320 mil votantes y representa el 1% del padrón nacional. Suele estar presente en el debate nacional por su atractivo para las inversiones mineras en torno al oro, el cobre y el litio.
Por estos días, el "casi" gobernador Jalil está embarcado junto a otros mandatarios peronistas en cuestionar las medidas económicas de alivio decretadas por Mauricio Macri. "Generarán una pérdida de 80 millones de pesos", anticiparon desde la municipalidad de San Fernando del Valle.
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