La dura derrota del domingo en las PASO abrió una dura interna en el Gobierno y generó una reacción inquietante de los mercados: en las primeras horas del día, las acciones argentinas se desplomaban hasta el 20% en el premarket de la Bolsa de Nueva York.
En ese contexto, el presidente Mauricio Macri convocó a su Jefe de Gabinete, Marcos Peña, y a los principales referentes de su equipo económico para trazar los pasos a seguir en los próximos días.
Parece mentira que sólo hace tres días, la Bolsa argentina había subido un 7,8% y que el Riesgo País había caído un 3,7% hasta llegar a los 861 puntos básicos. Es que la derrota por casi 15 puntos de Mauricio Macri frente a Alberto Fernández no hizo más que sepultar los datos de la encuesta en la que se habían apoyado los mercados internacionales el último viernes.
Al margen de las posibilidades de recuperación de cara a las elecciones de octubre, el Gobierno y Macri aún tienen la responsabilidad de asegurar la gobernabilidad en el país durante los próximos cuatro meses.
Ante el comienzo de las operaciones del dólar y las aperturas en Wall Street y en la Bolsa local, el panorama económico se aproxima como un desafío muy complicado para el oficialismo.
Al menos hasta las 9 de la mañana de hoy, las acciones de las empresas argentinas se desplomaban cerca del 25% en premarket de la Bolsa de Nueva York, con algunas acciones —como las del Banco Galicia— cayendo más del 35%. Mientras que los bonos del Gobierno argentino, por su parte, comenzaron a precipitarse en las primeras cotizaciones europeas: el bono argentino con vencimiento en 2028, denominado en euros, bajó casi 9 centavos en el comercio europeo, según mostraron los datos de Tradeweb.
De tal manera, Macri decidió realizar una reunión a primera hora en la Casa Rosada junto a los principales actores del gabinete económico. En el encuentro estuvieron presentes el Jefe de Gabinete, Marcos Peña, el presidente del Banco Central, Guido Sandleris, y el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne.
A las 10, Sandleris y Dujovne dejaron la Casa de Gobierno y se fueron a sus oficinas del Banco Central y del Ministerio de Hacienda, respectivamente.
Durante toda la jornada del domingo electoral, el propio presidente hizo referencia a la actuación de los mercados. Por la mañana, cuando acudió a la escuela Wenceslao Ponce para votar, se afianzó en el presunto apoyo de los mercados a su gestión: "Los mercados esperan que los argentinos sigamos en el mismo camino. Es obvio. El mundo espera esto", dijo.
Sin embargo, ya con la imponente derrota en las urnas consumada, el mandatario habló en conferencia de prensa dentro del búnker de Juntos por el Cambio y hasta trasladó parte de la responsabilidad a su rival en los comicios respecto al futuro económico del país: "Dependerá de todos, sobre todo de quienes han recibido el respaldo popular. Yo haré mi parte", aseguró.
La agenda del presidente continuará a lo largo del día con otro compromiso delicado. Se espera que cerca de las 15.30 protagonice una reunión con todo el gabinete, también en la Casa de Gobierno. Aún no se descartó la posibilidad de la salida de alguno de los ministros, aunque se cree que el equipo de Gobierno se mantendrá intacto al menos durante los primeros días de la semana.
SEGUÍ LEYENDO:
Mauricio Macri reconoció la derrota: "Me duele no haber tenido el apoyo que esperábamos"