Otro imprevisto volvió a complicar a José Luis Espert en su campaña electoral. Mariquita Delvecchio, bajó su candidatura a jefa de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires por el Frente Despertar porque, según argumentó, su postulación es incompatible con su trabajo.
A través de su cuenta de las redes sociales, Delvecchio anunció que no podrá ser precandidata aunque mantendrá su apoyo a Espert: "Es la única solución para la Argentina", escribió.
"Estimados, me veo en la obligación de comunicarles que no podré ser precandidata a Jefa de Gobierno en esta oportunidad; razones legales de incompatibilidad con mis funciones laborales lo impiden. Esto se estudió en estos días y quedó confirmado", publicó.
Pese a que da de baja su precandidatura, Delvecchio manifestó que seguirá apoyando al economista: "Apoyo e insto a votar Espert lista completa. Es la única solución para la Argentina". Además, agregó que seguirá militando en el Frente Despertar: "Liberalismo o profundización de la miseria. Nos vemos en el acto de Ferro", expresó en relación al evento donde Espert lanzará su candidatura el próximo 14 de julio.
La situación de la baja de la precandidata a Jefa de Gobierno por el Frente Despertar sumó un nuevo inconveniente a la carrera electoral de Espert. El economista acusó al gobierno nacional de querer anular su postulación ya que al momento del cierre de listas se quedó virtualmente sin partido debido a que Alberto Asseff, líder de UNIR -sello que sostenía su candidatura-, se pasó al oficialismo para competir como diputado nacional.
A los pocos días consiguió mantenerse como candidato gracias al apoyo del partido UNITE, pero volvió a sufrir un traspié cuando Gabriel Molina lo impugnó argumentando haber presentado su candidatura presidencial por ese espacio antes que el economista.
Finalmente la jueza con competencia electoral María Romilda Servini rechazó la impugnación y se confirmó la participación de Espert en las Primarias del próximo 11 de agosto.
"Al Gobierno le salió todo mal: se quedaron con el clavo de Asseff y no me pudieron bajar", manifestó con bronca y denunció que "el intento de bajar mi candidatura fue una cosa orquestada de bien arriba del Gobierno. Ahí estuvieron involucrados seguramente Macri y Pichetto que, sin ninguna duda, puso la cara directamente cuando apareció en una foto con Asseff. Esto de la campaña sucia con este videíto de morondanga tratando de ensuciarme es muy del estilo del dúo Durán Barba y Marcos Peña".
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