Roberto Lavagna y Juan Manuel Urtubey presentaron el frente electoral Consenso Federal junto a sus dos principales socios: Miguel Lifschitz y Margarita Stolbizer. Fue una puesta en escena para dejar en claro que la identidad del espacio está confeccionada por fuerzas políticas de diferentes origines. Diversidad y convergencia de ideas para tratar de armar una propuesta que supere a los partidos únicos.
No hubo confirmación de candidaturas ni señales concretas sobre quiénes serán los nombres propios que compongan las fórmulas para la provincia de Buenos Aires y CABA. El ex ministro solo aclaró que los equipos de campaña están trabajando en el armado de las listas en todas las ciudades bonaerenses y monitoreando el armado en las distintas provincias del país.
A pocos días de que se cierren las listas, el preferido para ocupar la candidatura a gobernador es Eduardo "Bali" Bucca. El ex intendente de Bolívar cuenta con el aval de todos los sectores de la coalición. Lo que resta acordar para dar por ocupado ese puesto es la conformación de lista de legisladores bonaerenses. El bolivarense quiere tener participación en el armado y que algún dirigente de su confianza ocupe los primeros escaños.
La negociación seguirá en las próximas horas, pero no aparecen escollos importantes que puedan poner en riesgo la designación. En el esquema federal esperan tener resuelta la fórmula para el viernes y anunciar la candidatura con antelación a la hora límite impuesto por la justicia electoral. El sábado a la medianoche se acabará el tiempo para presentar todas las listas con candidatos.
El otro lugar que aún no tiene nombre es la primera candidatura a diputado nacional por la provincia de Buenos Aires. La única certeza es que será una mujer quien encabece la lista. La puja se presenta en Graciela Camaño y Margarita Stolbizer.
Camaño se incorporó al espacio después de que Sergio Massa cerró una alianza con el kirchnerismo y decidió sellar la unidad. Cuando Lavagna y Urtubey parecían tomar caminos distintos, fue la legisladora la que intercedió como mediadora y logró que ambos negocien una fórmula común. Fue clave para que la tercera vía sobreviva y no se disperse.
La fórmula presidencial respalda la postulación de Camaño, quien además tiene el apoyo de su esposo, Luis Barrionuevo, uno de los dirigentes sindicales más importantes que tiene la fuerza política. La diputada termina su mandato en diciembre y apostaría a renovar su banca. Su nombre tiene el sello del peronismo y el respaldo de la historia. Es una dirigente conocida en territorio bonaerense.
Si Camaño todavía no tiene asegurado ese lugar es porque el ala más progresista del espacio, conformada por el socialismo y el GEN, impulsan la candidatura de Margarita Stolbizer. El gobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz, es el principal promotor de la postulación de la ex legisladora y el que presiona internamente para que la cabeza de la boleta lleve su nombre.
En el progresismo consideran que la candidatura de Stolbizer en el primer lugar le brindaría mayor equilibrio a la fuerza y evitaría que la identidad quede atada al peronismo, espacio que ya tiene presencia en la dupla presidencial y, a priori, en la fórmula bonaerense.
Las conversaciones seguirán durante todo el jueves y el viernes. Quieren que prime el consenso y que nadie quede herido en las negociaciones de último momento. Saben que es un espacio en pleno crecimiento que debe evitar tensiones internas antes de arrancar la campaña electoral y unificar el discurso para los electores.
En la ciudad de Buenos Aires la situación está casi resuelta. El candidato a jefe de Gobierno porteño será Matías Tombolini. Mientras que Marco Lavagna encabezará la lista de diputados nacionales por el territorio porteño. Solo resta la confirmación oficial.
Queda poco tiempo. Mientras tanto, en las oficinas Lavagna, utilizada como búnker de campaña, avanzan en el armado de todos los distritos. Corren contra el reloj electoral. Están en tiempo de descuento.
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