El Gobierno integró una mesa espejo a la que conformó la Unión Cívica Radical para negociar la ampliación de Cambiemos y compartir la estrategia electoral para las elecciones presidenciales. Y los radicales ya pueden decir que obtuvieron su primer logro: Mauricio Macri está dispuesto a abrir la fórmula presidencial y discutir con ellos quién es el mejor candidato a vicepresidente, según confirmó a Infobae un vocero oficial que conoce la trama secreta de la negociación entre los socios principales de Cambiemos.
De este modo, los dos principales partidos de la coalición empezarán a mantener contactos diarios, donde también se incorporará la Coalición Cívica, ya que los tiempos apremian y el próximo miércoles 12 de junio hay que inscribir a las fuerzas que constituirán las alianzas.
El trabajo negociador empezará el lunes 10 de junio, una vez concluidas las PASO en Mendoza y la elección a gobernador en Jujuy, que se realizarán el domingo 9. Para la inscripción de los candidatos hay tiempo hasta el sábado 22 de junio a las 23:59.
El jefe de Gabinete, Marcos Peña, el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, el presidente del PRO, Humberto Schiavoni, y el secretario general del partido, Francisco Quintana, encabezan las negociaciones por el macrismo. Por su parte, los radicales votaron la Comisión de Acción Política (CAP) en la convención nacional, que estará integrada por Ernesto Sanz, Emiliano Yacobbiti y Alejandra Lorden, además del presidente del partido y gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo.
Otros funcionarios que podrían sumarse son el secretario general de la Presidencia, Fernando De Andreis, y el viceministro del Interior, Sebastián García de Luca. Sobre todo si se incorpora en los diálogos la mano derecha de Cornejo en los asuntos políticos: Andrés "Peti" Lombardi.
También estarían dispuestos a colaborar la gobernadora María Eugenia Vidal y el jefe de Gobierno de la Ciudad Horacio Rodríguez Larreta, en caso de que los gobernadores de Jujuy y Corrientes, Gerardo Morales y Gustavo Valdés, aporten en los encuentros.
Más volumen a Cambiemos
Pero ahora el foco estará en el esfuerzo de incluir alguna otra fuerza a Cambiemos para el 12 de junio, algo que para la mayoría es imposible, pero que una parte del radicalismo sigue intentando. Ayer, en la jornada que realizó el Colegio de Abogados de la Ciudad de Buenos Aires, Sanz reconoció que esa ampliación ya era inviable para competir electoralmente, pero expresó su confianza de que pudiera concretarse un compromiso "amplio con todas las fuerzas democráticas argentinas" entre la primera y la segunda vuelta.
Además de involucrarse en la estrategia, los radicales esperan que, tal como se comprometió el jefe de Gabinete ayer en la reunión que mantuvieron en su despacho de la Casa Rosada, sea designado un candidato de sus filas para la vicepresidencia.
El Presidente evaluó seriamente la posibilidad de que sea Martín Lousteau, aunque él no estaría interesado. Macri también está abierto a otras posibilidades, y a conversarlo con los radicales, quienes, por otra parte, no descartan que el vice pueda provenir de otras filas políticas que no sean las de la UCR.
En el Gobierno esperan consolidar un vínculo desgastado por cuatro años de coalición nueva y a medio hacer, con partidos de culturas e historias muy distintas, y con dirigentes tensionados por un futuro electoral incierto. Para acercar posiciones, desde Entre Ríos, adonde viajó para respaldar las candidaturas de Atilio Benedetti para luego viajar a acompañar José Corral a Santa Fe, Frigerio dijo: "Aún no decidimos la vicepresidencia, tenemos tiempo hasta el 22, pero lo vamos a hacer con la decisión fundamental del Presidente y en debate dentro de nuestro espacio, Cambiemos".
Si Macri midiera bien en las encuestas y el Gobierno fuera valorado positivamente por la población, la discusión sería obviamente más sencilla. Ayer, por lo que trascendió, el jefe de Gabinete leyó algunas de las últimas encuestas que llegaron a su despacho, donde se muestra al Presidente reposicionándose frente al kirchnerismo y ganando el balotaje frente a la fórmula Férnández-Fernández, aunque por un porcentaje que está dentro del margen de error.
SEGUÍ LEYENDO: