Su formación probablemente lo haya ayudado a ser concreto en la presentación. El teniente general Claudio Pasqualini, jefe del Estado Mayor del Ejército desde febrero del año pasado, disertó ante el Rotary Club donde habló de varios temas clave: el rol de la mujer en las Fuerzas Armadas, Malvinas, la presencia del Ejército en el norte argentino para prevenir delitos como el narcotráfico y la reestructuración de la fuerza a su cargo y el ciberdelito.
De a una, con breves explicaciones, Pasqualini desarrolló la visión y misión actuales del Ejército. Al presentarlo, el secretario del club Buenos Aires, Juan Javier Negri, recordó que hubo dos ex presidentes que fueron militares y socios del Rotary y que llegaron a presidentes por distintas vías. No dio sus nombres pero hacía referencia a Agustín P. Justo (1932-1938) y a José Uriburu (1930-1932), que lideró un golpe contra Hipólito Yrigoyen.
"Las mujeres tienen posibilidad de ingresar a la fuerza y cumplir cualquier rol que ellas quieran cumplir", destacó el general que describió cómo en las áreas que requieren más preparación física están integradas, como la Caballería, por ejemplo. "Cumplen todos los roles, no hay ninguna limitación hacia las mujeres para cumplir misiones de combate", continuó, mientras que al bajarse del estrado, y después de haber tocado el tema del conflicto bélico en el Sur, hubo quienes comentaron sobre las mujeres que fueron a las islas en 1982.
Entre las preguntas de los rotarios que cada miércoles asisten al almuerzo semanal y escuchan a los disertantes de "Hacer por la Argentina", despertó gran interés la guerra de Malvinas. Clara Mariño le consultó sobre cómo ven los argentinos a quienes pelearon en 1982 y él respondió: "El Ejército siente que el país ha reconocido el valor de quienes pelearon en Malvinas, vengo percibiendo como argentino y no sólo como militar que año a año hay un mayor reconocimiento hacia los combatientes de Malvinas, especialmente en los últimos años". Y agregó que está convencido de que ese reconocimiento va a seguir creciendo: "No lo tuvieron cuando volvieron de las islas, pero venimos perfeccionando ese reconocimiento. Va a seguir aumentando y va llegar a un mayor reconocimiento".
Por ser de generaciones en las que existía el servicio militar obligatorio, algunos de los presentes quisieron saber qué opina el teniente general Pasqualini, si lo pondría en marcha nuevamente. "Es un tema de decisión política así como fue una decisión política el cierre", consideró.
Optimista, Pasqualini también evaluó en forma positiva el vínculo entre las Fuerzas Armadas y la sociedad, destacó el rol en misiones de paz en el exterior y describió cómo actualmente se trabaja en la reestructuración. Contó que se tuvo que "desburocratizar" al Ejército y para hacerlo "más efectivo" y "optimizar los medios y recursos". Habló de que el proceso de reconversión continúa y pronosticó la finalización del mismo para fin de año. La segunda etapa, adelantó, será la "renovación del equipamiento y reubicación de algunos elementos" sobre lo que no abundó en detalles ya que se está estudiando cómo hacerlo.
Respecto a los nuevos tiempos, reveló que se quiere "prestar especial atención al dominio cibernético" y que la mayor parte de los ejércitos generan elementos para operar en ese dominio, especialmente en el área de defensa".