Hoy por la mañana Ricardo Jaime comenzará a ser juzgado por el delito de enriquecimiento ilícito. La investigación por el crecimiento patrimonial de quien fuera secretario de Transporte de Néstor y Cristina Kirchner comenzó el 28 de julio de 2008.
Desde aquella denuncia sucedieron muchas cosas desde el punto de vista judicial que engrosaron el "prontuario" del primer ex funcionario kirchnerista que admitió haber cobrado coimas por parte de empresarios a los que debía controlar.
En 2009, Jaime fue invitado a dejar el gobierno luego de que el kirchnerismo fuera derrotado en las elecciones y de que se conociera que usaba un avión de cuatro millones de dólares como si fuera propio.
En abril de 2010, cuando Néstor Kirchner vivía y el gobierno de CFK acumulaba un enorme poder, Jaime fue procesado por el juez Claudio Bonadio. El procesamiento fue por el delito de recepción de dádivas porque el empresario Claudio Cirigliano, a quien debía controlar, le pagaba viajes en taxis aéreos. Un caso de corrupción claro: el empresario que tenía concesiones ferroviarias y explotaba líneas de colectivos bajo la supervisión de Jaime, solventaba los viajes de placer en aviones privados del secretario de Estado.
En diciembre de 2010 fue el ex juez Norberto Oyarbide quien procesó a Jaime por el mismo delito pero el dinero provenía de otro empresario. Néstor Otero, dueño de la Terminal de Ómnibus de Retiro, pagaba todos los meses el alquiler del departamento donde vivía el funcionario que debía supervisar que la empresa cumpliera cabalmente con el servicio concesionado. Otro caso de corrupción claro.
En junio de 2011 el fiscal Carlos Rívolo que investigó el patrimonio de Jaime pidió la indagatoria del ex funcionario por el delito de enriquecimiento ilícito. Para el fiscal, Jaime no había podido justificar el modo en que él y sus testaferros consiguieron acumular bienes.
En 2012 fue uno de los ex funcionarios citados a indagatoria y procesados por su responsabilidad en la Tragedia de Once, un caso de corrupción seguida de muerte.
En septiembre de 2013 el Tribunal Oral Federal 2 de Córdoba condenó a Jaime por el robo de pruebas en un allanamiento realizado en 2010 en la causa por enriquecimiento ilícito.
En abril de 2014 el juez Sebastián Casanello procesó a Jaime por el delito de enriquecimiento ilícito. La investigación que había hecho el fiscal Rívolo determinó que el ex funcionario no pudo demostrar el aumento de su patrimonio –realizado a través de testaferros- por una cifra cercana a los 12 millones de pesos.
En octubre de 2015, unos días antes de las elecciones presidenciales, Jaime aceptó que había cobrado coimas por parte de Cirigliano y Otero y pactó una pena para evitar ir a juicio. De esa manera se convirtió en el primer kirchnerista confeso y condenado por recibir coimas.
En abril de 2016 fue detenido por orden del juez Julián Ercolini, quien tenía a su cargo la investigación de la millonaria compra de trenes chatarra que Jaime realizó en España y Portugal. Desde entonces pasa sus días en la cárcel de Ezeiza.
En abril de 2017, llegó a la Argentina procedente de Uruguay el yate modelo Altamar 64, valuado en un millón de dólares que, según la investigación judicial por el enriquecimiento de Jaime, pertenecía al ex secretario de Transporte.
En octubre de 2018, la Cámara de Casación confirmó que debe pasar ocho años en la cárcel al confirmar la condena a prisión efectiva que le había impuesto el Tribunal Oral que juzgó a los responsables por la Tragedia de Once. El año pasado Jaime también fue señalado por empresarios que se arrepintieron en el Caso Cuadernos como receptor de coimas en efectivo mientras fue secretario de Transporte. Pero a diferencia de lo que había admitido en 2015, en esa ocasión Jaime negó haber recibido estas coimas.
Además de Jaime, irán a juicio por enriquecimiento ilícito otras 17 personas consideradas por la justicia como testaferros ya que intervinieron en operaciones realizadas con dinero que el ex funcionario obtuvo de manera ilegal.
Se sentarán en el banquillo de los acusados del Tribunal Oral Federal 6 Julieta Jaime, una de las hijas del ex funcionario. Está acusado uno de los hermanos del ex secretario de Transporte, Daniel Jaime. También Silvia Reyss, quien fuera la pareja de Jaime durante los años de furiosa recaudación de dinero ilegal. Las dos hijas que tuvo Reyss en su primer matrimonio, Agostina y Lorena Jayo. Sebastián Ledantes, ex esposo de Julieta Jaime, será enjuiciado junto a sus padres Norberto Ledantes y Graciela Vigna.
Manuel Vázquez, hacedor de negocios oscuros para Jaime en la secretaría de Transporte -y procesado en varias causas judiciales por ello-, está entre los acusados al igual que su hijo Julián Vázquez. El prestanombres que usó Vázquez para facturar falsas consultorías a cambio de coimas Ignacio Julián Soba Rojo es otro de los imputados.
Dos integrantes de la estructura de negocios que responde a Otero también serán juzgados porque contribuyeron al enriquecimiento de Jaime: Alfredo Pielach y Lisandro López. Están vinculados a la compra de un hotel que explotaba la familia Jaime en Carlos Paz, Córdoba.
Carlos Lluch y Raúl Viola, que pertenecían al conglomerado empresario de Cirigliano, también serán enjuiciados. Se los relaciona con la compra del yate de Jaime.
Por la operación de compra de un departamento sobre la avenida Figueroa Alcorta deberán responder como testaferros Silvano del Carmen Mazzucchelli y Hugo Daniel Álvarez Picasso.
El juicio por enriquecimiento ilícito estuvo a punto de ser suspendido porque Jaime había llegado a un acuerdo con la fiscal Gabriela Baigún: el ex funcionario admitía el delito y pagaba una millonaria multa a cambio de no ser enjuiciado. Pero los jueces José María Martínez Sobrino, Fernando Canero y Julio Panelo no aceptaron el acuerdo y Jaime y sus testaferros tendrán que someterse a juicio.
El mismo Tribunal Oral decidió que comiencen juntos otros dos juicios por casos de corrupción en los que está involucrado Jaime. El de mayor relevancia tiene también al ex ministro de Planificación Julio De Vido como imputado. Es por la millonaria compra de trenes chatarra en España y Portugal. En ese juicio también está acusado Vázquez quien con su empresa de consultoría cobró millonarias "comisiones".
También Jaime será juzgado junto a Claudio Uberti, ex funcionario kirchnerista que en el Caso Cuadernos admitió haber recolectado coimas, por el uso particular de autos destinados al Estado.
Apenas unos meses antes de cumplirse 11 años del inicio de la causa por enriquecimiento ilícito, Jaime, que fue secretario de Transporte durante todo el mandato de Néstor Kirchner y por casi dos años del primer gobierno de CFK, tendrá que explicar por qué consiguió bienes que no puede justificar. La información proveniente de las múltiples causas en las que Jaime fue investigado, procesado y condenado indica que ese dinero provino de coimas obtenidas mientras manejó un área sensible de los negocios del Estado. Llegó pobre al gobierno. Admitió haber cobrado algunas coimas. Está preso. Será juzgado desde hoy.
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