El Tribunal Oral Federal 4 prorrogó hoy por ocho meses la prisión preventiva del empresario Lázaro Báez, detenido en la cárcel federal de Ezeiza y que está siendo juzgado por lavado de dinero por la llamada "ruta del dinero K".
La medida fue dictada ante el cumplimiento de los tres años de detención de Báez, plazo que establece el Código Procesal penal para estar detenido sin condena.
Fuentes judiciales informaron a Infobae que los jueces Guillermo Costable, Gabriela López Iñiguez y Adriana Pallioti entendieron que los ochos meses de prórroga es un lapso prudencial que se estima para la finalización del debate oral y público que está siendo sustanciado".
La misma decisión tomó el tribunal sobre el contador Daniel Pérez Gadín. Báez y Gadín fueron detenido el 5 de abril de 2016 por orden del juez federal Sebastián Casanello por considerar que en libertad existían riesgo de entorpecimiento de la causa.
Los acusados excederán los tres años de prisión preventiva que fija la ley. Pero no es el primer caso. Hubo acusados por delitos de lesa humanidad que también estuvieron en prisión preventiva más años.
El tribunal prorrogó en abril del año pasado sus detenciones por un año. Ese plazo venció hoy y los jueces la prorrogaron por ocho meses más.
"Es de especial trascendencia la concreción del debate oral y público con la presencia de todos los implicados en autos, resultando, de este modo, insoslayable tomar todas las medidas pertinentes para que el mismo no se vea afectado ya sea por una eventual sustracción del proceso o por la posibilidad de que se obstaculicen medidas probatorias que contribuirán a dilucidar la eventual responsabilidad de los procesados o bien, al recupero de activos presuntamente ilícitos", señalaron los magistrados en un fallo de 24 página al que accedió Infobae para prorrogar las prisiones preventivas.
Los camaristas explicaron que si bien la ley establece que el plazo máximo para una prisión preventiva sin condena son dos años, prorrogables por uno más, hay excepciones que permite su continuidad como la gravedad del delito. "En este sentido, no puede dejar de recordarse que estamos en presencia de un proceso de inusitada complejidad y magnitud, en el que la causa principal cuenta con doscientos tres (203) cuerpos de actuaciones principales, y más de trescientos (300) legajos e incidentes, como así también, una cuantiosa documentación", agregaron.
El tribunal también destacó la "pena en expectativa" a la que podría ser condenado Báez como un elemento de riesgo de fuga.
Baéz está siendo juzgado por el presunto lavado de dinero de 40 millones de dólares de la obra pública que recibió de los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner. También lo son Peréz Gadín, el contador Jorge Chueco, los cuatro hijos de Báez, el arrepentido Leonardo Fariña, el financista Federico Elaskar, entre ellos.
Junto con Báez y Pérez Gadín también están presos Chueco y Martín Báez, uno de los hijos del empresario.