El gobierno nacional decretó este lunes la "emergencia en materia penitenciaria" por tres años por la superpoblación en las cárceles del Servicio Penitenciario Federal (SPF): en tres años hay 3.500 presos más. Según la resolución que lleva la firma del ministro de Justicia, Germán Garavano, eso se debe a "las políticas exitosas de seguridad pública" y por ese motivo la cantidad de presos seguirá aumentando.
La decisión del Poder Ejecutivo llegó después de duras críticas por parte de la Justicia. La Cámara del Crimen dijo hace unas semanas que las cárceles "no son aptas para la condición humana" y un grupo de jueces reclamó por la deficiencia en los traslados de detenidos a audiencias judiciales.
En una resolución de siete páginas a la que accedió Infobae, el Gobierno explicó que "la población penitenciaria alojada en establecimientos del SPF ha experimentado un incremento significativo en los últimos años". "La población detenida en cárceles federales al 31 de diciembre de 2015 era de 10.274 personas, mientras que el SPF ha informado que los internos alojados al 13 de marzo de 2019 ascienden a 13.773", detalla. Y la actual capacidad de alojamiento es de 12.235.
Un funcionario que trabaja en el tema penitenciario señaló que la declaración de emergencia no cambiará nada en el día a día, sino que se trabajará a futuro. Por eso la resolución crea una Comisión de Emergencia en Materia Penitenciaria integrada por un representante de la Subsecretaría de Asuntos Penitenciarios, otro de la Dirección Nacional del SPF, y se invitó a los Ministerios del Interior, de Hacienda y de Seguridad o nombrar a un funcionario.
El Gobierno explicó que la superpoblación penitenciaria se debe a "las políticas exitosas de seguridad pública y, consecuentemente, de persecución del delito para combatir la inseguridad ciudadana y el crimen organizado" y adelantó que la cantidad de presos "seguirá incrementándose sustancialmente durante el año en curso, proyectándose un crecimiento sostenido de la población carcelaria".
La única cárcel que el gobierno de Macri inauguró en su mandato fue el complejo federal de Cuyo, en Mendoza, que a fines del año pasado fue inaugurado parcialmente. Y está en marcha la construcción de la cárcel federal de Coronda, en Santa Fe, y otra en la localidad bonaerense de Mercedes.