Tras permanecer prófugo casi un año, Fausto Jones Huala se entregó a la Justicia

Tras el rechazo de la Cámara Federal de Apelaciones de General Roca al recurso de queja a su procesamiento por los delitos de resistencia a la autoridad agravada y usurpación del predio de Parques Nacionales en Villa Mascardi, donde murió Rafael Nahuel, el activista mapuche Fausto Jones Huala, sobre quien pesaba un pedido de captura internacional, se entregó este jueves a la Justicia y quedó detenido.

Fausto Jones Huala, hermano del lonco Facundo Jones Huala, quien purga una condena a 9 años de prisión en Chile, había permanecido primero en rebeldía y luego prófugo durante casi un año. Hoy  a las 15.30, acompañado por su abogado, Matías Scharer, se entregó en el juzgado federal de Bariloche, a cargo del juez Leónidas Moldes.

Lo hizo un mes después del pronunciamiento de los camaristas de General Roca, Mariano Lozano y Richar Gallego, quienes habían rechazado un recurso de queja de sus abogados, Scharer y Sonia Ivanoff, y  ratificaron que Jones Huala debía "ponerse a derecho" y presentarse ante la Justicia.

Mediante un escrito, hoy Scharer solicitó al tribunal de Bariloche que Huala sea sometido a un juicio abreviado, según informaron fuentes judiciales. Ahora permanece detenido en una dependencia de la Policía de Seguridad Aeroportuaria, cerca del aeropuerto de Bariloche, a la espera de lo que resuelva el juez.

Fausto Jones Huala fue quien junto con Lautaro González bajó el cuerpo sin vida de Rafael Nahuel el 25 de noviembre de 2017, cuando una cuadrilla del Grupo Albatros se enfrentó contra un grupo de indígenas que intentaban recuperar un predio de Parques Nacionales en Villa Mascardi. El terreno había sido desalojado por la Justicia dos días antes mediante un amplio operativo de fuerzas policiales especiales.

El juez subrogante Gustavo Villanueva le había dictado la prisión preventiva a Huala semanas después de la muerte de Rafael Nahuel y la mantuvo al confirmarse mediante pericias que tanto él como su compañero González, quien continúa prófugo, tenían rastros de pólvora en sus manos.

Albatros procesados

El 9 de enero pasado, en un fallo de más de 300 fojas, Moldes procesó a cinco Albatros por el "homicidio con exceso en la legítima defensa" de Nahuel, de 22 años.  El joven mapuche murió por una bala 9 mm disparada por uno de los subfusiles que portaba la patrulla de la Prefectura Nacional, integrada por Francisco Javier Pintos, Juan Ramón Obregón, Sergio Damián García, Sergio Guillermo Cavia y Carlos Valentín Sosa.

Aunque en el expediente todavía no se pudo determinar de manera indubitable cuál de los Albatros y qué arma produjo el disparo fatal, ya que dos pericias balísticas exhibieron resultados contradictorios. La primera concluyó que la muerte de Nahuel había sido causada por el disparo de un subfusil MP5, asignado a Francisco Pintos, mientras que una segunda pericia realizada por Gendarmería desestimó esa afirmación.

Audiencia de apelación

Ayer, durante la audiencia de apelación al fallo de Moldes, los camaristas de General Pico escucharon los argumentos de los abogados de los padres de Rafael Nahuel, quienes exigieron una nueva pericia balística y rechazaron que el caso se dirima en un juicio oral.

Los letrados insistieron en que entre los mapuches no hubo armas de fuego aquel fatídico 25 de noviembre , sino sólo piedras como actos de resistencia contra la autoridad.  Pidieron que Pintos sea procesado por homicidio agravado y al resto de la patrulla se la impute formalmente como encubridores del homicidio.

También les solicitaron a los jueces que se les dicte la prisión preventiva a los cinco prefectos para no entorpecer la investigación.

Los defensores de los Albatros, por su parte, rechazaron el pedido de preventiva, ya que todos se encuentran a derecho, según sostuvieron, y reclamaron también la realización de una nueva prueba balística.

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