Hernán Monclá asumió el 13 de diciembre como nuevo presidente de la Asociación de Magistrados. Hubo traspaso del cargo con su antecesora, firma de acta y brindis. Comenzaba una nueva etapa. Pero duró poco. "Renuncio", dijo el flamante titular apenas dos horas después. Alegó motivos personales, pero hay un trasfondo político. El próximo lunes se hará efectiva su salida y la asunción del nuevo presidente.
La situación generó un tembladeral político interno que pasó desapercibido por los apuros típicos de fin de año, la feria judicial de enero y el bajo perfil que se le quiso dar a lo que pasó. Ahora todos en el mundo judicial hacen sus cálculos políticos.
La Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia Nacional (AMFJN) es el órgano político de los jueces, fiscales y defensores oficiales. En su vida interna militan tres listas: la "Bordó" –el oficialismo que preside el organismo ininterrumpidamente hace más de una década–, la "Celeste" y "Compromiso Judicial", que son la oposición. Compromiso nació en 2014 y fue un desprendimiento de la Celeste. Quienes se fueron objetaban la cercanía de ese espacio con el kirchnerismo.
A fines de noviembre hubo elecciones, ganó la lista Bordó, que llevó a Monclá como candidato a presidente. Pero el oficialismo perdió un integrante en el Consejo Directivo y así la mayoría. Juntos, la Celeste y Compromiso tenían más peso. Y lo iban a usar. Confluyeron en una estrategia: quitarle al oficialismo el poder en la mesa chica de la Asociación.
El 13 de diciembre asumió Monclá y el primer tema a tratar en el Consejo Directivo –de 24 miembros– fue la integración de la Mesa Directiva. Es la mesa chica de nueve integrantes por donde pasa el día a día de la asociación que se reúne una vez por semana cuando el Consejo lo hace mensualmente.
Los representantes de la oposición propusieron repartir los cargos de la mesa chica proporcionalmente: cuatro para la Bordó, tres para la Celeste y dos para Compromiso. Querían volver al viejo esquema ya que hasta ahora la lista Bordó imponía la mayoría que tenía y se quedaba con siete asientos.
La reunión fue tensa. La Bordó objetaba que la oposición quería imponer los cargos con los que se quedaba, los más relevantes políticamente. El punto central era la Secretaría General. La querían todos. Hubo discusiones, no se llegaba a un acuerdo y se pasó a un cuarto intermedio. Se generaron pequeñas reuniones y en una de ellas Monclá dijo "yo así no sigo". El Consejo se volvió a reunir y el flamante presidente anunció su renuncia, lo que generó sorpresa. La reunión se levantó. Esa noche la Asociación de Magistrados hizo su cena de fin de año. Fue la única aparición pública de Monclá como presidente.
Pocos días después el Consejo Directivo se volvió a reunir. Con la mayoría de votos de la oposición, la Bordó aceptó la derrota y se integró la mesa chica. Compromiso se quedó con la Secretaría General en donde fue designado el defensor oficial de la Cámara Federal de Casación Penal Enrique Comellas, y la Bordó con la vicepresidencia primera. Allí fue Marcelo Gallo Tagle, que el lunes se elegido presidente de la asociación.
El 20 de diciembre, Monclá presentó formalmente su renuncia: "Tengo el agrado de dirigirme a Ud. a los fines de presentar, por motivos personales, mi renuncia indeclinable al cargo de Presidente de la Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia Nacional con el que he sido honrado, a partir del 28 de diciembre del corriente año".
Pero para muchos, tanto en el oficialismo como en la oposición, es una incógnita la salida de Monclá. "Si tiene motivos personales no los explicó", le dijo a Infobae un hombre de la Bordó. "Se vio superado por la situación política interna", sostiene otro de la oposición. La referencia es a que el oficialismo llegó a la elección con una fuerte interna que generó rupturas y que Monclá quería estar rodeado en la mesa chica con gente de confianza y que no esperaban la unión de la oposición.
En la Bordó reconocen que su interna influyó. La presidenta saliente, María Gómez Alonso De Diaz Cordero, iba a ir por la reelección pero desde un sector objetaron a quienes la iban a acompañar en la lista. Hubo divisiones y Monclá fue un nombre de último momento que generó consenso.
Pero descartan un miedo escénico por la situación política. "Sabíamos que esto podía pasar desde el momento que perdimos la mayoría", dicen en el oficialismo. También sostienen que Monclá tiene experiencia para no asustarse ante una situación así porque conoce la "rosca" política. Fue asesor en el Consejo de la Magistratura de la Nación donde lidió con políticos y fue quien hizo gestiones ante el gobierno nacional cuando se discutió el pago del impuesto a las ganancias para los jueces. Actualmente es juez de la Cámara Comercial.
Infobae se comunicó con Monclá para conocer su opinión pero no contestó los mensajes.
La situación genera enojo y preocupación en el oficialismo. "Nos dejó en el momento que discutíamos con el gobierno el impuesto a las ganancias y nos deja mal parados ante nuestros votantes que nos reprochan haber llevado a un candidato que ahora se va", describen.
La Celeste y Compromiso lo viven como un triunfo. "La Bordó va a pagar el costo político", dicen en la oposición. Ayer, la Celeste sacó un comunicado bajo el título "¿Y donde está el presidente?". "Es preocupante que quien fuera electo Presidente desprecie tan abiertamente la voluntad expresada por el electorado de manera democrática. Lamentablemente, todo esto hace suponer la existencia de un candidato testimonial", señala el texto.
Pero en la Bordó también sostienen que pueden sacar rédito. "La Celeste y Compromiso demostraron que son lo mismo y ya muchos lo están diciendo. En el fondo siguen siendo todos Celeste", analizan en el oficialismo.
En lo formal Monclá sigue siendo el presidente porque la renuncia no fue aceptada. Pero durante enero quien tomó las riendas de la Asociación fue Gallo Tagle. A fin de año, Monclá se fue al exterior.
El lunes a las 15:30 se reúne nuevamente el Consejo Directivo. Allí se aceptará la renuncia y se nombrará a Gallo Tagle como nuevo titular. Pero podría darse una situación insólita. Gallo Tagle es el actual vicepresidente y quién lo reemplazaría es quien ocupa vicepresidencia por el Ministerio Público Fiscal. Ese cargo lo tiene la fiscal Paula Asaro que es de Compromiso. Compromiso salió última en la elección. La Asociación podría tener un presidente y una vice de distintas listas. Tanto el oficialismo como en la oposición creen que eso no va a ocurrir y que la Bordó también tendrá la Vicepresidencia Primera para respetar el resultado de la elección.
El nuevo presidente
Marcel Gallo Tagle será el nuevo titular del organismo. Es juez civil desde 2009, fue uno de los fundadores de la Lista Bordó y está en la política judicial desde 1991. Dentro de su espacio se referencia en el sector de Ricardo Recondo, uno de los líderes de la Bordó que fue presidente de la Asociación y actualmente es titular del Consejo de la Magistratura. "Recondo se queda con todo el poder", dicen en la oposición.
También le reconocen a Gallo Tagle, de 58 años, ser un hombre de diálogo y con quien se puede llegar a consensos. Y con gestión porque fue dos veces secretario general de la Asociación y otras dos vicepresidente de los funcionarios.
Presidirá una asociación con voltaje político interno y derivaciones que nadie quiere aventurar. Pero todos aseguran que en los objetivos centrales los jueces, más allá de los colores, estarán juntos.