Los riojanos le dieron la espalda a la consulta popular impulsada por el gobernador Sergio Casas para validar una refrenda constitucional que le permitirá competir por la re-reelección en los comicios locales.
Menos de la mitad del padrón se presentó en las urnas. Sin embargo, lo que para muchos analistas representa una falta de legitimidad al resultado de las elecciones, para el peronismo es el perfeccionamiento de una estrategia que había sido pergeñada con un mero fin electoralista.
Así surge de las declaraciones de un diputado oficialista, quien admitió que se decidió a propósito hacer la elección el 27 de enero (pleno verano, con mucha gente de vacaciones fuera de la provincia) para garantizar que no se impusiera el "No".
"Esa fue la especulación y la clave, la inteligencia de esta elección. Así que no nos pongamos tristes si no hemos llegado al 50% (de los votantes que participaron de la enmienda), pongámonos contentos. Ahí está la viveza, porque los peronistas somos vivos, no somos pelotudos, somos bien vivos. Sabíamos que en ese 50% no iba a llegar el No al 35%", remarcó Lázaro Fonzalida, ex intendente de Chilecito y actual diputado riojano.
El resultado de las elecciones generó una polémica que terminará definiendo la Justicia. Surge de la ambigüedad en la redacción del artículo 84 de la Constitución provincial, que abre lugar a varias interpretaciones: "Toda propuesta que sea sometida a consulta popular obligatoria se tendrá por rechazada por el pueblo si una mayoría de más del 35% de los votos de los electores inscriptos en el Registro Electoral no la aprueba".
A las urnas asistió apenas el 44% de los ciudadanos habilitados. Con el 99,12% de mesas escrutadas, el 25% del padrón votó por el "Sí" y un 17,9% por el "No".
Con estos resultados, desde Cambiemos-Fuerza Cívica Riojana amenazan con ir la Justicia porque entienden que el oficialismo debía superar el 35% del padrón para ratificar la reforma. Y como eso no sucedió, Casas no quedaría habilitado para postularse.
Desde el oficialismo hacen otra lectura y se sienten vencedores de la contienda. Sostienen que los votantes que se oponen a la re-reelección quedaron en el 18% del padrón", cuando se requería el 35% para frenar la reforma.
"Dijimos que enero es el mejor mes para hacer la elección, o sea la consulta obligatoria. Dijeron (desde la oposición) 'no va a ir más del 40 por ciento, entonces no van a poder sacar el 35 por ciento'. Eso fue parte de la estrategia que se armó en la provincia junto al gobernador, el fiscal de Estado y todos los diputados que votamos la enmienda", confesó Fuenzalida, quien también admitió que sabían que el 27 de enero (fecha en que se hizo la elección) mucha gente iba a estar de vacaciones "a pesar de la crisis".
Además, dijo que el peronismo debe seguir unido, pase lo que pase: "Hay que estar unidos y ganar. Lo hemos dicho muchas veces, la política es para los que ganan. El peronismo unido jamás será vencido".