En medio del operativo de seguridad por la cumbre de presidentes del G20 en Buenos Aires, el gobierno británico advirtió, dentro de las recomendaciones a sus ciudadanos que vengan al país, que "los terroristas posiblemente traten de ocasionar ataques en Argentina. Los ataques podrían ser indiscriminados, incluyendo lugares frecuentados por expatriados y viajeros extranjeros".
Si bien desde el Foreign Office dijeron que las advertencias no tenían nada que ver con el operativo del G20, lo cierto es que la alerta que se emitió generó algo de inquietud en Casa Rosada y un fuerte revuelo en las redes sociales.
"El objetivo de las recomendaciones para viajeros (travel advice) del Foreign Office es el de proveer información y asesoramiento para ayudar a los ciudadanos británicos a tomar sus propias decisiones en viajes al exterior. Se mantienen todas las recomendaciones bajo una constante revisión y se realizan actualizaciones periódicas", dijeron a Infobae voceros del Foreign Office.
En el informe de la diplomacia británica se añade que "desde 2004 hubo una serie de ataques con pequeños explosivos en Buenos Aires y las provincias vecinas que, se cree, han sido lugar de grupos antiglobalización. Los blancos fueron sobre todo bancos".
También sostiene el informe de recomendaciones del Foreign Office que "existe una mayor amenaza de ataques terroristas a nivel mundial contra los intereses del Reino Unido y los ciudadanos británicos, de grupos o personas motivadas por el conflicto en Irak y Siria".
En tanto, aclararon que "para Argentina ya había un párrafo sobre terrorismo, al que ahora le cambiaron media oración pero la nueva versión dice algo muy parecido a lo que dice el travel advice para decenas de países como Estados Unidos, Colombia, Alemania y Francia".
De esta manera, desde Londres buscaron restarle dramatismo a las advertencias para viajeros que hizo el gobierno británico a los ciudadanos que viajen a la Argentina. Desde la Cancillería no harán comentario alguno por el momento y entienden que se trata de una recomendación "de rutina", que de todos modos generó cierto malestar.