La furia de Macri: ¿un mensaje para los gremios o el inicio de la privatización de Aerolíneas?

"Que los sindicatos entiendan que la fiesta que tienen hace décadas se acabó".

Mauricio Macri está furioso con el paro sorpresivo de los gremios de aeronavegantes de esta mañana. No es para menos: la medida de fuerza paralizó los principales aeropuertos del país con la cancelación de al menos 70 vuelos y afectó a más de 10 mil pasajeros.

La frase se escuchó en las oficinas del Ministerio de Transporte, minutos después de que el Presidente brindara un discurso inquietante en la inauguración de un hotel en la localidad bonaerense de Pilar: "No es justo que el 95% de las personas que no usan aviones tengan que pagar para que Aerolíneas funcione".

"También lo tiene que entender la gente que trabaja ahí", seguían, furiosos, en Transporte. En el entorno de Guillermo Dietrich, el ministro a cargo del área, se aseguraron de aclarar que los dichos presidenciales estaban, de todos modos, especialmente dirigidos a los gremios que pararon sorpresivamente en las primeras horas de hoy. Y que, al menos por ahora, no hay señales de privatización de la aerolínea estatal.

"Aerolíneas Argentinas, producto de la devaluación, del aumento del precio del petróleo, ha aumentado nuevamente su necesidad de financiamiento; desde que se estatizó, los argentinos tenemos que poner plata todos los meses para que funcione. La mayoría de las lineas aéreas que funcionan en el mundo no requieren que los ciudadanos de esos países pongan plata todos los meses", abundó Macri, visiblemente molesto.

"Lo que necesitamos ahora es hacer un esfuerzo, es el mensaje que le doy a los dirigentes sindicales", reforzó minutos más tarde el propio Dietrich, en Ezeiza, ante el reclamo salarial de los sindicatos. En el Gobierno creen que los gremios entorpecen la llamada "revolución de los aviones", que incluye una apertura agresiva del mercado con la proliferación de compañías low cost.

Miles de personas están varadas por el paro de Aerolíneas (Foto: Adrian Escandar)

La supuesta privatización de Aerolíneas Argentinas, que en el entorno de Macri rechazaron hoy nuevamente -"no hay ninguna posibilidad", dijeron-, estuvo durante estos años en el ideario de los gremios y algunos sectores del mercado aeronáutico. Pero nunca había habido alguna señal tan clara en ese sentido como las declaraciones presidenciales de esta mañana.

Macri había tenido que aclararlo varias veces durante la campaña presidencial del 2015, cuando desde el kirchnerismo hacían fila para plantear tal posibilidad, entre otras supuestas medidas del líder del PRO en caso de que llegara a la Presidencia.

En julio de ese año, en el escenario de Costa Salguero, la noche de los festejos del ballotage porteño en el que Horacio Rodríguez Larreta venció a Martín Lousteau, Macri aprovechó para ahuyentar fantasmas. Dijo que YPF y la aerolínea de bandera seguirían en la órbita del Estado en caso de llegar a la Casa Rosada. Aunque aseguró: "Con los 5 mil millones de pesos que perdió todos los argentinos tendrían cloacas".

Seis años atrás, sin embargo, Macri pensaba otra cosa. En medio de las elecciones de medio término del 2009, el entonces jefe de Gobierno porteño cuestionó la reestatización de Aerolíneas y de las AFJP -dos banderas de la administración K-. Desde el kirchnerismo salieron a cruzarlo con dureza: lo acusaron de querer volver a los 90. El líder del PRO recibió en esos chispazos el apoyo de Francisco de Narváez, aliado legislativo de ocasión.